Temp. 2, cap. 1

408 43 9
                                    

—¡YUNG! ¡KISAKI ERES UN MALDITO! —gritó Chifuyu.

—¡Cállate! ¡Debiste pensarlo dos veces antes de acostarte con mi esposa y complotar contra mi! —Kisaki golpeó con fuerza a Chifuyu quien estaba amarrado a una silla.

Después de que acabé con mi vida, Kisaki fue con Hanma hasta donde Chifuyu estaba con Yung. Por más que hubiera querido contar que Yung logró escapar con alguien, la triste realidad fue que mi niño no lo logró y el desgraciado de Kisaki lo asesinó, su locura había llegado demasiado lejos, ni siquiera sería una justificación el decir que lo mató porque pensó que no era su hijo, ya que de todas formas lo cuidó y eso demuestra que desde un principio él no sintió un mínimo cariño hacia él

—¡¿Cómo pudiste hacerle eso a tu propio hijo?! ¡¿Es que no tienes corazón Kisaki?! —Takemichi gritó aquellas palabras con rabia.

—¡CÁLLATE! ¡Ese niño no era mi hijo, era de este bastardo! —gritó Kisaki apuntando un arma en la frente de Chifuyu— lo único que me molesta es que te irás con ella, pero no puedo dejarte vivir.

—¡Yung era tu hijo! ¡No sabes cuánto deseé que fuese mío, pero tú eras el verdadero padre! ¡¿No lo quisiste ni un poco que te pareció tan fácil matarlo?! ¡Solo tenía cuatro años! —los ojos de Chifuyu se cristalizaron, ese dolor era insoportable.

Aunque Chifuyu no era el padre de Yung, le tuvo mucho cariño, más del que Kisaki pudo haberle tenido siendo su padre de sangre. Kisaki guardó silencio ante las palabras de Chifuyu, jaló el gatillo, pero fue en su estómago, Chifuyu gritó de dolor mientras Takemichi le suplicaba a Kisaki que se detenga.

—¡KISAKI YA BASTA!

—¡CÁLLATE QUE LUEGO SERÁ TU TURNO!

Chifuyu escupió un poco de sangre, la verdad es que sus fuerzas se estaban agotando y Kisaki parecía que no planeaba matarlo al instante.

—Si vas a matarme, deja que le diga algo a Takemichi, por favor... —habló a lo bajo Chifuyu.

Kisaki miró a Chifuyu fastidiado y solo bajó el arma alejándose un poco dándole la espalda a ambos.

—Takemichi...

—¿Si Chifuyu?

—Por favor... Salva a Hyung, quiero que viva una vida feliz alejada de este maldito —comentó Chifuyu mirando con rabia a Kisaki— no importa lo que tenga que hacer, pídeme ayuda, no me importa nada, incluso si el estar con Souya le hará feliz y tenga que alejarme, solo quiero ver su hermosa sonrisa una vez más...

—Se acabó —anunció Kisaki.

—Por favor Takemichi, promételo.

—Lo prometo Chifuyu.

BANG

Takemichi cerró sus ojos ante el fuerte disparo, no quería abrirlos para ver el cuerpo sin vida de su amigo. Kisaki jaló de su cabello, estaba dispuesto a matar también a Takemichi.

—¿Por qué todo me sale mal Takemichi? Yo solo quería vivir una vida tranquila y siempre tiene que llegar alguien a arruinarla, es molesto.

—No mereces tener una vida feliz —sollozó Takemichi.

Kisaki apuntó su arma hacia Takemichi y suspiró.

—Entonces si yo no soy feliz, nadie lo será.

De repente un disparo resonó en la habitación, pero no era del arma de Kisaki. Su mano estaba sangrando y este gritaba de dolor.

—¡¿Qué fue eso?! —gritó Kisaki.

—Están rodeados, será mejor que salgan.

Takemichi suspiró aliviado, Naoto había llegado con muchas patrullas y lograron arrestar a Kisaki. Sin embargo también Takemichi fue arrestado debido a que era un aliado más de Kisaki. Naoto lo llevó a un salón.

—Si volverás, será mejor que lo hagas ahora.

........

Mis ojos se abrieron de repente, ¿Qué había sido esa pesadilla? Miré hacia mis costados y estaba en mi departamento, me había dormido con el uniforme de ToMan.

—¿Qué fue todo eso? —me dije a mi misma.

La puerta comenzó a retumbar con fuerza, alguien la golpeaba insistente.

—¡Ya voy!

Me acomodé mis vendas rápidamente abrochándome la chaqueta del uniforme y abrí la puerta.

—¿Sí?

—Hyung, hola, por favor tengo que hablar contigo —era Takemichi, se le veía agitado, detrás de él estaba Chifuyu.

—¿Sucedió algo? ¿Alguna reunión a la que falté? —pregunté mientras reía con nerviosismo.

—¿Nos dejas pasar? —comentó Chifuyu— te explicaremos todo.

Miré un momento al interior de mi casa, estaba... Presentable, bueno, no importa. Hice que entraran y comenzaron a hablar sin perder el tiempo. Cuando escuché todo lo que dijeron, me quedé atónita, era una locura, pero... ¿Por qué no puedo desconfiar de ellos? ¿Por qué me resultó tan fácil creerles? El sueño... ¿Había sido real?

—Sé que es una locura, pero no encuentro una manera de evitar todo sin tu participación.

—¿Me estás diciendo que Souya va a morir?

—Sí.

Apreté mis puños molesta, desde que Kisaki me amenazó diciéndome que termine con Souya, sabía que haría algo, pero no esto. No le bastó con haber abusado de mí y ahora esta mierda.

—Tienes que creernos Hyung, a mi también me pareció difícil de entender, pero-

—No dije que no les creía —interrumpí a Chifuyu.

Ambos chicos me miraron confundidos y con una ligera esperanza.

—Todos los días tengo el mismo sueño, veo a Souya ensangrentado a mi lado, a Kisaki con un anillo, sin embargo no estoy feliz. Veo a un niño, uno muy tierno —sonreí por impulso— un niño que me dice que me salvará, luego me encuentro cayendo de un lugar alto.

Una pregunta invadía mi cabeza, a la vez que un fuerte dolor en el pecho me hacía sentir remordimiento.

—¿El niño murió? —pregunté.

—Sí, Kisaki lo asesinó —respondió Takemichi.

—Ya veo —suspiré— te creo Takemichi, haré todo lo que me pidas, pero quiero algo a cambio.

Takemichi me miró confundido, sonará a una locura, pero los recuerdos del niño me seguían invadiendo.

"¡Mamá, yo salvaré a la princesa amarillo y la reuniré con el príncipe azul así sean felices!"

"Tú ya salvaste a la princesa hace mucho tiempo"

—Quiero al niño, ¿Hay alguna manera de poder salvar a Souya y tener al niño?

—Es una locura —dijo Chifuyu— para eso tendrías que casarte con Kisaki y sufrir ese encierro que viviste.

—Sí, quizás estoy loca —dije apoyando mi rostro en mi mano— sin embargo —sonreí de costado mirando a ambos chicos— nunca abandono a quienes estuvieron conmigo.

Chifuyu y Takemichi se quedaron en silencio un momento y Takemichi sonrió, él sabía lo que yo sentía, que todos los demás le dijeran que no era necesario salvarlos a todos y que él aún así quiera sacrificar su felicidad para poder ver a todos felices.

—Está bien, ¿Tienes un plan?

Chifuyu solo suspiró al ver nuestra determinación, no le quedaba de otra que ayudarnos.

Kisaki, si pensabas salirte con la tuya, déjame decirte que la que maneja esta realidad soy yo.

__________

Espero que les haya gustado y le den a la estrellita.

Atte: Hyung☕✨

PD: Sígueme en mis redes.

Instagram: oi_hyung
TikTok: oi_hyung
Twitter: YoSoy_Oi

Nunca te olvidaré.Where stories live. Discover now