Guarda tus lágrimas. [L.S] EN EDICIÓN

5. Tequila

Toda la siguiente semana, Louis se la paso en la oficina con Zayn, el músico se mantenía atento a todo lo que el ojiazul hacía y no dejaba de hacerle preguntas sobre su trabajo. Le interesaba mucho el estilo de fotografía que usaba Louis.
La mayoría de los días, el castaño llegaba tarde a casa y prefería mantener su dieta con manzanas y agua, no quería verse en el espejo y sentirse feo otra vez. Necesitaba cambiar el aspecto que percibia de él mismo cuando se miraba en el espejo. Necesitaba lucir como un modelo, bonito y atractivo.

Ese mismo miércoles regresó de viaje la pareja de su nuevo amigo, así que Zayn organizó una pequeña reunión en un bar de la ciudad. Tenía tantas ganas de que Louis conociera a su pareja.

En los días que habían pasado, las llamadas con Harry se habían tornado cada vez más cortas y secas, lo cual tenía algo preocupado al rizado ya que él se sentía un poco perdido respecto al tema. Presentía del porque el comportamiento de ojiazul pero no quería aceptarlo. Quería encontrar algo más que lo salvara de la culpa.

Llegó el viernes y Louis se dirigió junto a Zayn a aquel bar que tanto habían estado alabando en las reseñas, la reinauguración de aquel lugar había sido hace un par de semanas atras. Resulta que hace veinte años fué uno de los mejores bares y centros nocturnos de la ciudad, pero tuvo que cerrar debido a la venta de drogas por parte de uno de los trabajadores, así que debían cerrar o arrestarían al dueño también, incluso si no tuviera nada que ver con el asunto.

Cuándo llegaron al lugar Liam ya los esperaba en la barra. Lucía unos jeans y una camisa de color naranja.

- ¡Amor! - Zayn caminó lo más rápido que podía a los brazos de su pareja. Estaba emocionado de que al fin Louis conociera al ojimarrón.

- ¿Qué tal el trabajo hoy cariño, todo bien? - preguntó después de darle un beso en los labios a su chico-. Te extrañé.

- Estuvimos algo estresados pero para ser honesto, es increíble trabajar con Lou - Zayn miró al castaño mientras que este levantaba la mano en forma de saludo - amor, él es Louis. Es el fotógrafo que está dirigiendo el proyecto y además es mi amigo. ¡Debes ver el trabajo que está haciendo, es maravilloso!

- Un gustó Louis, soy Liam. Muchas gracias por cuidar a mi prometido mientras no estaba. - mencionó al mismo tiempo que dirigía su mano al castaño.

Louis la tomó y dejó salir una sonrisa - es un gusto al fin conocerte, me alegra que al fin regresaras de tu viaje. Zayn se la pasaba todo el día hablando de ti. Siento que te conozco.- un par de risas salieron de ambos.

Después de hablar un poco más Zayn dejó un pequeño golpe en el hombro de su amigo para indicarle que era tiempo de empezar a pedir bebidas, abrieron la noche con un par de shots de tequila .

La noche pasó tranquila entre pláticas y chistes, hasta que Zayn invitó a bailar a Liam y el castaño se quedó pegado a una botella de tequila que había dejado la bartender en la barra, mientras bebía observaba a la pareja bailar. Le recordaba cuándo Harry aún lo miraba de esa manera, con amor.

Mientras miraba la pista de baile creyó ver al chico rubio que le había enseñado ciertas fotos. No esperó a comprobar que su suposición fuera real sino que decidió tomar un poco directo de la botella, el ardor que sentía en la garganta fué interrumpido por la imagen del rubio abrazando al rizado después de haber tenido sexo. Jamás podría olvidar esas fotografías.

Las preguntas empezaban a rondar cada vez más en su mente. ¿Habría sido sólo sexo o en algún punto han hecho el amor? Era la pregunta que se repetía en su cabeza. ¿Harry se enamoró de él?
Sin darse cuenta había tomado una cantidad considerable de la botella y la consecuencia fué encontrarse vomitando en aquel baño de ese bar, no podía distinguir mucho de la escena. El tequila era el principal culpable pero su estómago estaba tan resentido, los últimos días había empezado a dejar de comer correctamente y trataba de que nadie lo notara.
Él sabía que le hacía daño pero no tenía las fuerzas de comer.

Digamos que el hecho de encontrarse frente al espejo, desnudo. Buscando defectos en su cuerpo o convenciendose de que debe cambiar muchas cosas en él y diciendo que aún así jamás tendría el cuerpo de aquel rubio ante sus ojos, hizo que empezara a "olvidarse" de ciertos alimentos.

Cuando sintió una mano masajear su espalda se dió cuenta que Zayn lo había seguido al baño. Después de que su amigo se diera cuenta de su estado se pararon y como pudieron llegaron de nuevo a la barra. Una vez pagada la cuenta y con Louis en el asiento trasero del auto de Liam se dispusieron a manejar. El castaño le había pasado su celular a Zayn con la aplicación del navegador abierta, así Liam pudo conducir hasta el punto que estaba marcado como "Home".

Después de agradecerles la noche y la ayuda para llegar a la entrada Louis entró a casa y el auto de sus amigos arrancó.
Su casa era tan silenciosa en la madrugada, no había ninguna luz prendida y la idea de dormir esa noche en el sofá sonaba tentadora, pero no lo haría. No quería un dolor en la espalda junto con la resaca.
Se dirigía a su habitación mientras se recargaba de las paredes y después del barandal de las escaleras. Cuándo llegó a su habitación abrió la puerta tratando de hacer el menor ruido posible. Observó el cuerpo del rizado cubierto por mantas y a Clifford dormido sobre algunas sudaderas.
Cerró la puerta y buscó su pantalón de pijama mientras trataba de no caer. Cuándo lo encontró se quitó los zapatos dejándolos a un lado para después quitarse el pantalón y ponerse el pijama, todo ocurriendo ante la atenta mirada del rizado.

Se recargo en la mesa de noche para poder quitar las sábanas de su lado y después se adentró al cobertor tapándose hasta el cuello. Louis estaba empezando a caer por el sueño cuando sintió que lo abrazaban por la espalda.

- Lou, estaba muy preocupado. Nunca contestaste y fuí a buscarte...

- Mmmh, ya verdad creí que estabas tú estabas ocupado, si, si. ¿Así, cómo era? Ya olvide si ese, si, ¿el nombre?

- Creo, que bebiste de más amor - el rizado sentía una opresión en su pecho, Louis jamás había bebido hasta ese punto. Par ser honestos a Louis no le gustaba mucho el alcohol.

- ¿Mmm?, ¿Quién bebió masa?

- Vamos a dormir - y el rizado empezó a dejar caricias en el cabello del castaño.
Mientras que Louis no pudo cerrar sus sentimientos y empezó con pequeños sollozos. Es imposible ignorar cuando tú corazón se rompe. Y tener el calor de Harry envolviendolo hacía que recordara lo que estaba pasando.

Esa noche Louis durmió después de quince minutos de llanto y Harry no durmió, porque su pecho seguía herido al escuchar llorar a Louis. Aún cuando dejó de llorar no evitó sentirse miserable y ahora lo que su secretaria le había dicho empezaba a tener sentido. Había roto el corazón de su esposo.