Volveré Hacia el Ayer LIBRO 1 Y 2 COMPLETOS💚

13 ►Yo sí lo recuerdo.

Nils los saluda con un corazoncito, déjenle uno de vuelta ❤

Qué dicen. Nils, ¿se acuerda o no se acuerda del beso? 

NILS BARKER

Horas atrás.

Cerré los ojos y lo hice, sentí sus labios chocar contra los míos, sentí su respiración sobre mi piel y me perdí en ella. 

Por un momento me dije: ¿estoy besando a Oris? Así que la volví a besar para comprobarlo. Una y otra vez. 

Oris era delicada para besar, incluso un poco tímida. Sus manos al comienzo reposaban con algo de temor sobre mi pecho y sus labios me regalaban besos cortos y roces acaramelados. Su boca ardía. 

 No sabía si estaba bien que lo hiciéramos; solo me dejé llevar porque se sentía placentero, armonioso. Iba despacio, sin presiones, solo éramos dos chicos ebrios que estaban besándose bajo un árbol.

Salvo que ella no es cualquier chica. ¿Lo recuerdas, Nils?

...Pero me gustó esa sensación de sentirla siquiera un momento.

Esta vez ella puso sus manos en mi cuello y, lenta y de manera estremecedora, subió hasta mi cabello, despeinándolo aún más. Mis manos en su cintura y ella respirando espesamente en mi boca provocó que la colocara de una manera no tan suave en contra de la acacia. Su pecho subía y bajaba, frotándose en el mío, ciñéndose cada vez más a mí, nublando mi capacidad para mantenerme cuerdo, para no... Joder, me estaba... 

Mi destemplanza me exigía. Tenía calor, mucha calor que mantenía irregular a mi respiración. Bajamos lentamente hasta encontrarnos en el suelo, y él hecho de mirar como ella estaba encima de mí y sentir tal presión me hizo tragar duro. Contemplarla resultó ser un mar de emociones extrañas. Pero seguí besándola, se sentía rico. 

Era un cuerpo hermoso, uno que hizo que formara un camino entre mis manos y su piel para recorrerla toda, cada parte de ella. ¿Qué demonios pasaba? Estaba resultando difícil para mí contenerme. Tenía esa tensión de su pantalón contra el mío y, demonios, arqueé mi espalda al sentir como se me estaba endureciendo. Por el rostro de pasmo que expresó, supe que lo percibió. 

Que no se mueva mucho, por favor... 

La giré, quedé encima de ella y automáticamente miró mi regazo. Claro que sintió aún más la fricción con mi dureza y le afectó. Ver su rostro sensibilizado solo hizo que continuara besando sus tiernos labios. 

Se posicionó nuevamente arriba de mí y jamás me había puesto tan nervioso porque era impredecible. Sentí la tierra en mi espalda, incluso algunas piedrecillas, pero no me importó, nuestro estado de embriaguez hizo que las ideas de sacarnos la ropa no parecieran tan lejanas.

—¿Nils?

—¿Mhm? —Continué besándola—. ¿Qué pasa? ¿Quieres parar?

—¡Nils!

Un momento... Esa no era la voz de Oris.

Sentí que ella me empujó hacia un lado y se fue corriendo hasta la casa. Sin saber qué pasaba, levanté mi vista y vi a Lydon junto con Maite. Supe de inmediato que el imbécil nos estuvo vigilando con la intención de mostrarle que un año pasó rápido. Él seguía enamorado de ella, y cualquier cosa que yo hiciera, por supuesto la usaría en mi contra.