AUNQUE TE QUIERO NO TE AMO.

584 103 7
                                    

El tiempo pasaba, y John poco a poco se había ganado el corazon de Sophia.

– Amor, debemos viajar a Londres – le comunico John aquella mañana.

– A Londres, que haremos allá?- John la miro y sonrió.

– Padre desea expandir el negocio de esencias, asi que quiere que yo habrá una tienda, nos trasladaremos a Londres.

Sophia sintió como el piso se abría bajo sus pies, si se radicaban en Londres tal vez volvería a ver a Holden, ya hacia casi tres años que no lo veía y asi estaba bien. Se había acostumbro a su vida al lado John.

–  Creo que tu padre podría enviar a tu hermano, nosotros estamos bien aquí – tomo un trozo de pan y lo metió en su boca.

–  No, deseo darte una mejor vida, si algún día tenemos hijos quiero que ellos crezcan en la ciudad – Sophia suspiró, sabía que discutir con John era caso perdido.

– Está bien, como desees.

Siguió comiendo en silencio.

– Partiremos en una semana, ve a Orange y despídete de tus padres.

– Gracias por pensar en ese detalle – John se levantó de la mesa, se acercó a Sophia y beso su frente.

– Puedes pasar unos allá, pasarán meses antes que los vuelvas a ver.

Sophia trago en seco, su mundo comenzaba a tambalear.

WHARF MANSIÓN LONDINENSE DE LOS CONDES DE ASHFORD.

–  Puje mi lady, puje!.

Decía el presbítero a Grace, pujó por última vez y nació su segunda hija.

– Enora, mi bella y dulce Enora - dijo minutos después recibiendo la en brazos.

–  Dónde está Gena– miro hacia los brazos de su madre quien sostenía a su otra hija, las gemelas eran blancas como la nueve y de cabellos platinados.

Holden cargaba a Edrick quién tenía año y medio de edad.

–Amado esposo, ven a conocer a las gemelas – dijo sonriente.

Holden le entrego a Edrick a su madre y camino a la cama donde su mujer estaba.

Miro a sus hijas recién nacidas, beso la frente de Grace.

Está cerro los ojos y sonrió feliz.

– Gracias por la familia que me haz dado.

Grace sonrió, miro a sus hijos, en ese tiempo había formado una familia, era la mujer más feliz. Nada podía arruinar su felicidad.

Holden miro a sus hijos y no pudo evitar pensar en Sophia.

¿ Cuantos hijos tendrá?– pensó.

Grace miro a Holden y frunció el ceño, últimamente su marido estaba pensativo.

– Descansa.

Beso de nuevo su frente y luego salió.

– Está extraño- miro a su madre.

– Hija mía, no te atormentes, Holden siempre ha guardado sus sentimientos.

Grace trago en seco, sabía que Holden la quería, pero no la amaba como ella deseaba.

ASHBURG.

MORTIMER HOUSE.

CASA DEL MATRIMONIO MORTIMER MCNOURE...

– Estás seguro que debemos trasladarnos a Londres?– Se acercó a John y coloco sus manos en sus hombros.

UNA HISTORIA DE AMOR...Where stories live. Discover now