31

1.4K 146 41
                                    

Narra Cheryl:

En cuanto presioné mis labios contra los suyos, me di cuenta de la magnitud de las dos palabras que le había dicho, te amo.

¿La amaba? No.

Muchas veces cuando estás excitada no piensas lo que dices debido a la emoción del momento, seguramente ese era mi caso.

-Tengo que irme - dejé de besarla, salí de la ducha como pude.

-¿Qué? - exclamó - ¿Por qué? ¿Hice algo mal? - habló nerviosa.

-No, tú no hiciste nada - me detuve para mirarla - es que tengo sueño - inventé una excusa.

-Ah - asintió, ella estaba dentro del chorro de agua, era sexy ver como bajaba por su cuerpo.

-Termina de bañarte - abrí la puerta y salí.

Me sentí aliviada en cuanto estuve fuera de ese baño, tenía mucha presión dentro de mí. Ahora Toni creía que la amaba. Dios, eso era trágico.

Yo no la amaba, por favor... ¿yo amarla? No. La quería, apreciaba y me parecía una buena chica pero de ahí a amarla, no lo creo. Seguía pensando que mis palabras fueron producto de la emoción del momento. Solo eso.

Esa noche tenía planeado hacer un juego con Toni, justo por eso había llevado ropa interior sexy, pero en ese momento no me sentía cómoda después de lo que había pasado, así que solo me puse el pijama y me recosté.

En cuanto Toni salió del baño, la sentí acercarse a la cama y sentarse. Yo estaba volteada en contra a ella, mirando hacia la pared. Así que no podía saber si estaba despierta o dormida.

-¿Estás despierta? - preguntó en un susurro.

No respondí.

Mis ojos estaban cerrados, cuando sentí sus labios posarse sobre mi mejilla en un tierno beso. Mi piel se erizó.

//

Abrí mis ojos, sintiendo los rayos de sol entrar por la pequeña ventana de la habitación. Me volteé y vi a Toni profundamente dormida. Tenía los labios entreabiertos y su pecho subía y bajaba lentamente tapado solo por un sostén.

Tomé su mano y la estiré en la cama, para así poder abrazarme con ella y apoyar mi cabeza entre sus pechos. Eran suaves y cómodos.

Sin saber porque, comencé a darle pequeños y suaves besos en su pecho. Bajé mi mano y levanté un poco la cobija, traía un corto short.

Bajé la cobija nuevamente y miré su rostro. Me acerqué, acaricié con mi mano su mejilla y besé delicadamente sus labios. Cerré mis ojos y seguí besándola, esta vez tomando sus labios entre los míos.

De repente sentí que sus labios correspondieron a mi beso, abrí mis ojos y vi que los suyos estaban bien abiertos. Rompí el beso y me alejé.

-Nunca imaginé despertar de una forma tan hermosa - susurró - teniendo una hermosa y vista, y sintiendo tus dulces besos - habló ronca.

Sonreí, volví a darle un beso entre sus pechos.

-No pensé que fueras a despertar con mis besos - susurré.

-¿No? - preguntó, todavía medio dormida.

Negué con la cabeza.

-¿Entonces no querías que despertara? - susurró, pasando su mano por mi brazo.

-Quería que durmieras un poco más - apoyé mi mentón en su pecho para así mirarla a sus hermosos ojos - ¿Qué vamos a hacer hoy? - pregunté emocionada.

-¿Qué quieres hacer tú? - bostezó.

-Podríamos ir a dar una vuelta por la finca y sus alrededores. No lo sé, no conozco mucho por aquí. - suspiré.

-Es buena la idea de llevarte a dar un tour por la  finca - sonrió - ¿quieres que vayamos ya? - preguntó aún atontada, sus ojos se cerraban constantemente.

-No hay prisa. Preferiría que durmieras un poco más, te ves cansada ¿te demoraste mucho para dormirte? - pregunté

-Como estabas a mi lado, fue difícil... - sus mejillas se sonrojaron un poco.

-Toni - reí.

Ella suspiró, sus ojos se volvieron a cerrar, su sonrisa se fue borrando en cuanto volvía a dormirse profundamente.

No quería despertarla, así que me levanté con cuidado para bajar a la cocina, y ver si Fangs o Sweet Pea necesitaban ayuda para el desayuno.

Entré a la cocina y me encontré con Fangs y un chico de cabello castaño.

-Buenos días - saludé entrando a la cocina.

-Buenos días ¿cómo dormiste? - preguntó Fangs amablemente.

-Muy bien, gracias - sonreí, me senté en uno de los taburetes que estaban a un lado del largo mesón de la cocina. - Toni sigue dormida - avisé.

-Ok - Fangs asintió - Bueno, él es Nick, un amigo de la familia, está aquí con nosotros por estos días. Ayer no lo viste porque llegó muy tarde de su fiestecita.

Miré al chico, quien me miraba directamente.

-Hola soy... - me interrumpió.

-Sí, se como te llamas. Toni habla mucho de ti cuando hablamos por teléfono - carraspeó - y ya me doy cuenta porque - susurró, haciéndome sentir incómoda.

Fangs le dio un codazo en el estómago.

-Ya he preparado el desayuno - anunció - Iré a llamar a Pea - me miró, yo asentí.

Fangs salió de la cocina.

-Entonces... ¿estás con Toni? - preguntó, sentándose en el taburete del lado.

-¿A qué te refieres con eso? - pregunté sin mirarlo, me hacía sentir incómoda.

-¿Tienes algo formal con ella, o solo la ves como una amiga?

-No tengo nada formal con ella, ¿bien? Y no creo que sea de tu incumbencia - respondí aturdida.

-Es solo una pregunta - se burló.

Suspiré profundo y me levanté del taburete para alejarme de él, no me daba mucha confianza. Cuando estuve a punto de irme, Nick me tomó del brazo y me hizo voltear para mirarlo.

-Si no tienes nada con Toni, y no estás saliendo con nadie, supongo que podrías hacerlo conmigo - susurró mirándome directamente.

Fruncí el ceño sorprendida, pero antes de que pudiese responderle, sentí que alguien entró a la cocina.

Toni.

Enamorada de mi vecina // Choni Donde viven las historias. Descúbrelo ahora