La "niñera" ~Nico González ~

Final...

meses después

Narra Gala:
Ya estoy de 8 meses y apenas camino, de echo ya no camino solo ruedo por la vida. Tengo a personas a mi lado que están al pendiente de mi 24/7 y aunque me agobian los amo. Mi suegra me trae a diario pasteles hechos por ella que le quedan deliciosos y que nos encantan a mi príncipe y a mí, y de vez en cuando lo compartimos con Nico, que por cierto anda demasiado extraño y nervioso, mira su teléfono cada 5 minutos y ya me está poniendo de mal humor. Bueno también tengo a Mario y Joel que me llaman y vienen a ver cada vez que pueden, ya que por los viajes y partidos pasan poco por aquí. Noto que Nico se mete la mano al bolsillo de nuevo para sacar su teléfono pero lo regaño.
-Ya deja de mirar ese maldito teléfono , ¿esperas la llamada de alguien importante?.
-No amor- me responde nervioso y suspiro. Solo espero que no sea lo que estoy imaginando porque jamás lo perdonaría si me engaña. Hemos pasado por muchos altos y bajos con el tiempo pero siempre uno termina cediendo. Aún recuerdo el día que le conté mi enfermedad...

Flashback
Cuando ya estoy más tranquila suspiro dándome fuerzas, me separo un poco de su abrazo y me mira de una manera tan bonita, solo espero que no lo tome mal.
-Estoy en terapia porque tengo bulimia, osea ya lo estoy superando... algo- estoy tan nerviosa que hablé muy rápido. Él me mira con sus ojos abiertos como plato, nosé si está sorprendido por lo que le acabo de decir o es que no me entendió nada de nada- Nico ...
-¿Hace cuánto estás con eso?, no tenía idea, nosé cómo no me di cuenta antes, nosé...- comienza a hablar frustrado pasándose las manos por la cara.
-Nico por favor- tomo sus manos y me mira con pena- no me mires así, no quiero que me tengas lástima ni pena, te lo digo porque tú querías saber y porque mi sicólogo me recomendó que te lo contara.
-¿Le has hablado de mí?.
-Sí- suspiro pesadamente- todo comenzó cuando apareció Elisa y bueno, no me sentía suficiente para tí y me daba ansiedad que me hacía comer mucho, pero luego me daba culpa y vomitaba todo.
-El que no te merece soy yo- dice con tristeza- lamento todo lo que te eh echo pasar, eres la mujer más hermosa que eh conocido en mi vida y de tonto te hice daño, te juro que jamás te eh engañado porque no tengo ojos para otra mujer.
-Lo sé, pero en su momento ante ponías a Elisa antes que a mí que era tu novia y eso me hacía dudar de mí misma- le reprocho y agacha la mirada.
-El error más grande que eh cometido a sido dejarte de lado y acepto mi culpa, eres lo mejor que me a pasado y por una... una loca demente te perdí- dice con sus ojos aguados y me dan ganas de llorar a mí. Me duele verlo así porque sé que le estoy haciendo daño, sé que le duele y no quiero hacerle esto- quiero que sepas que siempre, pase lo que pase entre nosotros puedes contar conmigo, sea lo que sea llámame, si necesitas algo aunque sea algo pequeño dímelo y siempre estaré para tí, para vosotros .
-Te amo tanto- le digo sin pensarlo y levanta ambas cejas.
-¿Qué?- ríe nervioso. Somos los dos más bipolares de la vida.
-Que te amo- lo vuelvo a abrazar, lo necesito- te amo tanto pero tengo miedo, no quiero que pase lo mismo de nuevo...
-Jamás volverá a pasar, te lo juro amor- escucharlo me llena el corazón- y no solo serán palabras, te lo demostraré día a día para que nunca te arrepientas de haberme dado una segunda oportunidad- mientras me dice cosas tan bonitas lo único que hago es mirar esos labios suaves y esponjosos que tanto extraño. Sin pensarlo dos veces me acerco más y lo beso, sentir sus labios, su húmeda lengua y su calor me hacen volverme loca. Me siento a horcajadas encima de él y suelto un pequeño gemido en sus labios- nena si haces eso luego no podré detenerme- susurra en mis labios de una manera tan sensual y ya noto su erección bajo su ropa. Beso su barbilla y su cuello hasta llegar a su oído y le susurro.
-Te necesito amor, no quiero que te detengas- nada más decir eso me toma de las nalgas y me lleva a mi cama, la ropa desaparece y veo que busca su cartera rápidamente para sacar un condón- ¿no crees que ya es muy tarde para cuidarnos? ya viene a bordo-  toco mi abdomen que ni se nota y ambos reímos.
Fin flashback

Por suerte Elisa comenzó terapia siquiatrica bajo la orden del juzgado, ya que sino no podría tener contacto con Helen.
-Hija ya deberían de abrir los regalos- dice mi suegra hermosa, sin duda tuve suerte de que ella sea la abuela de mi hijo, por cierto, será niño y al parecer futbolista como su padre porque da unas patadas... estamos celebrando su baby shower ya que estoy de 8 meses y unos días.
-¿Los vas abriendo tú o juntos?- me pregunta Nico y quiero estamparle la silla en la cabeza. A veces lo amo y a veces lo odio, sé que es el embarazo que me tiene tan irritable pero me es inevitable, incluso del estrés que me causo yo sola desde la mañana que me han dado algunos calambres en la barriga cada cierto rato, consulté con la matrona y me dijo que era normal porque ya quedaba poco, pero si eran seguidas debía ir al hospital.
-Dámelo- le respondo sin mirarlo. Comenzamos a abrir los regalos y cada uno de ellos es hermoso, ropita, juguetes, pañales, de todo un poco. Terminando los regalos Nico me aprieta de las mejillas y deja un beso en miss labios, pero como estoy enfadada le doy un manotazo en el brazo. Hoy lo odio.
-Tan delicada y cariñosa princesa- dice con ironía.
-No la molestes papi o mi hermanito se enfadara contigo y yo también- dice Helen con cara de enfado y la abrazo.
-¿Ves?, tengo quién me defienda- le digo a Nico y rueda los ojos. Abrazo a mi pequeña Helen, que se a convertido en mi defensora desde que sabe que estoy embarazada, y beso su frente, sé que será una buena hermana mayor. Ella me suelta para ir a jugar y cuando volteo a ver a Nico está arrodillado frente a mí.
-Te amo mi amor, lo eres todo para mí junto a mis hijos y no veo mi vida sin tí, ¿te casarías conmigo?- me pregunta y me tapo la boca con una mano emocionada y la otra me la pongo en la tripa, mi hijo se puso inquieto y hace que los calambres se sientan un poquito más fuerte.
-Ay no- digo cuando siento un fuerte calambre en la barriga.
-¿No?, ¿no te quieres casar conmigo?- pregunta Nico más blanco que un papel.
-No... no...- no puedo hablar bien y cierro los ojos por otro calambre fuerte.
-Gala yo te amo mi amor y sé que tú también me amas, dime que sí bonita, esto es algo que los dos queríamos.
-Nico - escucho la voz de mi suegra que al parecer le hace una seña para que se calle- hija ¿estás bien?- me pregunta y niego con mi cabeza. De pronto siento algo caliente escurrir por mis piernas, es como si me hubiese hecho pipi- ay diosito, ¡va a nacer mi nieto!- y ahí se vuelve todo una locura. Nico histérico. Mi suegra llorando. Y yo ya en trabajo de parto. Cuatro horas tardo en salir este niño para conocer el mundo y cambiar nuestras vidas.
-Es precioso- susurra Nico a mi lado- gracias por darme el más bonito regalo- besa mi frente mientras se limpia las lágrimas.
-Sí quiero casarme contigo- le respondo y su sonrisa se agranda más- te amo mi amor...
Sin duda Nico es lo más preciado que tengo en la vida, me dió la familia que siempre quise, que desde pequeña soñé. Gracias a ese bendito trabajo, pasé de ser la niñera de Nicolás González a su futura esposa, y aunque pasamos por altos y bajos, los volvería a vivir con tal de llegar a lo que tenemos ahora, una vida llena de felicidad y amor.

Fin
[...]
Me adelanté lo siento pero me voy ha comprar y no se cuando voy a volver a casa.
Gracias por el apoyo en esta historia❤️