Capítulo 28 Los declaro...

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                               Erick.

Hoy era el día tenía que preparar todo para que fuera un día perfecto en el cual ella se sintiera cómoda y no se sintiera presionada por todo lo que me está pasando ahora.

Empezamos los preparativos un día antes para que no se diera cuenta, para ello fui a hablar con Lili sobre este tema, ya que no sabía que estaba pasando. Pero cuando hablé con ella me dijo que era su cumpleaños de Vero, me sorprendió, pero que ya no solía festejarlo porque decía que se hacía más vieja y que su juventud se estaba yendo, no terminé de hablar con ella me subí al cuarto por suerte, seguía dormida le dije que no dijera nada sobre esto porque sé que ella sería la primera que investigarlo todo.

Tres días previamente yo fui a comprar un vestido era uno blanco por qué la sorpresa que le tenía era nuestra boda.

Sí suena muy apresurado demasiado diría yo, pero si yo no vuelvo al menos quisiera quedarme con este recuerdo, no quiero ser negativo al respecto, pero hay cosas que simplemente yo sé que no puedo ser positivo porque me es imposible pensar en otra posibilidad en la que ellas pueden estar tranquilas sin nosotros.

Deje el vestido en la cama por momento creí que se despertaría, ya que se empezó a mover en forma muy brusca, me equivoqué solo tenía calor, para mí fue un alivio, ya que si nota mi plan se arruinaría. De cierta formas yo puedo llegar a ser una persona algo perfeccionista.

Toda la familia estaba lista sería que no teníamos tanto tiempo para contratar un abogado.

Se podría decir que es como una boda falsa aunque en mi corazón era real. El anillo lo compré yo sé que a ella le gusta mucho el color azul así que le compre un anillo de ese color, con unos toques de morado como si fuera una galaxia y el diamante no podía faltar en medio, el mío era casi igual que ella solamente que un poco más grueso. Me encontraba preparando los últimos detalles.

Mis nervios no se podían hacer esperar, así que mi hermano me intento tranquilizar  un poco y le dio la señal a Lili para que fuera despertar a mi futura esposa.

                             Verónica.

Me levanté casi con mi amiga encima de mí diciéndome que me levante rápido yo creí que nos estaban atacando o algo parecido, pero no, me dijo que Erick tenía una sorpresa y yo de inmediato pensé que ya le había dicho sobre mi cumpleaños. Me dijo que no, que esto fue una gran coincidencia. Yo no le creí mucho así que me levanté. Al hacerlo pude notar un vestido blanco con un encaje muy hermoso en las mangas y en el cuello un escote en la espalda no sé cómo supo que adoraba ese tipo de diseños.

—Amiga, ¿ya puedo ver?—pregunto Lili impaciente.

—No, aún no.

—¿Ya mérito?

—Bueno, está bien, ya puedes ver.

—Woow. Te ves hermosa.

Yo sé que compro mi vestido, pero sentía que estaba algo largo para mi gusto así que decidí darle unos pequeños retoques.

—Lili pásame mi tijera hilo y aguja.

—¿Para?... —su cara era de preocupación, pero sabía lo que tenía que hacer.

—Solo pásamelos.

No sabía para qué hora tenía que estar preparada, pero aun así lo hice me corté el vestido un poco para que me llegara casi hasta las rodillas sentía que se veía  y así mostraría mis piernas y yo sé que me gusta provocarlo a veces, pero es que también lo hace conmigo y no sé si lo hace consciente o inconscientemente.

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