"Hijo de las estrellas" [Johnmark-NCT]

3. Provocaciones

Viernes 2 de septiembre 2022, 10 días después

—¿Tan temprano su majestad?

Jeno apareció en la cocina de aquel departamento secando su cabello con una toalla como lo hacían los seres humanos, dispuesto a preparar su desayuno y el del príncipe que cuidaba, sin embargo, se encontró con dicho hombre vestido ya con su uniforme escolar, con la mesa atiborrada en comida y los ojos en información que se proyectaba en el aire desde el dispositivo electrónico en su muñeca.

Sin decir una palabra más se sentó a su lado en la isla de mármol y junto a él tomó desayuno observando lo que allí estaba. Eran archivos guardados meticulosamente en carpetas, con categorías, en orden alfabético, todo bien meticulosamente puesto en su lugar para ser entregado el día en que regresasen al planeta Lernu. Sí, el departamento de estudios humanos iba a agradecerlo con creces.

—Creo que dentro de todo el tiempo que llevamos aquí, los 7 meses terrícolas, lo que más me ha impresionado ha sido el impacto de la religión en su sociedad... —miró a Jeno— desde los sumerios, persas, romanos, griegos... todos... la religión es el motor de vida de ellos, es... información valiosa.

—Lo es, es por eso que nos matriculé en una escuela regida por el catolicismo, es... fascinante lo que una religión puede causar en el pensamiento del ser humano.

Mark asintió evocando las imágenes que mostraban el más claro contraste entre el Johnny Suh que vio en Los Angeles versus el hombre que era ahora, tan pulcro, tan correcto, alguien que se había jactado de ser ahora un respetable hijo de Dios.

Mierda, le dolía el estómago de solo pensar en esa conversación, en la ira que le había causado que alguien quisiera olvidar algo que lo involucrara a él, en como durante los días que habían pasado prácticamente nunca lo vio en los pasillos y, cuando estaban en la misma sala de clases, sus ojos jamás estuvieron en su persona. ¿Quién en su planeta tendría el descaro de evitarlo? ¡Pagarían una fortuna por respirar en su mismo ambiente!

Pero... este no era el país que gobernaba ni el planeta que habitaba, solo era eso, estaba jugando a representar el papel de un menor de edad para obtener la mayor cantidad posible de información sobre una sociedad y John Suh no era más que un simple ser humano, uno dentro de 7.750 millones.

—¿Puedo preguntar por qué está estudiando esto, ahora?

—Porque quiero ver donde enfoco mi investigación —cruzó sus brazos— empecemos por esto, la religión y su influencia en la sociedad actual, en como vive y sienten las personas... y, después de unas semanas ... ¡Boom! Enfocamos nuestra investigación hacia un lado más militar, después de todo, involucra la tecnología, la carrera por quien es el primero en habitar un próximo planeta y, por consiguiente, un riesgo para nosotros.

—¿Usted cree que el ser humano podrá llegar a Lernu alguna vez?

Suspiró.

—Si inventan los portales como nosotros, me temo que sí —terminó su desayuno— por cierto, cuando estemos en esa escuela, te prohíbo que me trates de usted, no se verá bien.

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Si quería que esta misión tuviera éxito, entonces debía jugar con el pensamiento del ser humano, si deseaba no cometer errores, entonces debía actuar como realmente se esperaba de alguien como él, o al menos del adolescente que estaba representando y, por sobre todas las cosas, a él le gustaba ser del agrado de todos ¿Por qué no hacer lo mismo en el planeta tierra?