┃Capitulo 20┃

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Mientras la noche caía en la ciudad de Tokio siendo opacada por las muchas luces de la ciudad, dos almas anhelaban con todo su ser que sus corazones se sincronizarán y se fundieran en uno solo.

Katsuki e izuku no se habían dirigido la palabra después de aquel momento tan vergonzoso, solo habían intercambiado un par de opiniones sobre el trabajo, pero nada más.

Incluso se habían sentido incómodos al comer juntos, ya que sus orejas rojas los delataban por completo actuando como dos adolescentes en preparatoria que apenas estaban descubriendo sus sentimientos el uno por el otro.

Ambos habían llegado juntos a casa pero no habían intercambiado palabras puesto que katsuki no espero ni un solo segundo antes de correr hacia su habitación a encerrarse, hacia mucho tiempo que no se sentía de ese modo.

Ni siquiera con su ex novio, no había estado pensando en el desde que salió de casa, se había olvidado por completo de la existencia de este, solo se había estado concentrando en el y su bebé, pero jamás pensó que le caería cómo un búnker la presencia de izuku en su vida.

Katsuki estaba hecho ovillo en sus sábanas ocultando su enrojecido rostro mientras sobre pensaba las cosas, el sabía que no era normal lo que sucedía en tres el e izuku, ellos solo eran como compañeros de apartamento y trabajo.

Ellos no deberían de tener ningún tipo de reacciones ante el otro, por eso no era normal, ¡Maldición estuvieron a punto de besarse!, ¡BESARSE!, mientras el solo pensaba que que clase de relación tenían.

El no era quien para atar a izuku a él, después de todo el pecoso lo había quedado como un amigo sin pedir nada a cambio, mientras el solo pensaba en que hubiera pasado si Momo no los hubiera interrumpido.

¿Se habrían besado?

¿Habrían pasado más allá de los besos?

El solo pensar en el choque de sus labios sobre los de izuku formando una armonía entre ellos intercambiando saliva, eso haría su corazón latir a toda prisa, un beso entre ellos dos haría de su mente un revoltijo de pensamientos.

Como siquiera podría pensar en besarlo, se sentía un pervertido por tener las claras imágenes de el e izuku intercambiando un beso.

¿Izuku lo besaría suavemente?

El solo pensamiento hizo que enterrará más su rostro sobre la almohada mientras su rostro se recalentaba aun más al tener una imagen de el e izuku compartiendo un beso apasionado, izuku era un alfa fuerte, robusto y muy alto, había notado como los colmillos de este aparecían cuando esté estaba enojado, colmillos grandes, una voz y aroma imponentes.

Izuku podría darle más cachorros fuertes, grandes, y de una buena descendencia, su mente traicionera solo le hizo pensar a izuku con el y un bebé en sus brazos compartiendo un beso como una pequeña familia, en ese momento su cerebro hizo corto circuito.

Ese era la imagen más jodidamente hermosa del mundo.

Algo con lo cual soñaba su naturaleza Omega, un alfa que estubiera dispuesto a protegerlos y a su cachorro.

Solo ellos tres.

Un suspiro triste salió de su boca mientras se estrellaba contra la realidad, izuku era un alfa muy guapo, el debía tener a varios Omegas detrás de el, seamos sinceros, izuku era un gran empresario con un gran futuro brillante, el se merecía un Omega puro y hermoso el cual estuviera dispuesto a darlo todo por el, no un Omega abandonado.

♡𝐂𝐨𝐧𝐟𝐢𝐚 𝐄𝐧 𝐌𝐢♡ ───DᴇᴋᴜᴋᴀᴛsᴜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora