One Piece: El retorno del Rey Primera Temporada

Capítulo 66: El regreso de Brook y alguien más

Luffy y Laizy se encontraban corriendo por un bosque denso y oscuro. No estaba equivocado en lo que pensaba, estaba en Thriller Bark, donde se encontraba uno de los Shichibukais más ruines que conocía y quien daño a mucha gente para buscar sus propios propósitos y quien robó la sombra de su nakama Brook, un gran nakama que lamento mucho su muerte. Sin embargo, cuando enfrentó a Im-sama, Brook fue alguien que lo apoyó en gran cantidad y uno de los que contribuyeron a su victoria. Algo que logró al perforar la coraza de Im-sama y vencerlo con la voluntad de un D.

Pero mientras pensaba en esto, se dio cuenta de que en los árboles había algunos ruidos que sonaban algo extraños. Luffy se preguntó si era un enemigo peligroso cómo Perona o Gecko Moria. Actualmente los enemigos más peligrosos eran esos, porque Absalom no era tan fuerte en verdad. 

Aunque el mismo le daría la paliza de su vida ya que cuando Nami y los demás bajaron aquí en su vida pasada, supo que ese pervertido con la fruta de la invisibilidad estuvo tocando a Robin y espió a Nami en el baño, además de raptarla y querer casarse con ella.

Eso era algo que no dejaría que volviera a pasar y por eso le daría la golpiza de su vida para que dejara de ser un pervertido mas ya que casi todas las chicas del barco salen con él y él ni muerto dejaría que ese patán se acercara a alguna de ellas. Claro que Sanji es un pervertido pero él tiene autocontrol y el no ataca a las mujeres. Absalom por otro lado, es mucho peor que Sanji ya que ese desgraciado no tiene límites y ataca a toda mujer hermosa que encuentra.

Y hablando de Sanji, Luffy pensaba que sería bueno tener su ayuda en esto ya que ambos tienen el mismo rencor hacia Absalom.

Entonces se dio cuenta de algo interesante, de que alrededor de ellos habían presencias que resultaron ser zombies que eran manejados por sombras de las víctimas de Moria. Luffy al verlos sólo sonrió mientras veía cómo les apuntaba con un dedo.

-¡In…In…Intrusos!- gritó uno de los zombies mientras empezaban a salir de todos lados estás cosas.

Luffy no se asusto, sólo empezó a esquivar los golpes e intentos de morderlo mientras Laizy los golpeaba para alejarlos. Ambos mandaban contra el suelo a los zombies de un sólo golpe aunque era algo extraño en verdad. Estás cosas no sentían dolor alguno porque estaban muertos pero si destruyes lo que los ayudaba a  moverse simplemente son gusanos que se arrastran por el piso. Luffy y Laizy sólo los golpeaban en la columna dejando a todos los zombies en el suelo y sin poder moverse. Para Luffy era algo raro que cayeran tan rápido pero era lo mejor para poder llegar a la costa y ver si el Sunny ya estaba en esta zona o sus nakamas no lo habían logrado.

Aunque al pensar en esto se dio cuenta de algo: una presencia lo observaba y Luffy ya sabía quien era, su presencia jamás la olvidaría. Por eso mismo agarró a Laizy y saltó hacia atrás evitando que dos fantasmas lo atravesaran. Luffy conocía muy bien a los fantasmas vigías de Perona, no quería sentirse cómo basura inutil sin tener voluntad. Por eso mismo él y Laizy empezaron a esquivar lo mejor que pudieron a los fantasmas que iban contra ellos. Para los dos jóvenes con sombreros de paja los fantasmas eran muy lentos e intentaban ir contra él sin una estrategia.

Eran muy tontos al ir contra ellos bajo el control de la fruta del Diablo de Perona ya que la chica con pelo rosado y una actitud extraña ahora mismo estaba confiada de sus habilidades y era por eso que sus fantasmas tenían la tarea de atravesar a los intrusos y avisarle. Es por eso que Luffy y Laizy empezaron a correr del bosque intentando llegar a la costa lo más rápido que podían. Luffy tenía ahora un pensamiento de preocupación por sus nakamas, no sabía si ellos lograrian llegar a Thriller Bark a salvo.

Entonces, mientras pensaba en esto sintió otra vez el sentimiento de una presencia y al preguntarse de dónde venía sintió algo tomando sus pies desde el suelo enterrandolo. Luffy se preocupó un poco al ver que su cuerpo estaba bajo tierra, pero soltó un fuerte golpe a esta cosa que liberó sus pies y lo dejó salir.