Perú, el país más hermoso (Argentina x Perú)

Amistades, Capítulo 22

Capítulo veintidós.

―aja, Okey, entiendo, espero que estés bien, si, si, te espero, no hay problema, ¿qué?, no para nada, no eres una molestia, eres mi amigo yo voy a estar cuando lo necesites, si, te espero, cuídate, adiós― dijo Paris mientras colgaba el teléfono fijo.

―¿amor quién era?― preguntó Paz, novio de Paris.

―era argentina, su casa se prendió fuego y no tienen a donde ir, me pregunto si se podían quedar unas noches aquí a dormir.

―oh, pobrecitos, que tragedia―exclamó paz

― Si, me lo imagino― dijo París mientras se sentaba en una silla para quedar sumergido en sus pensamientos.

―¿amor pasa algo?― paz vio a parís un poco decaído, lo cual era raro, parís solía estar todo lo contrario de decaído y melancólico.

―no... nada... solo que...―balbuceaba París ―no importa, tenemos que tener las habitaciones de los invitados listas, no hay tiempo para hablar.

paz se quedó extrañado, rara vez vio a parís en aquel estado, aunque no quiso insistir y simplemente lo dejó pasar.

Al cabo de una horas, argentina y Perú llegaron a la casa, se veían extremadamente cansados, argentina arrastraba unas grandes ojeras, y perú estaba totalmente palido, en solo cuestión de horas parecía como si hubiesen perdido la mitad de lo que pesaban.

―lamentamos mucho por lo que están pasando, es algo terrible―dijo paz― siéntanse como en casa, estaremos para ustedes si lo necesitan― siguió diciendo. todos (excepto paz) estaban callados, como tumbas. nadie tenía algo que decir realmente, por momentos es mejor el silencio.

París no decía nada, solo se quedaba viendo la nada misma y por momentos parecía que intentaba escapar.

―gracias por la hospitalidad, podría guiarme hasta la habitación ― dijo Perú.

―claro cariño, ven sígueme― dijo paz mientras iba en dirección hacia la habitación de invitados, Perú lo siguió con dos maletas. París y Argentina se quedaron solos, en silencio, aquel momento era perfecto para tener aquella charla de amigos, parís se moría por preguntarle ¿qué había pasado? ¿Cómo terminaron las cosas de esa manera?, pero una fuerza mayor hacía que parís no emitiera ningún ruido, parís simplemente estaba callado, y Argentina estaba igual.

―ehh...― parís quería decir algo pero antes que él pudiera hablar argentina lo hizo primero.

―con permiso, voy al jardín a tomar aire― París se quedó allí, no evitó que él se fuera.

―parís― dijo paz, su pareja― ¿pudiste hablar con argentina?, no quiero meterme en este tema, no soy cercano a ellos, pero presiento que hay algo más que solo un accidente con fuego, ¿no lo crees?

―no... no hable con él.

―¿que?, ¿te quedaste en silencio en todo el tiempo que no estuve?

―bueno, si, así fue― dijo parís apartando la vista mientras se rascaba la nuca.

―parís, eres su amigo, muestra preocupación por lo sucedido, ¿acaso no estás preocupado?

―obvio que estoy preocupado, el es mi amigo, solo que no se como afrontar el tema, se que es muy tonto pero esta es la primera vez que el me pide ayuda, es obvio que algo malo paso, y no es solo un simple incendio, pero no se como ayudar, me da pánico el conflicto, se que soy mal amigo por no tener nada que decir, pero no me salen las palabras de la boca―dijo parís, este era uno de los pocos momentos que parís hablaba de problemas, el siempre los evitaba, evitaba sentirse mal, no sabe como lidear con emociones negativas, el simplemente escapa de ellas ― no se como ayudar, me siento tan inútil, no es que no quiera hacerlo, solo que nunca tuve la oportunidad de hacer algo por argentina.

― ser un buen amigo, no es solo tener respuestas o consejos, ser un buen amigo también es escucharlo, no evites el tema, es un momento difícil, lo perdió casi todo, su casa se prendió fuego, no tiene donde quedarse, como amigo tienes que acompañarlo en este momento

parís quedó en silencio, no podía vivir toda su vida siendo un cobarde, tenía que enfrentar los problemas, y lo más importante, tenía que acompañar a su amigo.

― tienes razón, no se que haría sin ti― dijo parís mientras recostaba su cabeza en el hombro de Paz.

Paris fue a ver a argentina, quien estaba en el jardín sentado en un banco leyendo un libro.

― ¿argentina?

― parís― parís se sentó en el banco donde estaba Argentina.

― ¿como... como estas?

― estoy bien, un poco cansado pero estoy bien― dijo argentina sin apartar la vista de su libro.

― argentina, sé que este momento es horrible, sabes que puedes contar conmigo.

― gracias por ayudarnos, te debo un favor ― dijo argentina dejando de leer el libro para darle una sonrisa a parís para luego leer de nuevo.

― Tú no me debes nada, ayudar es lo que hacen los amigos... si necesitas hablar sabes que puedes contar conmigo― argentina dejó de leer y se quedó en silencio, luego lentamente levantó la mirada para ver a parís.― se que nuestra amistad no se basa en contar nuestra vida privada o nuestro pasado, nunca fuimos así, pero creo que es momento de que cuando necesites hablar con alguien me tengas a mi. se que quizás no tengas la suficiente confianza para contarme las cosas... pero si lo necesitas cuenta conmigo― argentina cerró su libro.

― no es que no confíe en ti... solo pienso que quizás te pueda llegar a aburrir mis problemas, tengo miedo de arruinar nuestra amistad.

― perdón si te hice sentir eso, generalmente no... no soy bueno para hablar de cosas tristes, siempre las evito, pero si me necesitas estoy para ti― dijo parís sonriéndole a argentina quien devolvió el gesto.

los dos se quedaron toda la noche hablando de muchas cosas, no necesariamente de su pasado, hablaron de que sentían que tenían que hablar. Argentina se sintió escuchado, parís si bien en muchos momentos no fue buen amigo, por lo menos el intentaba serlo, y luchaba por su amistad.

argentina le contó todo lo que pasó, todo, y como se sentía al respecto de ello, al principio argentina solo tenía a Perú , ahora él se sentía traicionado, y volvió a sentirse solo, pero se dio cuenta que ahora lo tenía a parís. ciertamente el padre de argentina le había hecho creer que los demás no les importa como te sientes, que las emociones eran debilidades e innecesarias, argentina se sentina avergonzado de sentir, y aquello lo hizo sentir vulnerable, por eso nunca conto lo que sentía, se sentía tonto al hacerlo. por otro lado parís, siempre se esconde con aquella máscara feliz, aparentando que nunca tenía problemas, que todo estaba bien, incluso cuando todo estaba mal el siempre tenia una sonrisa, aquella noche nublada, los dos pudieron dejar de lado aquello, y hablaron, y nunca más se sintieron solos.

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hola<3

solo les venia a decir una sola cosa, de ahora en mas subiré capítulos los miércoles de cada semana ^^