La Quinta Gema

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El lago de las almas... Donde vi a Shula, donde sobreviví junto a Kane. El lago que estaba a tan solo unos metros.
¿Estuvo allí todo este tiempo? Estuve en el mismo lugar que la Gema.

Cada pieza del rompecabezas empezó a unirse, empezó a entenderse...
La Quinta Gema, la Quinta Gema del infierno, la Gema de las almas...

El lago sólo era un lago, nada más que una masa de agua. Pero la Gema... La Gema le daba las almas.

Cuando Shula apareció...
Era su alma. Su alma que la Gema llamó.

Y los espíritus que me ahogaron... Eran los de la Gema, eran Üeriw. Los Üeriw que con sus cuerpos muertos pero almas vivas formaron la Gema.
Y todo esto estaba... En la legión de aire. Aquí mismo.

Y el líder... ¿Por qué tenía el diario de la madre de Kane? ¿Lo sabía? Porque si lo hacía...

Entonces Mildred lo sabría también.

–tenemos que... –el pánico me estaba ahogando –tenemos que... Santa madre.

Salí corriendo en dirección a el lago de las almas.

Mildred lo sabía.

Lo sabía.

Lo sabía.

Estaba segura.

Pase los árboles corriendo, tenia que llegar a el lago.

–¡Sarahi espera! –llamó Kane desde la distancia mientras corría tras mi. Era mucho más rápido que yo, aunque yo corriera con desesperación para llegar a al lago, saltando raíces levantadas y deslizándome bajo las ramas. Aún así logró alcanzarme, me agarró los hombros, volteandome hacia él, sus callosas manos rozaban mi piel –¿cómo la sacaremos? La última vez... Salimos con vida a penas.

Mi respiración estaba agitada por la carrera, la de el igual, su pecho subía y bajaba desesperado por encontrar oxígeno.

Aunque me costara admitirlo; tenía razón. Como entraríamos a el lago si esta lleno de almas que de seguro no se preguntarían si matarnos. La última vez... La última vez Shula me salvo alejando a cada espíritu, pero ¿como podríamos hacerlo nosotros? Cada segundo que pasa es uno que mildred tendrá a su favor. Uno que mildred usara para conseguir la gema. Shula los alejo...Shula los alejo... Su espiritu los alejo, pero ¿y si Shula era como yo? ¿y si era una Raizana? podria yo hacerlo...                                                                                   Tenía que usar mi poder. De nuevo.

La fría noche golpeaba nuestros rostros, pero eso no me detuvo cuando mire a Kane expresando palabras que ni yo creia que fueran posibles:

–puedo hacerlo –asegure –yo puedo hacerlo Kane. Confía en mi.

Sus grises ojos parecían moverse a cada rincón del bosque como si sintiera que alguien nos observara.

–confio en ti. De verdad lo hago, pero no confio en Mildred ni en la gema –declaró moviéndose hacia mi aun con sus manos a los lados de mis hombros –no... no quiero que nada te pase.

Un recuerdo tiro de mi memoria. Cuando estabamos en la oficina de el líder, cuando nos tenían entre la espada y la pared, cuando los guerreros de el lider forzaban la puerta, cuando nuestra unica escapatoria era una clara ventana que daba al lago, o que ...en realidad, estaba sobre el lago de las almas.

–kane, ¿confías en mi?– pregunté.

no mucho.

perfecto. ¿A la de tres?

La Quinta Gema Del Infierno I Where stories live. Discover now