𝑬𝒍 𝒉𝒊𝒍𝒐 𝒓𝒐𝒋𝒐 (Tn x Keisuke Baji)

𝟙𝟠

Aún me duele mi cuerpo y ni siquiera soy capaz de mirarme porque cuando lo hago solo recuerdo la cara de ellos riéndose de lo que me estaban haciendo. Draken ha estado hablando muchas veces por teléfono mientras yo dormía, algo sobre la guerra de las tres deidades.

-Señorita-habló el padre de Hina.

-¿Heh?

-Tiene que identificar a los sospechosos. ¿Conoce a uno de ellos?

-Solo a una, pero puedo dar una descripción de los demás-dije mirando hacia la ventana.- Olivia Wang es una de los que me atacó.

-Bien, ¿puedes describir a los otros dos?-preguntó mientras la oficial a su lado anotaba todo lo que estaba diciendo. Asentí y cerré los ojos recordando, sus rostros...¿como iba a olvidarlos?.

-Uno de ellos mide más de dos metros...cabello rubio y ojos azules... tiene su cabello afeitado excepto la parte superior donde lleva un moño...También tiene un tatuaje de gran tamaño en el lado derecho de la cara y sien... es como una especie de criatura con muchos ojos y dientes afilados.- comencé a llorar- Perdón-dije en un susurro mientras abría mis ojos.

-Tranquila, es algo difícil de hacer. Toma tu tiempo-dijo la mujer a su lado mientras me sonreía. Vaya que es dificil sonreir en esta situación, no termino de asimilar lo que sucedió.

-El segundo debe medir 1.70...cabello rubio y ojos negros...Tiene el cabello largo peinado hacia la derecha, en el lado izquierdo tiene un tatuaje de león que llega hasta su cuello... Tiene una pequeña cicatriz cosida debajo del lado izquierdo del labio. 

-Lo hiciste muy bien, mi princesa-dijo mamá intentando abrazarme pero me negué. Apenas podían tocar mi mano porque comenzaba a gritar o llorar, no se porque reacciono de esta manera pero lo hago por instinto.

-No me toques-dije mientras me cubría con la sábana.-¿Fue mi culpa?

-¿Heh?-dijeron los oficiales y mi madre.

-Jamás va a ser tu culpa, tu solo estabas buscando a tu gato... Eres la víctima aquí no el victimario, no pienses que tu lo pediste pero ninguna mujer lo pediría.

-Ni siquiera fui capaz de gritar-dije entre lágrimas.

-Sobreviviste y eso es lo importante-hablo mama mientras intentaba abrazarme nuevamente.

-¡No me toquen!-dije en un grito mientras mis lágrimas aumentaban.- No me toquen, por favor-mi pedido parecía una súplica.

-Tranquila...-dijo mamá mientras me miraba con tristeza, mama se que estas desilusionada de mi.

-Lo mejor seria que comience con un psicólogo...-dijo una de las enfermeras que inyectó un calmante en la vía que tenía en mi mano izquierda.- Ella ha tenido dos ataques de ansiedad y se intentó sacar el respirador muchas veces mientras dormía, aún no puede caminar y su trauma vaginal es muy severo...

-Mi niña-dijo mamá llorando. Solo me limite a mirar por la ventana mientras los presentes hablaban de que sería mejor para mi...¿lo mejor para mi?... Si antes quería morirme ahora mis ganas de hacerlo son mucho mejor, ni siquiera puedo ver mi propio cuerpo sin tener asco.

(...)

-Tiene trastorno de estrés postraumático...-habló la mujer mientras yo solo la miraba en silencio, contar mis emociones ha sido como liberar una carga para mi pero aun no puedo mirarme.- La vergüenza y la culpa son emociones muy dolorosas e imposibles de evitar en muchos casos y que hacen que el malestar se incrementó, cuando es evidente que una víctima nunca es la responsable de lo que ha sucedido... Tendremos que trabajar mucho en que pienses que no fue tu culpa, la vergüenza tienes que dejarla de lado y saber que pudo haberle ocurrido a cualquiera... Aunque aquí es poco común esto así que vamos a hacer todo lo posible para que tengas la justicia que toda mujer necesita.