Capítulo 3

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Era domingo lo que significaba que Louis tenía que ir al restaurant de Harry, así que a las cinco empezó a alistarse, ¿era temprano? Si. Pero era razonable, no le quedaba muy cerca que digamos. Pensó en ponerse un traje, pero lo descarto automáticamente ya que sería un poco incomodo cocinar con eso, así que opto por una polera simple color negro, unos pantalones de mezclilla y una chaqueta para el frio, no se veía para nada profesional pero no podía hacer mucho, de todas maneras, el delantal que usaría taparía su ropa.

Una vez que estuvo listo, tomo sus llaves y salió de su departamento.

...

"Idiota, como se te ocurre decirle esa mierda" Se puso su polera blanca con el estampado de una banda. "¿Por qué no vienes y me enseñas?," hizo su voz más aguda "idiota" Se colocó sus jeans y parecía que ese día le quedaban más ajustados de lo normal porque batalló un poco para subirlos por sus piernas. "Estúpidos jeans, estúpido Tomlinson, estúpida comida, estúpido yo. Ugh maldigo el día en el que pensé que era buena idea ser chef" Se puso su chaqueta de muy mala gana "¿Quién se cree?" bufó "¿El dios de las verduras? ¿de la sal? ¡ja! pues no lo es" Tomo uno de sus zapatos y se lo puso "Cuando lo vea juro que le voy a decir todas sus verdades" Termino de abrocharse los cordones de su otro zapato y tomo sus llaves para finalmente dirigirse a la puerta y salir de allí. "Lo juro por diosito, le voy a decir que él no es nadie y que no es un dios para venir aquí y criticar mi comida" Se acordó que no se despidió de su gata así se devolvió y subió los tres escalones que había bajado camino un poco, abrió la puerta y vio al gatito naranjo a punto de quedarse dormida "Adiós mi amor, te amo" salió y camino dando fuertes pisotadas como si fuera un niño pequeño haciendo una rabieta, cuando vio su auto lo prendió con su llave desde una distancia corta subió al auto, para conducir al restaurante "Le diré que es un estúpido engreído y... ugh todo eso. Lo juro"

Después de veinte minutos y unas quejas Harry ya había llegado.

...

Louis estaba silbando mientras esperaba a que el semáforo diera la luz verde, vio en el reloj de la radio que hora era y aún faltaban diez minutos para las siete, suspiró aliviado, odiaba llegar tarde.

Llego justo a tiempo y por un momento tuvo miedo que no tuviera como avisar que ya había llegado, pero por suerte el restaurante estaba abierto, o bueno había algunas luces prendidas.

"¿Hola?"

Harry salió de algún lugar, no supo muy bien de dónde.

"Louis, llego a tiempo" Harry lo saludó.

"No me agrada llegar tarde"

Harry lo miro y tenía tantas ganas de tomarlo de los pelos y-

"...No crees?"

"¿Como? Lo siento me distraje por un segundo"

"Pensando en cómo matarte de una y mil formas"

"Le decía que si me invitaría a pasar"

"O-oh por su puesto, pase, por aquí" Lo guio a la cocina. Louis camino detrás de Harry "No quise preparar nada antes"

"Está bien, no se preocupe" Louis entro por la cocina con sus manos entrelazadas en su espalda baja, casi como si pidiera permiso por entrar allí.

"Tutéame" se volteó a verlo.

"¿Disculpe?" Parpadeo un par de veces.

"S-sí, me incomoda un poco la formalidad, si eso está bien para usted"

"Por supuesto, me parece bien"

"Deja de hablar así grr, me obligas a ser formal, lo odio"

F*** u Tomlinson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora