Capitulo 9 El rescate

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                              Verónica.

 

Nos vendaron los ojos y nos subieron a una camioneta, no estaba asustada ni nada pero estaba preocupada por Lili. Habían asesinado a mis escoltas, no eran ingleses… eran rusos.

Estaba bastante aterrada, pero también sabía que ellos pedirán rescate. Pero no sabía si mi padre podría resistir una noticia así. Maldita sea.

Nos tienen de manos atadas.

Momento antes

 

Todo iba relativamente bien, Lili ya no hablaba con ese idiota, mi padre se mejoro, la empresa se salvó de una catástrofe. Estaba bastante feliz por todo lo que estaba pasando, ya era febrero así que la primavera se estaba acercando a su punto final, lo que significaba que tendríamos vacaciones de verano. Lo único era que tendríamos exámenes hasta más no poder, por alguna razón a los profesores les gusta dejar trabajos a última hora, aún así no son tan complicados.

Me levanté temprano lo que era extraño incluso para mí, fui a despertar a Lili para darle una sorpresa.

—Lili—susurre lo más despacio posible pero mis intentos no estaban dando resultado así que la desperté de un susto—. ¡Lili!—eso último si logro despertarla de un golpe.

—¿Q…Que sucede?—mi amiga tiene los ojos algo pequeños así que era difícil saber si estaban abiertos o aún estaban entre cerrados.

—Cuando te despiertes bien quiero que empaques tus cosas que nos vamos a de campo a un lugar muy bonito, ya se que no te gusta ir a la playa así que prepare esto desde hace rato.

—Me agrada la idea, y… ¿Es necesario irnos ahora?— la pregunta me ofende pero se lo paso ya que aún intenta despertarse.

Nos arreglamos y salimos rumbo a nuestro campamento, quedaba  lejos de los Ángeles pero era el sitio perfecto para distraernos de todo. El lugar se llama Adirondack park, es perfecto.

—¿Te gusta?

—Es muy bonito—a ella le brillaban los ojos al ver el lugar, no pude darme su regalo de cumpleaños pero se que a ella no le gusta ese tipo de detalles.

—Me alegra que te guste, busque muchos lugares y la mayoría estaban ocupados, así que investigue aquí en Nueva York. Así di con este lugar, como no es temporada pues quedó perfecto.

Exploramos más el sitio y encontramos un lugar para poder armar nuestra casa de campaña, al llegar la noche encendimos nuestra fogata y comenzamos a comer bombones que en lo personal me encantan cuando se queman al punto de que el fuego los haga casi cenizas.

El lago y los animales del lugar eran de verdad sorprendentes.

Casi no vimos personas. Lo cual era algo aterrador cuando llegaba la noche. Claro, siempre íbamos acompañadas por si pasaba algo. Ellos están listos para morir en caso de que llegue a pasarme algo. Me parece de locos que aún así firmarán el contrato.

A la mañana siguiente fuimos a escalar montañas y Lili saco fotos del paisaje, una que otra vez ella corría porque encontraba arañas en los árboles o cosas así. Es extraño ya que ella le teme a las arañas y no a las serpientes, en fin nuestra aventura estaba llegando a su fin. Solamente nos quedamos cinco días, nos dirigimos al aeropuerto para tomar el avión a casa lo que nos tomaría cinco horas en llegar. Soy una persona que viaja mucho y aún así es mucho tiempo de viaje. Me sorprende que de tanto estar sentada no me haya quedado sin nalgas.

Nuestra Maldición Where stories live. Discover now