Capítulo 100: Una Miríada de Cambios en los Bastiones

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――La senilidad del『Dragón de las Nubes』Mezoreia.

La sorprendente revelación de la verdad llevó a Emilia a una situación tremendamente difícil.

Emilia: [En ese momento no tenía que vencer a Volcanica, lo único que tenía que hacer era esforzarme al máximo y completar la Prueba, pero...]

En el piso más alto de la Atalaya de Pléyades, su encuentro con el『Dragón Divino』Volcanica concluyó al tocar un monumento de piedra en la cima, aún más arriba de la torre.

En cuanto a Emilia, aún no estaba segura de haber resuelto correctamente la Prueba de Volcanica; sin embargo, el antiguo Dragón le había presentado a Emilia una de sus garras como prueba.

Así que, por ahora, lo consideraba un símbolo de aprobación.

Sin embargo, su lucha con Volcanica había sido fundamentalmente defensiva, sin intención de derrotarlo, por lo que no fue en absoluto una batalla.

Y esta situación seguía siendo la misma incluso si el oponente cambiaba del『Dragón Divino』al『Dragón de las Nubes』

En todo caso-------

Emilia: [No tengo más opción que vencerlo, pero Mezoreia ha perdido------¡Ah!]

Mientras decía esto, Emilia saltó de su lugar y se acercó al Dragón desde el aire.

Agitando sus largos bigotes sin revelar lo que reflejaban sus ojos, el Dragón lanzó sin piedad sus garras hacia la insignificante existencia que volaba hacia él.

Fue un ataque simple, pero un solo golpe sería más que suficiente para matar a alguien si conectaba.

Las garras del Dragón eran mucho más afiladas que las de cualquier espada corriente y podían cortar fácilmente el cuerpo de Emilia por la mitad.

Emilia: [¡Soldados!]

Sin embargo, Emilia fue capaz de evitar este ataque saltando aún más hacia el cielo.

El punto de apoyo en el aire que Emilia utilizó fue proporcionado por un Soldado de Hielo que había saltado junto con ella y puso sus dos brazos para que Emilia saltara.

Naturalmente, el Soldado de Hielo no pudo escapar a tiempo y cayó preso de las garras del Dragón, que lo hizo pedazos.

Emilia: [¡¡Eiya!!]

Manteniendo este sacrificio en su corazón, las largas piernas de Emilia patearon a Mezoreia en la cara.

Emilia dio esta patada con calzado hecho de hielo, que cada uno tenía un gran pincho extremadamente afilado, formando armas ferozmente letales.

Ya que Emilia habia usado su pie, no se anduvo con rodeos con esta patada despiadada------así que un golpe absurdamente brutal golpeo el lado de la cabeza indefensa de Mezoreia.

Sin embargo------

Emilia: [¡No funciona en absoluto!]

El enorme cuerpo de Mezoreia no se movió ni un milímetro al recibir la patada en la cara.

Sin embargo, parecía irritado. Sintiendo una sensación de hostilidad en la piel, Emilia balanceó enormemente la parte superior de su cuerpo para dar una voltereta en el aire, utilizando otro Soldado de Hielo para esquivar la estocada entrante del Dragón.

Detrás del destrozado soldado, otro Soldado de Hielo había saltado aún más hacia arriba y estiró ambas piernas desde arriba. Alineando ambas plantas, Emilia se lanzó desde ellas hacia el suelo.

Mientras el sonido del hielo rompiéndose resonaba en sus tímpanos, Emilia aterrizó en el suelo blanco con la mano, y luego miró hacia el majestuoso Dragón envuelto en nubes que flotaba tranquilamente en el aire.

Re Zero Arco 7: La Tierra de los LobosNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ