Despertando en el ayer | Naruto Fem x Kakashi

CAPÍTULO 34

Año 826 desde el descubrimiento del chacra

Konohagakure

—¡Estoy tan cansada! —gimió Naruto mientras se dejaba caer en el pasto del campo de entrenamiento.

—Ni hemos hecho nada —contestó Kakashi.

Naruto cerró los ojos e imaginó estar descansando en su cama, aunque anhelaba aparecer mágicamente en ella para dormir un poco. Se había desvelado leyendo un libro, y en ese momento solo quería dormir un poco más. Lamentablemente Kakashi parecía estar en contra de ese plan, pues la arrastró hasta los campos de entrenamiento para hablar sobre el mismo asunto que los tenía preocupados: El hombre pájaro.

—¡Por supuesto que hemos estado haciendo algo! —exclamó indignada Naruto—. Discutimos sobre lo que puede que haga ese tipo.

—Pero solo han sido como diez minutos, Naruto.

—Pero hemos hecho algo.

—De acuerdo —suspiró Kakashi—. Entonces, teniendo en cuenta que ese tipo está atacando más veces, debemos estar más protegidos. El último ataque fue el más cercano. Creo que pronto podrá ser en un pueblo vecino, y eso solo comenzará a alertar a los demás de lo que ocurre. No creo que a alguien le guste la idea de un asesino suelto.

Dejó escapar un suspiro mientras veía a Kakashi. Este luego también se recostó a su lado. Ambos se sumergieron en un cómodo silencio mientras veían las nubes algo grises. Estaba por llegar el invierno, por lo que el clima ya era algo frío. Ante eso, Naruto se acercó un poco más a Kakashi y recargó su cabeza sobre el pecho de este. Sintió como el pecho de Kakashi subía y bajaba debido a su respiración. Fue agradable esa sensación.

—¿Y qué harás? —preguntó

—Comer algo —respondió Naruto.

—No hablo de hoy —explicó Kakashi—, sino de cuando encuentres al tipo ese. ¿Qué harás? ¿Volverás al futuro?

—No. Quiero quedarme aquí, pero quiero saber cómo y por qué estoy aquí —respondió rápidamente Naruto—. Y tal vez, así podamos descubrir qué Jutsu utiliza El hombre pájaro.

—¿Para qué quisiéramos un Jutsu así? Es demasiado peligroso para cualquiera.

—Tienes razón —admitió Naruto—. Entonces sería mejor acabar con ese tipo para que nadie pueda tener un Jutsu de tal calibre.

Kakashi estuvo de acuerdo con ella.

Ambos no quisieron continuar con el mismo tema, pero había otra pregunta que tenía Kakashi.

—¿Y a las personas que están en tu tiempo? —preguntó.

Naruto se quedó pensando varios segundos. Tenía tantas cosas y opciones, pero realmente no sabía qué responderle a Kakashi. Después de pensarlo mucho, encontró una opción que le agradó.

—Cuando capturemos a El hombre pájaro, le preguntaré por ellos —contestó Naruto mientras su mirada quedaba fija en el cielo—. Y, tal vez, pueda verlos otra vez, aunque sea la última. Solo pediré eso.

—¿Segura? ¿No... quisieras volver allí? —preguntó Kakashi mientras veía a Naruto acurrucarse un poco más hacia él. Ella no respondió.

—Ya lo dije, no. Estoy bien aquí —dijo—. Te preocupas demasiado.

Naruto respiró profundo un par de veces mientras se levantaba del pecho de Kakashi. Se acercó un poco al rostro de este, quien solo se sorprendió un poco por la acción. Ella le bajó la máscara y le dio un suave beso en la mejilla. Kakashi resopló un poco y la tomó por la cintura. Naruto solo rio un poco mientras se acercaba de nuevo al rostro de Kakashi. Ambos compartieron un beso que se prolongó por unos cuantos segundos. Se separaron cinco segundos y continuaron con lo suyo. Fueron aumentando el ritmo en los besos, aunque ninguno de los dos podía parar en realidad. No fue hasta que Kakashi separó un poco a Naruto de él que descansaron un poco. Ambos se quedaron en silencio viéndose a los ojos. Kakashi estaba un poco sonrojado, mientras que Naruto tenía una gran sonrisa en su rostro. Naruto era quien tenía los pantalones en la relación.