Capítulo 17

147 21 4
                                    

Los siguientes días fueron un sufrimiento para ambos, ninguno quería salir de su habitación, grabar videos o siquiera preocuparse por qué comerían.

Un comportamiento muy normal después de que fueran golpeados por la realidad.

Este tiempo de "aislamiento" les sirvió para pensar mejor las cosas; Willy entendió que no podía hacer nada para intentar ir más allá de una amistad con Samuel; Samuel comprendió que todas las palabras de Alex habían sido ciertas, que todas las lágrimas de Rubius eran por él, que lo había lastimado sin darse cuenta y que ahora todo había terminado, no podía recuperar a Rubius porque ni siquiera lo recordaba. Lo único que podía hacer, era culparse y lamentarse por ser la peor persona del mundo (al menos así lo sentía), se torturaba diciéndose esas palabras y dando por hecho que sería mejor si ambos seguían sus caminos por separado, porque tampoco tenía otra opción al saber que Rubius había dejado muy en claro que no se volverían a ver.

Y así, Samuel pensó que estaba bien vivir con esa opresión en el pecho, esa sería su condena por olvidar y lastimar a la persona más importante en su vida.

El día de su revisión con el médico llegó. Como de costumbre, Willy lo acompañó, pero hubo una diferencia, esta vez Willy se quedó atrás, dejando a Samuel entrar solo; el castaño agradeció internamente por esa acción.

-He revisado las radiografías, todo parece estar yendo muy bien, no hay ningún retroceso ni nuevas heridas –dijo el doctor sentándose frente a él después de hacer una revisión rutinaria. –Ahora viene lo más importante, tu salud mental ¿cómo has estado, Samuel?

El castaño titubeó un poco antes de decidirse en decir la verdad. –Estos últimos dos meses han sido bastante contradictorios, al principio del bimestre podía jurar que estaba "totalmente recuperado" que por fin podría ser feliz y vivir en paz, pero... hace una semana entré a mi casa de nuevo, el resultado fue desastroso, descubrí algo que hubiera sido mejor no saber y todo se vino abajo, ahora sé que viviré con culpa y remordimiento y creo que eso es lo mínimo que merezco.

-¿Estás condenándote a ti mismo? –Samuel no contestó. El doctor conocía la situación de Samuel, sabía que había una parte de sus recuerdos que estaba bloqueada y que extrañamente esa parte era la más importante para él. Todo el tiempo que Samuel estuvo yendo a revisiones, el doctor evitaba tocar ese tema, pero ahora que infería que Samuel sabía la verdad y que seguía sin recordar, podía al menos darle un poco de ánimo y consejos. –No has hecho nada malo, no tienes la culpa de no recordar ciertas cosas. Samuel, mereces ser feliz, tal vez en este momento es difícil creer que es posible, pero al menos no te cierres a las posibilidades de que en algún momento recordarás. E incluso si jamás regresan esos recuerdos ¿no puedes crear nuevos momentos junto a la persona que tú quieras?

Palabras fuertes y profundas que causaron un revuelo de emociones en Samuel. Una parte de él le decía que siguiera avanzando y que buscara "su felicidad"; otra, con mayor intensidad, le decía que no se merecía una oportunidad.

-Quiero decirte algo –el doctor interrumpió sus pensamientos. –He estado siguiendo tu caso de cerca, investigando e intentando encontrar una manera para que esa parte de tu memoria regrese. Siendo sincero, no he avanzado mucho, pero creo que hay algo rescatable que he descubierto y que posiblemente sea de ayuda, antes de decirte mi teoría quiero saber algo, Samuel, tú ¿quieres recuperar tus recuerdos sobre esa persona?

Su corazón comenzó a latir más rápido, su mirada ganando un poco de brillo de vacilación, no esperaba oír una propuesta así, incluso sintió un poco de decepción al darse cuenta de que el médico sabía sobre Rubius y nunca mencionó nada, pero al instante entendió el porqué.

"Solo es una suposición, nada está asegurado, incluso si lo dice es probable que nada cambie... entonces por qué... ¿por qué me siento como si esta fuera la solución?"

-Quiero escucharlo –respondió con una seguridad que incluso sorprendió al médico.

-Bien. Analizando casos anteriores similares al tuyo, y recopilando datos sobre tu avance, he llegado a la conclusión de que has recordado cosas después de un "detonante"-Samuel no entendía a qué se refería, pero dejó que continuara. –Ya sea ver a una persona, hacer alguna actividad, fotografías, lugares... todos esos fueron detonantes que dieron como consecuencia que recordaras algo. Pienso que lo mismo puede pasar con esa parte de tu memoria que está estancada.

-Pero...

-Espera –interrumpió al ver que Samuel intentaba refutar su teoría. –Sé que te has encontrado con él, incluso sé que te han contado cosas sobre tu pasado y nada ha ocurrido, pero es probable que aún no hayas encontrado un verdadero detonante, has dicho que el entrar a tu casa te resulta asfixiante, tal vez ahí esté la respuesta.

"La habitación". Pensó Samuel.

-Creo que sé qué es –susurró Samuel.

-Bueno, es solo una teoría, no estoy seguro de que funcione. El resto depende de ti, y Samuel... Mereces ser feliz.

***

-¿Estás seguro de esto? –preguntó el menor viendo a su amigo guardar sus últimas cosas en la maleta.

-Alex, no hagas ese tipo de preguntas, hablé muy en serio cuando dije que me iría.

-Entiendo –Alex mentiría si dijera que no tenía ganas de llorar.

-Compré el boleto para pasado mañana, aún tengo algunas cosas que arreglar antes de irme, pero es probable que sea el último día que nos veamos –dijo el peliblanco con una voz monótona e incluso indiferente, lo que lastimaba más al pequeño Alex.

-¿Regresarás? –la pregunta que Alex había estado aguantando hacer salió de manera instintiva.

Dolor, dolor y más dolor.

Dolor en Alex de ver a uno de sus mejores amigos irse con el corazón roto y el alma destrozada.

Dolor en Rubén al oír la voz quebrada y suplicante de Alex.

No contestó. 

Lo que recuerda de mí || RUBEGETTAWhere stories live. Discover now