CAPITULO 63

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MARTES

CAMILA

LAUREN: No sé mi amor, dime qué quieres tu (habla mientras caminamos y yo sujetando la mano de Lauren con las dos mías, mientras me recargo de su hombro, avanzamos en dirección al estacionamiento, ya habíamos dejado la habitación con las chicas, hace tan solo unos minutos atrás)

CAMILA: Sabes (digo) -Podriamos comprar tacos (hablo mientras caminamos)

LAUREN: ¿Te gustan? (Cuestiona en ese tono juguetón de siempre)

CAMILA: Mucho (digo y ella rie bajito) -Pero no más que tú (acompleto y ella suelta una carcajada, su risa es adictiva, sonrío al escucharla y acarició su mano derecha que hace entrelaza con una de las mías, por qué con la otra me sujeto sobre su muñeca)

LAUREN: Vale, entonces gracias, eso es un cumplido, por qué en verdad los tacos son deliciosos (habla, "Cómo tú", pienso pero no me atrevo a decírselo, a unos cuantos pasos está la camioneta, ella hábilmente con una mano, mientras con esa misma carga la jaula de Señor Spoky, en automático le quita el seguro y enseguida la camioneta parpadea, siendo alrededor de las siete de la tarde, la libero del agarre, Lauren abre la puerta de copiloto y me ayuda a subir, lo hago, cierra la puerta, ella abre la de atrás, acomoda muy bien la jaula y se quita mi mochila que cargaba sobre sus hombros, la pone en el asiento trasero, mientras ella hace eso, tomo el cinturón de seguridad y me lo abrocho, la veo rodear la camioneta por delante y se ve tan guapa con su ropa de trabajo, esas botas industriales en color negro, unos jeans de mezclilla, el cinturón ajustado a ella, marcándole muy bien la división entre sus pantalones y su camisa blanca de manga larga, me regala una buena vista de su trasero, mientras de forma seria rodea la camioneta, yo me dediqué a babear por ella, con el ceño fruncido, sus cejas obscuras y densas, al igual que su cabello obscuro, se mantiene ajena a mi mirada, abre la camioneta y sube, sentándose a mi lado, detrás del volante, si tan solo supiera lo guapa que es mientras conduce y lo colada que me trae, no haría lo que hace mientras lo hace, verle el perfil serio y morder su labio inferior, me provoca querer llenarle el rostro de besos, me encanta Lauren y mucho) -¿No olvidas nada? (Cuestiona para después insertar las llaves, sacandome de mis pensamientos, hace cobrar vida al motor, niego)

CAMILA: No, llevo lo que necesitaré (digo y ella asiente, la música bajita suena)

LAUREN: Te traje algo (habla mientras ajusta el aire acondicionado, al instante comienzo a revisar la camioneta y su interior)

CAMILA: ¿Que cosa? (Digo rapidamente, sin evitar que una sonrisa baile en mis labios, ella se recarga en su asiento y me ve, ver sus ojos con el reflejo del atardecer, es ver una laguna preciosa, en un tono verdoso y muy imponente, preciosos ojos verdes)

LAUREN: Cuando venía para acá me encontré un nido (habla mientras se inclina sobre mi)

CAMILA: ¿De? (Cuestiono por inercia al tenerla muy cerca, casi me besa, pero solo son reflejos míos, ya que no lo hace)

LAUREN: De algún ave (sonrie para después abrir la guantera y al hacerlo un par de huevos de chocolate quedan a mi vista, me emociono mucho al instante, se que estos traen juguetes adentro)

CAMILA: ¡Laur! (Chillo) -¿Puedo tomar uno? (Digo al ver qué son algunos seis, ella sonrie)

LAUREN: Claro, son para ti (dice, tomo uno y después me giro para depositarle un corto pero significativo beso en los labios)

CAMILA: Gracias (digo y ella curva sus labios en una sonrisa)

LAUREN: Te amo (dice, me ve a los ojos y yo a ella, cuando hace esto, me desarma y me vuelvo tan vulnerable ante ella, le deposito uno, dos, tres cortos besos, me separo y ella abre despacio sus ojos)

MI ÚNICO DEFECTOWhere stories live. Discover now