MI ÚNICO DEFECTO

CAPITULO 17

LAUREN

Acostadas ambas en el césped, viendo el cielo estrellado, es como nos mantenemos, ella me señala una alineación de tres estrellas que se ven desde aquí, si supiera que ella misma me ah regalado una que posee su nombre, "Camila", cuando pasó el accidente no había noche que viera el cielo y pensara en ella, nuestro amor sobrepasaba constelaciones.

CAMILA: Esa estrella se apagó (señala, suelto una risita)

LAUREN: Es un satélite (digo, ella se rueda y de costado solo apoya su pecho con el mío, me observa)

CAMILA: ¿Cómo lo sabes? (Cuestiona)

LAUREN: Vale, pues, las estrellas solo brillan, los satélites no parpadean, solo se van apagando solos y después se iluminan de nuevo (la observo)

CAMILA: Eres muy inteligente (dice para después estirar más su medio cuerpo sobre el mío, cerrando la distancia entre nuestros labios, besándome con cuidado, Camila está teniendo más confianza conmigo, hemos avanzado desde el primer día que nos vimos, hasta ahora que estamos tumbadas en el césped del campus, un viernes por la noche) -Te quiero (dice entre besos, se separa despacio solo para darme pequeños besos en los labios, cierro los ojos y dejo que haga lo que quiera conmigo, atrapa mi labio inferior y se que quiere poner en práctica lo que yo hago con ella, pero sus besos son tiernos, dulces y lentos, besa lentamente mi boca y a su paso acaricia mi mejilla)

LAUREN: Te quiero más (digo sobre sus labios, ella sonríe ampliamente en el beso)

CAMILA: No yo te quiero más (niega, suelta una risita y me da un pequeño beso de pico, abro despacio los ojos, la veo, está sonríendo)

LAUREN: No, yo más (la reto, ella con un rostro risueño niega, se levanta y sienta a mi lado, yo rápidamente me siento en posición de indio, una alado de la otra)

CAMILA: Yo te quiero de aquí hasta aquella estrella (señala el cielo cubierto con cientos de ellas, observo pero exactamente no se cuál, regreso mi mirada a ella)

LAUREN: Yo hasta el satélite (ella suelta una carcajada)

CAMILA: Tramposa, está apagado, no sabre hasta donde está (ríe, me contagia con su risa, le tomo el mentón y le deposito un beso húmedo en los labios)

LAUREN: No tienes idea hasta donde es lo mucho que te quiero (ella parece sonrojarse, le tomo despacio las manos, le doy una mirada, no hacen falta las palabras, ella se acerca a mi, cruza una pierna sobre las mías, sentandose a horcajadas sobre mi y sobre mis piernas dobladas, cruza sus piernas por detrás de mi espalda baja, con sus manos resbalando sobre mis hombros, los cruza por detrás de mi nuca, mis manos se apoderan de su cintura) -¿Nos besamos? (Cuestiono, ella asiente mientras curva sus labios en una sonrisa)

CAMILA: Por favor (dice, ambas nos damos un último vistazo para después cerrar los ojos, acercarnos y dejar que nuestras bocas se reencuentren, besándonos así, aquí, despacio, dulce, delicado, con amor, con ternura, nuestras manos acariciando el cuerpo de la otra, nuestras cabezas danzan, en una coreografía perfecta para que nuestros labios se abracen y se pierdan en una batalla de dominio, el cuál yo soy la maestra del ritmo y sensación, lo que Camila sabe hasta ahora, lo sabe por qué nos besamos como las ganas lo dictan, ella siente la forma en la que nos besamos, después me besa de la forma en la que yo lo hago con ella, pero sus besos siempre serán más delicados, siempre lo han sido así, desde antes, mucho antes, poco a poco y con pequeños besos de pico nos separamos, ella apoya su frente en la mía, quedando un poco más alta que yo por tenerla sentada encima, me hace echar un poco la cabeza hacia atrás, dándome pequeños besos me mantiene quieta) -¿Peso mucho? (Susurra sobre mis labios, niego) -No digas mentiras, son malas (dice despacio, su aliento choca contra mi boca, con los ojos entre abiertos la veo, está preciosa en la ligera observa)