Capitulo 53

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Es la mañana siguiente, están cansados por el viaje y pasar toda la noche en vela.

- Hazz.- Murmura Louis en el silencio de su habitación.

Harry le acaricia la espalda, es su intento de no dejar que la oscuridad absorba los ronroneos que solían arrullarlos, que les calentaban el corazón y le hacían sonreír.

- Tienes que comer algo.

Harry asiente débilmente, su pecho apachurrado intentando contener los agresivos hipidos que toda la madrugada no pudo controlar.

- ¿Quieres leche con chocolate?- Susurra el menor.

Harry parpadea lentamente.

- Louis, quiero a Romeo aquí conmigo, lo necesito con nosotros.- Susurra con la voz temblorosa.

Louis se gira entre los brazos de su novio, entre las suaves colchas que los acogieron desde que llegaron del veterinario.

- Lo sé amor, no hay nada que yo anhele más, créeme que daría todo por tenerlo aquí, pero hay que ser fuertes por el, tienes que comer algo.

Harry niega con la cabeza y suelta un llanto ruidoso, todo el dolor que estuvo acumulando durante estos últimos meses y que el fallecimiento de su gato derramó es suficiente para cegarlo.

Louis dejó un suave beso en sus labios y le limpió las lágrimas, salió de la habitación y corrió hacia el pasillo.

Intento ignorar el plato para felinos en el suelo.

Tomó dos cajitas de leche con chocolate y una rebanada de pan con mermelada.

Antes de poder salir corriendo hacia la habitación, escuchó los suaves pasos de Harry detrás de él. Se giró en sus talones y enfrentó el alto cuerpo y de su novio.

- Toma.- Dijo con una suave sonrisa dejando la comida frente a él.

Harry se subió al blanquito y sin decir palabra alguna mordió la rebanada de pan.

Louis, con un poco de miedo, se acercó al rizado y se sentó en su regazo, su cabeza quedó recostada en el hombro del mayor y lo dejó comer tranquilo.

- Hasta su último momento fue el mejor gatito del mundo.- Susurró Louis.

- ¿Por qué lo dices?

Louis se encogió de hombros y limpió la comisura de los labios de Harry.

- El estaba muy enfermo, sabía que se iría pronto pero resistió hasta que nosotros nos fuimos, no quiso que lo viéramos irse.

Harry miro al techo unos segundos y rápidamente bajo la mirada negando con la cabeza y una absurda risa.

- Sabia que no lo soportaríamos.- Resopló.

Louis se unió a su risa y asintió.

- Claro que lo sabía, conocía muy bien a sus padres.

No hay mucho que decir, perdieron a su gato, perdieron a un integrante de su pequeña familia, no hay nada que pueda curar esa herida, está fresca y derramando líquido escarlata.

Romeo los unió, los hizo madurar y también les enseñó un cariño diferente al que puedes sentir por tu pareja, familia o amigos.

El gato con su pelaje anaranjado y los ojos de aceitunas, moviendo su cola como un leoncito reinando en la sabana, con sus ronroneos de felicidad cada que lo dejaban dormir en la cama y sus maullidos de molestia cuando Harry abrazaba a su Louis.

...

Una semana después no hace que superen la pérdida, probablemente jamás lo harán, pero entre la promoción del nuevo disco de The Rogue y el nacimiento de los hijos de Alanna, sus mentes están demasiado ocupadas como para deprimirse entre las sábanas.

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⏰ Last updated: Dec 11, 2023 ⏰

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