Capítulo 61: ¡Bienvenido, a la Isla de los Gladiadores!

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-------Se sintió como si lo hubieran dejado atrás en un lugar frío y oscuro.

El lugar era oscuro como si hubiera cerrado los ojos, frío como si hubiera presionado sus mejillas contra un trozo de hierro desechado. Buscó desesperadamente la salvación, sintiendo todo su cuerpo atado por las cadenas del cautiverio.

Por eso también extendía la mano, como si estuviera en trance, buscando cualquier cosa que pudiera encontrar.

Sin embargo, no era por eso por lo que había estirado la mano hacia la inminente luz blanca del final.

La luz-------más bien, su identidad era la de una chica, con una trágica mirada de determinación oculta en su rostro. Había extendido su mano hacia ella, no porque buscara su salvación, sino porque sentía que debía salvarla.

Y así, doblando las cadenas que le impedían mover su cuerpo ni un centímetro, extendió una mano, su propia mano.

Extendió la mano y-------

???: [-------Es tan pequeño.]

Mientras murmuraba eso, Natsuki Subaru se quedó mirando su propia mano, ahora reflejada en su visión borrosa.

La mano que se alzaba hacia el techo, con la palma hacia fuera, era la suya propia, que se extendía desde su hombro. Se apretó y se cerró, moviéndose como él quería. Sin duda, era suya.

Sin embargo, era la mano de un niño, un tamaño más pequeño de lo que Subaru esperaba.

Lo que significa-------

Subaru: [No volví a la normalidad...]

Esa había sido su oportunidad de salir de su situación desesperada, debería haberla alcanzado después de pasar por incalculables dificultades. Había arriesgado literalmente su vida una y otra vez por esto, o eso parecía, y sin embargo, el resultado se le había escapado de las manos.

¿Cuántos sacrificios había hecho por lo que había dejado en sus manos?

Sólo. Cuántos. Sacrificios-------

Subaru: [-------!? Está bien, qué demonios estoy haciendo!?]

Una sacudida recorrió repentinamente su conciencia sombría, Subaru llevó la mano que había estado mirando a su cara.

Los recuerdos que le vinieron a la mente fueron los de la extraña situación que había encontrado en la Ciudad de los Demonios, así como el peligroso juego de la mancha con Olbart, en el que le habían puesto en apuros; tanto, que eso había sido peor que lo primero.

Subaru había conseguido hacerse con la victoria tras acumular innumerables "muertes". Debería haber conseguido su cuota de vencedor-------es decir, deshacerse de su infantilización.

Subaru también recordó a Olbart tocando su pecho para intentar deshacerse de su infantilización.

E inmediatamente después de eso, sintió como si alguien le hubiera susurrado al oído el lenguaje del amor del alma, y-------

Subaru: [Me desmayé después de eso, y luego... ¿Y luego?]

Subaru intentó buscar en sus borrosos recuerdos lo que había sucedido. Sin embargo, incluso cuando empujaba y tiraba, la puerta que contenía sus recuerdos interrumpidos se negaba a abrirse.

Apretando firmemente sus dientes traseros, Subaru se impacientó cada vez más, al sentir lo obstinada que era esta puerta-------

???: [-------Ahora, ahora, vamos a tomarlo con calma, no hay necesidad de ponerse nervioso. Por suerte, habéis conseguido salir con vida, así que podéis tomaros vuestro tiempo para hacer cosas después de que la pequeña señorita que vino con vosotros se despierte].

Re Zero Arco 7: La Tierra de los LobosWhere stories live. Discover now