CAPÍTULOS DEL 72 AL 77

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CAPÍTULO 72. MALOS AMIGOS (I)
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Xiao Xiaofan regresó a su casa con muchos juguetes. Al ver la cara feliz de Xiao Xiaofan, Xiao Qingyan simplemente no pudo evitar enojarse.

Su hijo todavía estaba acostado en la cama debido a la lesión, ¡pero Xiao Xiaofan acababa de pasar el rato con Xiao Jingting y Xiao Jinfeng y disfrutaba de deliciosos platos! Xiao Jingting había dicho que le daría una lección a este pequeño tonto, pero resultó que solo dejó que su hijo disfrutara de una buena comida y tuviera más juguetes.

Al ver a Xiao Qingyan, Xiao Xiaofan se escondió detrás de Xiao Jingting apresuradamente.

Aunque Xiao Xiaofan no era tan inteligente, aún sabía cómo buscar ventajas y evitar daños por naturaleza. Y sabía que Xiao Qingyan no era un hombre con el que se pudiera jugar, así que simplemente se puso alerta.

Xiao Qingyan miró fijamente a Xiao Jingting y dijo gravemente: "¡De qué buen humor estás, tercer hermano! ¿No prometiste sermonear a tu hijo? ¿Es así como lo sermoneas?

"Le he sermoneado, hermano mayor. Le dije que si vuelve a intimidar a alguien, nunca tendrá la oportunidad de disfrutar de la deliciosa comida y los divertidos juguetes. Está asustado, ya ves, incluso se está escondiendo de los demás", dijo Xiao Jingting.

Xiao Qingyan mostró una sonrisa falsa y dijo: "Qué considerado eres, tercer hermano".

"Solo así. Se necesita esfuerzo para enseñar a los niños". Xiao Jingting suspiró.

Al escuchar eso, la cara de Xiao Qingyan se distorsionó.

Dejando a Xiao Qingyan, Xiao Jingting y Xu Muan regresaron a su casa.

Miró a Xiao Jingting, que estaba sentado en la cama y se frotaba los pies perezosamente, Xu Muan se quedó sin palabras.

"Vi algunas grandes empresas en la calle hoy", dijo Xiao Jingting.

Xu Muan asintió, "Sí. Ciudad del Desierto es superior al campo, hay tantos artefactos y talismanes en la tienda aquí, pero son demasiado caros."

En el pasado, era demasiado pobre para entrar en un lugar así. Incluso cuando se animaba a entrar en la tienda a veces, los servidores no tenían ningún deseo de recibirlo al ver su aspecto andrajoso. A veces incluso algunos de los servidores lo expulsaron y le dijeron burlonamente que ese lugar no era para una persona como él.

Al experimentar eso por algunas veces, Xu Muan simplemente podía pararse fuera de la empresa, mirando con anhelo los deslumbrantes carteles coloridos y las pancartas publicitarias.

"Todavía tengo 30 o 40 mil taels de plata aquí, vamos a comprobarlo algún día". Dijo Xiao Jingting.

"Xu Muan se sorprendió, "¿Por qué no hiciste eso hoy?"

Xiao Jingting respondió avergonzado: "Como dijiste, de todos modos son grandes empresas. Las cosas allí pueden ser costosas. Si llevamos a Xiaofan allí y no puedo pagar lo que Xiaofan quiere, puede ser vergonzoso."

Xu Muan se quedó sin palabras. Entonces así fue...

"Has ofendido al hermano mayor hoy", dijo Xu Muan.

Xiao Jingting respondió perezosamente: "¿A qué temes? Ya lo he ofendido antes. Pero creo que es extraño que el hermano mayor solía mencionar mucho la Academia Bifeng y estar orgulloso de eso, pero recientemente ha mencionado menos de eso."

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