MI ÚNICO DEFECTO

CAPITULO 113

LAUREN

Con un dolor de cabeza soportable, conduje a mi departamento, cuando llegué, lo primero que hice fue tomar una ducha, pasé un buen tiempo debatiendo en mi cabeza mi próximo paso a dar, nunca le he tenido miedo a nada, antes jamás lo tuve y siempre me gusto hablar con la verdad, asi que lo haría, enfrentaría todo yo sola, ya fue suficiente estar actuando como una idiota, asi que cerré la ducha, el agua dejó de caer y totalmente húmeda, Sali de la ducha, tomé una toalla y solo me seque un poco, envolviéndola en mi cintura y dejando ahí un nudo para que no cayera, avance por la habitación, primero iría a la obra, a dejarle algunas instrucciones a Max, asi que de mi closet saque ropa interior, me quite la toalla y mientras me coloque el bóxer, visualice lo que usaría, asi que una vez localizado, tome una camisa blanca, unos pantalones azul marino de vestir, pero ajustados a mis muslos y amplios de la entrepierna, unos zapatos obscuros de agujeta y un cinturón del mismo tono, acomode mi cabello con algo de fijador y rocié de perfume, tome unas gafas obscuras, tome mi móvil, llaves y cartera para salir de aquí, en dirección a la obra, mi primera parada.

🕰️

Frente a la casa, estacionada, pero sin bajarme, veo un carro estacionarse detrás de mí, conozco ese auto, el hombre se baja y le da un vistazo a mi camioneta, al tener los vidrios obscuros, no me ve, pero es ahora o nunca, lo veo acercarse a la puerta del portón e insertar las llaves para abrir, bajo de la camioneta y la rodeo, el hombre que hace de espaldas frente a mí, no me ve, empuja la puerta y antes de que avance hablo.

LAUREN: Señor Alejandro (digo con la voz segura, él se detiene en seco y se gira sobre sus talones, dándome la cara y entonces su expresión es la que no esperaba)

ALEJANDRO: Lauren (dice casi audible y yo a unos pasos de él, lo observo y este pasa saliva al momento que sus ojos se comienzan a poner cristalinos, pensé que me caería a los golpes, pero no fue asi, solo extendí mi mano para saludarlo, pero este en cambio solo la tomo para darme un estrechón, con su fuerte y trabajada mano durante todos sus años, su cabello tiene unas canas más notorias, pero se sigue viendo casi igual, al sentir su tacto, todos mis recuerdos y emociones de mi pasado, revolotean como una parvada de pájaros en estampida, este me atrae en el estrechón y con unas palmadas en la espalda me da un afectuoso abrazo) -Cuantos años Lauren (dice al separarse de mi) -Sabia que este día llegaría (suspira) -Quieres hablar, ¿Cierto? (Cuestiona, yo asiento)

LAUREN: Por favor (digo y el parece entender)

ALEJANDRO: Hablemos adentro (invita a que me adentre a los terrenos de su propiedad, así que doy un paso adelante y camino, entrando de nuevo al jardín, dónde entré por la noche como una ladrona, me detengo a esperarlo a una distancia prudente, el cierra el portón y viene hacia mi) -Mi esposa no tarda en llegar (dice) -Entremos (propone, yo solo lo sigo de cerca, mientras el con las llaves en mano, abre la puerta de su casa y me deja pasar, solo doy un paso adentro y el señor Alejandro cierra la puerta) -Tomemos asiento (señala la estancia, es una casa algo similar a su casa en Miami, solo que está tiene esos toques un poco más rústicos por dentro, desde el piso, las escaleras y detalles, avanzo hacia los sofás, el señor Alejandro se sienta en el individual y yo lo hago en el mediano, nos vemos y el carraspea su garganta) -¿Te ofrezco agua?, ¿Jugo? (cuestiona, niego)

LAUREN: Asi estoy bien (respondo)

ALEJANDRO: Lauren no sé por dónde empezar (se lleva las manos al rostro mientras suspira)

LAUREN: Bueno, podría ser por el lado dónde alejaron a Camila de mi (digo tranquila, pero si con esa seguridad, el hombre me ve y niega)

ALEJANDRO: Lauren nosotros no te alejamos del todo a Camila, se cometieron errores, sí, pero no somos los únicos responsables en esto (dice y entonces estoy segura de lo que quiere decir)