Despertando en el ayer | Naruto Fem x Kakashi

CAPÍTULO 11

Año 822 desde el descubrimiento del chacra

Konohagakure

Kakashi suspiró mientras se levantaba del taburete. Apenas había terminado su único tazón de ramen, pero Naruto iba por el sexto.

«¿Cuánto comida le cabe a esta niña? —pensó—. Se parece a Kushina en este aspecto»

Pareció que se le quedó mirando mucho tiempo, pues Naruto se giró para verlo. Ladeó la cabeza mientras terminaba de sorber sus fideos. Una imagen peculiar, pero que le pareció tierna de alguna extraña forma.

—¿Sucede algo, Kakashi? —le preguntó Naruto.

—Nada. Solo que me sorprende cuanto ramen puedes comer en tan poco tiempo —dijo con sinceridad—. Yo apenas puedo con uno.

—No lo sé. Pero el ramen es mi comida favorita, así que yo creo que es por eso —le respondió al tiempo que volvía a su tazón.

Pasaron un par de minutos más hasta que Naruto se levantó. Cada uno pagó lo suyo.

Kakashi seguía pensando en lo confuso que había sido ver a sus compañeros de la academia correr cuando los vio. Se le hizo completamente raro, pero no quiso indagar en el asunto por ese momento. Se formó la idea de buscarlos al otro día para preguntarles sobre que estaban pensando al huir así de él.

«Tan solo los vi y parecían pollos asustados»

Salieron del local y nuevamente se sumergieron entre las calles. Ya era tarde, por lo que la gente ahora era mayor que antes. Kakashi notó que Naruto veía al horizonte, justo en las caras talladas de los Hokages.

—¿Hay algo extraño en el monte? —preguntó.

—Nada. Solo que me preguntaba ¿cómo se verá el pueblo desde allí? —respondió Naruto.

Kakashi frunció las cejas, pero no respondió nada. Había ido un par de veces allí para pensar. A decir verdad, la vista allí era grandiosa en palabras de Kakashi, por lo que no le importó decirle a Naruto:

—Si quieres, podemos ir un rato allí arriba —dijo Kakashi.

—¿Enserio? ¡Pues vamos! —dijo Naruto. Su expresión se volvió en una enorme sonrisa.

—Solo espero que no te canses —«Aunque probablemente yo sea el que se canse primero»

Kakashi suspiró. Los dos comenzaron a caminar rumbo a las afueras de la aldea. La mejor forma de llegar allí era por el bosque del este. En esa zona se encontraban los campos de entrenamiento para los equipos Genin.

Ambos caminaban al lado del otro. Estaban en completo silencio. Ninguno sabía cómo romper la tensión, por lo que siguieron así hasta que llegaron a las afueras del pueblo. Kakashi la guio al puente que cruzaba una parte del río Naka. Naruto reconoció al instante el puente. Justo del otro lado estaba el campo de entrenamiento tres; el mismo en el que Naruto y el equipo siete entrenaban. Igualmente, Kakashi recordó que allí mismo estuvo varias veces con su equipo bajo la tutela de Minato. Sintipo una punzada en el pecho al recordar esos momentos. una punzada en el pecho al recordar esos momentos. Sacudió la cabeza y volvió a concentrarse en el camino. Pero se dio cuenta de que había alertado a Naruto, quien lo veía con un expresión preocupada.

—¿Estás bien? Pareces algo agitado. Si quieres podemos volver al edificio —dijo Naruto viéndolo a los ojos.

—No te preocupes. Continuemos.