My Sky | La Leyenda del Guardian y La Estrella | 1° Saga Herederos

Capitulo 16: Noticia Agridulce

Kilian no discutió, acerco su flauta hacia su boca y con un fino soplido empezó esa melodía que la volvería a encerrar, Olvídame resonó por cada espacio del cuarto, una fina niebla rodeo al pequeño lobo haciendo que volviera a su forma humana, con sus ojos negros y aquellas mechas verdosas que la caracterizaban, y el castigo volvió a aparecer lentamente.

Por su parte, el príncipe empezó a sanar cada una de sus heridas cerrándose a los segundos, sus labios se volvieron rojizos y su piel al color que lo caracterizaba, el cielo gruño y en aquel mismo segundo, el primer rayo cayó sobre la tierra mientras que lentamente sus ojos se fueron abriendo, haciendo que en nuca la princesa, el castigo oficialmente se cierre.

Una sonrisa salió de su rostro al ver borrosamente el techo, Nau estaba de vuelta, pero su rápido frucimiento se debió al ver a la joven princesa arrodillarse ante un hombre de ropas negras que no reconocía, era extraño, su aura se veía extraña pero no se sentía peligrosa, sino que dentro de él sentía que le debía mucho.

–siempre estaré agradecida con usted, Patriarca Poison

¿Quién era él? ¿y por le agradecía de ese modo? Miles de preguntas se cruzaron por su mente pero solo un nombre salió de su boca.

–Nela...

–¿Nau?– la joven corrió hasta él apenas escucho su agrietada voz, abrazándolo como si no hubiera mañana –me preocupaste mucho Nau...

–y tú a mi princesa– soltó este acariciando su cabeza suavemente

Kilian, quien los veía del marco tan solo dejo una cálida sonrisa antes de salir del cuarto cerrando la puerta a su paso, un guardián Still y una estrella del rey juntos, ¿Quién lo diría? Lo que era imposible se hizo posible, solo rogaba al cielo y a los Dioses, que esta historia termine tan bien como la anterior, porque en la versión siciliana aquella pareja termino viviendo felices para siempre como simples mortales.

Bajando las escaleras recapacito de aquel hombre que dormía, se acercó hasta él y con un solo chasquido hizo que lentamente se valla despertando, antes de que el hombre abriera los ojos, Kilian atravesó un espejo cercano, volviendo a Mak para ayudar a Xin.

–parecías un espectro cuando te vi controlando a las marionetas, quizás así te diga ahora, ¿te molesta?– Nelaria negó con una sonrisa mientras se acurrucaba a su lado –¿hace cuánto que duermo?

–casi dos meses que estas dormido, tus heridas tardaron demasiado en curarse

–ahora que sabes que estoy bien, ¿Por qué no me abrazas y duermes a mi lado?

–aunque quisiera, y estas en mi cama, tú eres un príncipe de sangre pura, cualquiera te diría que no te acerques a mí, tengo tres sangres en mi cuerpo, soy un monstruo

Pero Nau negó tan pronto como lo escucho se levantó, provocando que la joven quiera impedirlo, pero igual él gano, se logró sentar con mucho dolor, tomo aquel rostro pequeño entre sus manos, obligándola a verlo.

–jamás, escúchame, jamás en la vida digas que eres un monstruo, ningún monstruo nació para proteger, tu hiciste eso y más, naciste para brillar Espectro, saca esa tonta idea de tu mente, ¿Quién te hizo tanto daño para que creas eso?

–Ar siempre me había dicho que aunque naciera con su sangre, y llevara el apellido, en la mesa familiar jamás habría un lugar que me pertenezca...

–pues ahora me tienes a mí, nadie en la vida te volverá a decir monstruo, sobre mi cadáver se acercaran a ti, princesa...

La lluvia inundo el barrio con su música armónica y los rayos se vieron toda la noche como fuegos artificiales, tras la insistencia de Nau, Nelaria acepto quedarse la noche a su lado ya que también lo necesitaba, Nau fue el que la abrazo durante toda la noche y aunque era una perfecta hora para dormir, su mente no la dejaba tranquila, ¿o eran sus sentimientos?