Guarda tus lágrimas. [L.S] EN EDICIÓN

16. Hablar

Harry dejó que Danny entrara a su casa, caminó a la cocina y detrás de él iba el rubio, no dudó ni un momento en lo que hacía.
Aún podía saborear los besos que había compartido con Louis, pero también recordaba que con Danny hubo más.
No sería un impedimento para que Louis fuera feliz, al final del día él no recordaba nada de lo que Harry si. Dolía no cambiar nada.

En la cocina había un castaño en pants grises y playera. Estaba mirando a la estufa cuando llegaron al lugar.

––Lou, alguien vino a verte.–– tomó una botella de jugo del refrigerador.

El castaño volteó y en cuanto notó que Danny estaba allí se quedó paralizado sin saber que decir.

––¿Danny?, ¿Qué haces aquí?

––Lo siento, se que tarde en buscarte pero no sabía cómo presentarme y...

––¿Cómo supiste en dónde vivo?––frunció las cejas.

––Niall me ha ayudado, si fué el.––si que estaba nervioso.

––Yo, me retiro. Supongo necesitan privacidad, iré a arreglarme para trabajar––cuando el rizado estuvo apunto de salir de la cocina la voz de Louis lo detuvo.

––Harry, no haz desayunado. Solo espérame un poco...

––No te preocupes Louis, tomaré algo de camino al trabajo, gracias.––y con eso salió de la cocina.

––¿Quién es él?, Es medio extraño ––el rubio se sentó recargandose en el desayunador.

––Él, es Harry. Mi esposo.––Louis le enseño la sortija que llevaba y el rubio pareció perder el aire.

––Pero lo que pasó, tu y yo tuvimos un...

––Estaría bien hablar de eso, tuve un accidente hace poco. Y es difícil pero perdí una parte de mi memoria.

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Harry se bañó y alistó en tiempo récord, no quería pasar mucho tiempo allí. Pudo ver la reacción de Louis cuando llegó Danny, estaba confundido.
Disfrutó tanto los besos y sentir su calor de cerca, eso hizo que la ducha tuviera una sesión de lágrimas.

Salió vestido con pants y un suéter rojo, quería sentirse cómodo y no pensar en mucho. No sentirse sofocado.

Bajó las escaleras y pudo escuchar las voces de Louis y Danny, ignoró completamente la conversación. No quería escuchar ninguna declaración de amor por parte de Louis.
Caminó a la cocina y no pudo sostenerle la mirada a Louis, no cuando Harry estaba conteniendo las lágrimas.

––Me iré, por favor si llegas a necesitar lo que sea. Solo avísame y estaré aquí para ti.—mordio sus labios.

—Hazz, ¿Estás bien?––su voz sonaba preocupada.

––Si, solo que es un poco tarde. Ten un buen día Louis. Cuídate. ––el castaño alzó el rostro esperando el beso en su frente pero solo recibió a Harry dejando el lugar y un portazo detrás.

––Lo sabe.––mencionó Danny.

––No me gusta mentir, lo sabes.

El rizado llegó a su oficina algo temprano así que decidió empezar con la revisión de contratos. Habían pasado dos horas cuando se dió cuenta que olvidó su celular por tratar de salirse lo antes posible.

––Señor Tomlinson, le traigo las últimas renovaciones con marcas. Hoy será ligero.––Marta dejó los documentos en el escritorio.

––Gracias, ¿Puedo pedirte un favor?