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Cuando los cuatro campeones empezaron a caminar hacia el centro de la pista para iniciar el baile, Brooke sintió como muchos ojos se encontraban en ella. Sería muy egocéntrico pensar eso?
-Todo bien?- le preguntó el Hufflepuff ahora preparándose para empezar a bailar. -Todos... nos están mirando.- murmuró ella muy nerviosa, haciendo reír a Cedric.
El castaño la tomó de su cintura y la acercó a él, notando como la chica se tensaba. -Créeme, solo te miran a ti.- le dijo con una sonrisa encantadora, consiguiendo que la Gryffindor tragara hondo de los nervios.
La música empezó a sonar y las cuatro parejas empezaron a bailar ante las atentas miradas de todo el salón. -Lo estoy haciendo muy mal, verdad?- preguntó ella mirando sus pues con torpeza.
Cedric la tomó de la cintura y le dio una vuelta, consiguiendo que ella ahora se fijara solo en él, teniendo toda su atención. -Déjate llevar.- le dijo con una pequeña sonrisa provocando mariposas en su estómago.
Brooke no evitó soltar una risa nerviosa. La presión era demasiada, la probabilidad de fallar era maxima y tenía todas las cartas encima de la mesa. -Recuérdame no volver a aceptar ser tu pareja para venir a un baile como este de nuevo.- murmuró ella notando como ahora habían más parejas que se unían en el baile.
Cedric quien seguía el ritmo de la música sonrió más y decidió seguirle el rollo. -Y que te hace pensar que volvería a invitarte?- le dijo levantando una ceja.
Brooke rodó los ojos, ahora empezando a relajarse y a divertirse. -Ambos sabemos que lo harías, por qué estás tan enamorado de mi...- empezó a decir ella.
El castaño por otra parte solo le dio una vuelta. -No lo estoy.- trató de excusarse.- No me gustas... ya te lo dije en su día. -Aha... entonces, supongo que soy una muy buena amiga, verdad?- le preguntó ella de manera burlona y con tono irónico.
Y Cedric cada vez se quedaba sin ideas. -Supongo.- respondió con simpleza.- Por qué tanto interés?
La música cambió a una más movida, find e todos empezaron a bailar y a saltar de emoción mientras bailaban cada uno a su ritmo. Brooke por otro aparte, siguió junto con Cedric, ahora si riéndose más cómoda de bailar como ella sabía.
Empezó a moverse mientras pasaba sus manos por el pecho de este y se dejaba llevar. -Por qué... como buena amiga que soy, podrías decirme quien te trae loco. Quien te gusta realmente?- le preguntó mirándolo directamente.
No, no, no eso era muy malo. -Bueno... no voy a mentirte, la verdad es que creo que me gusta una chica.- mencionó algo nervioso, mientras seguía bailando. -Una chica, es bueno saberlo.- respondió o está riendo.- Que más?
Cedric le tomó de la mano y la sacó de la pista de baile, consiguiendo tener más privacidad, ambos se sentaron en una de las sillas. Brooke por otro lado le entregó un vaso con ponche. -Y bien?- preguntó de nuevo ella.
-Claro... eh, bueno... verás ella tiene, dos ojos, y una nariz. Y dos manos.- trató de explicar este haciendo que la Gryffindor levantara sus cejas.- Y también tiene dos piernas. -Entiendo...- empezó a decir no muy convencida.- Bueno, no quiero presionarte.
-Hola pareja.- dijo Anthony llegando y colocándose al lado del chico el cual bufó.- Como va la noche? Brooke, te ves bien. -Claro que se ve bien, donde está tu pareja?- respondió el castaño.
La chica sonrió para si misma. -Iré un momento con Fred y George, ahora vuelvo.- dijo levantándose de allí, despeinando al castaño en el proceso.
Ahora, Cedric solo miraba como la chica abrazaba a los pelirrojos los cuales se veían muy orgullosos de ella. -Merlín, si que estás enamorado.- murmuró su amigo mientras vecina de su vaso.
El castaño suspiró con una sonrisa tonta. -Debería decírselo?- preguntó de repente haciendo que Anthony abriera los ojos. -En serio? Lo harás? Digo que si... deberías.- respondió emocionado.
-Claro... ella es asombrosa, verdad?- dijo este mientras se levantaba.- Ella es... la indicada. -Claro que si Romeo, ve con ella y díselo.- le animó este con una sonrisa divertida.
Mientras, Brooke se encontraba con sus mejores amigos. -Habéis visto lo bien que he bailado?- preguntaba ella emocionada.- Lo he hecho bien, verdad?
George le dio una vuelta mientras reían. -No sabíamos quién eras, parecerías una princesa.- le dijo Fred también sonriendo orgulloso. -Me hubiera gustado que te tropezaras pero me conformo.- mencionó el gemelo menor.
La Gryffindor rodó los ojos. -Y que tal lo llevas?- le preguntó de nuevo George.- Has conseguido que Diggory se enamore de ti? -Eh, bueno... aún estoy en proceso.- murmuró ella.- Sabéis? Creo que le gusta alguien.
Fred ladeo la cabeza con curiosidad. -Y esa persona eres tú, cierto?- preguntó con obviedad a lo que la chica negó.- No me hagas reír, puede que no lo haya admitido pero... se nota mucho.
-Demasiado, no juegas mal tus cartas pequeña.- mencionó George mirando detrás de ellos, viendo como poco a poco, el castaño se acercaba a ellos.
Brooke miró a Cedric e inconscientemente una sonrisa empezó a surgir en ella, haciendo que tanto Fred como George se miraron entre sí, entendiendo que el Hufflepuff se había ganado un lugar en su corazón.
-Hey, como... como va todo?- preguntó este algo nervioso pasándose una mano por su cabello. -Entonces, quien le pidió a quien?- preguntó Angelina con curiosidad.
-Me encanta la pareja que hacéis!- añadió Katie mientras aplaudía emocionada. -Pareja?- preguntaron los pelirrojos y los implicados a la vez.
-Si! Sois adorables!- siguió diciendo la morena, provocando que Cedric se sonrojara. -Por un momento tuve envidia de ti Cedric, después, al veros bailar... ha sido mágico!- mencionó Katie de nuevo.
-Qué?- preguntaron de nuevo todos. -Oh, no... no sois un poco jóvenes para tener un bebé?- preguntó ahora Fred con intención de molestar.
-Bebé?- preguntaron George y los implicados. -No, no quiero ser tío aún.- mencionó el pelirrojo que entendió que solo bromeaban.
-Aww, imaginar lo bonitos que serán sus hijos!- dijeron las chicas con ternura, haciendo reír a los gemelos. -Ahora son hijos?- preguntó Brooke mirando a Cedric el cual no entendía nada.- Quieres...
-Tener bebés?- preguntó ahora con sorpresa. -No, que si quieres ir... a por ponche.- dijo esta ahora intentando no reír.
Ahora, él se veía como idiota no obstante miró lo feliz que se encontraba ella y decidió no arruinar lo que quedaba de la noche.
