Temp. 2, cap. 6

284 39 0
                                    

Este futuro no es como el que recuerdo de mis sueños, tengo más libertad, sin embargo tanta confianza de parte de Kisaki me resulta sospechosa y no confío totalmente en Hanma como para creer que está cayendo en mi trampa completamente, en algún momento se dará cuenta, si no es que ya lo hizo, de que quiero poner a Kisaki en su contra. Tengo que aprovechar estos momentos antes de que todos se pongan en mi contra, sería más fácil si tan solo tuviera a Chifuyu y Takemichi a mi lado, pero no quiero perjudicarlos, no quiero que nadie muera por mi culpa.

Últimamente estoy teniendo sueños extraños, que me dicen algunas cosas y pasa algo muy similar poco después. Desde cosas absurdas como que Kisaki se iría, hasta acontecimientos que tenían mucha relevancia, como una alianza con otra "organización".

El sueño que tuve hoy fue totalmente distinto, no me dio una respuesta más clara, fue muy extraño, pero de algún modo me decía que todo estaría bien.

—Me voy, Hanma vendrá más tarde —dijo Kisaki mientras se colocaba su saco.

—Nos vemos —respondí desde la cama, no tenía ánimos de levantarme.

De cierto modo la convivencia con Kisaki se había vuelto más tranquila, pero a veces tenía unos arranques agresivos cuando se ponía celoso, pero no era muy seguido ya que no tenía a mucha gente alrededor mío. La mayoría de las veces era porque estaba Hanma y decidí usar eso a mí favor, Hanma era un problema si seguía de lado de Kisaki, así que si no puedo ponerlo de mi lado, haré que Kisaki deje de confiar en él.

—¿Te sientes bien? —preguntó mientras se acercaba a mi, de hecho no, no me sentía muy bien.

—Me duele un poco la cabeza —dije con dificultad— y hace mucho calor.

Kisaki tocó mi frente, estaba hirviendo, inmediatamente se sacó su saco, lo dejó a un costado mío y agarró su celular.

—¿Qué haces?

—Llamo un médico.

Intenté levantarme para decirle que no era necesario, pero perdí mis fuerzas en los brazos y caí a la cama nuevamente.

—Quédate quieta, hoy quédate en cama.

—No es como si tuviera algo más que hacer —reí débil.

Kisaki me sonrió, mis ojos se comenzaron a cerrar lentamente, me sentía muy cansada, no podía ver con claridad, lo último que alcancé a ver con claridad fue una sonrisa y sentí que acariciaban mi cabello.

Souya...

Me desperté lentamente, tenía un paño húmedo en la cabeza, me sentía desorientada, no sabía qué hora era. Me senté en la cama y miré a mi alrededor, pude ver a Kisaki sentado en el sofá de al lado, suspiré con pesadez, me levanté con cuidado y fui a despertarlo.

—Kisaki, despierta —dije sacudiéndolo levemente— ¿No tenías que irte?

Lo sacudí más fuerte, pero no respondió, iba a alejarme, pero me sujetó con fuerza e hizo que me siente encima suyo.

—¿Qué pasa? —hablé en voz baja— ¿Estás dormido?

Traté de mirarlo, pero ocultó su rostro en mi pecho, supuse que estaba despierto. Dejé mis brazos caer, volvía a sentirme un poco mareada, pero era más tolerable.

—Si vas a dormir, ve a la cama —susurré.

—Hay algo que quiero saber —hasta que se dignaba a hablar— Hyung.

Bajé mi mirada, nuestros ojos se encontraron.

—¿Qué pasa? —pregunté, Kisaki seguía teniendo su mirada fija en mi.

Nunca te olvidaré.Where stories live. Discover now