VICEVERSA [ Pedri • Gavi ]

06. Més que un club

La mitad del mes de octubre estaba llena de partidos importantes para el club siendo Valencia el primer encuentro en casa con el aforo al 100%, el siguiente era en Champions con el Dynamo de Kiev con el que tendrían que ganar sí o sí después de la humillación contra el Bayern y por último viene un clásico que podría o no sacarlos de puestos europeos en la clasificación.

Koeman tiene tres partidos para demostrar que su proyecto aún tiene futuro. Por fin recupero a todos sus jugadores internacionales días antes del partido contra el Valencia, el resto de la plantilla debe estar bien descansada después del parón de selecciones y todos motivados por callar bocas. Tantas cosas que hacer y Pedri se encuentra entre sujetos trajeados y perfumados hasta los pies en medio de su renovación oficial. Mil veces preferiría estar en el gimnasio con sus compañeros hediendo de sudor que dando vueltas entre firmar en el despacho de Laporta solo para posar en la foto e ir al Auditori para una conferencia de prensa.

Para la mitad de la conferencia de prensa ya se estaba perdiendo entre preguntas hacia él y Laporte sobre cómo el Camp Nou se caía a pedazos, su cláusula escandalosa de rescisión, una pregunta inoportuna sobre el innombrable ex-presi, el balón de oro a Messi, su nominación al Golden Boy junto a Gavi, su lesión y futuro en el Barça. Tanta pregunta lo estaba agotando de tal manera que su mente se daba el lujo de desconectarse de vez en cuando en los turnos del presidente. Solo quiere que todo termine para irse a casa.

—No me extraña que Messi... perdón, Pedri fuera del Barça.—El nombrado volvió a la realidad de un parpadeo respondiendo al desliz del presidente imitando su sonrisa con incomodidad. Parecía que hablaba de alguna anécdota de cuando le firmó una camiseta hace año en una visita a Tegueste que él no recuerda ni pío.—No me extraña que sea del Barça con ese ambiente.

Alguien ya sáquelo de ahí, por favor.

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—¿Podrías voltear?

—¿Qué?—Levantó la vista de su móvil terminado de enviar una mensaje a Pablo quedando en verse más noche. Él solo quería largarse a casa pero los de redes sociales aún tenían deberes para él después de que la conferencia finalizara.—Ah, sí.—una chica de rostro familiar le entregó la camiseta con el 2026. Le agradeció antes de centrarse en el móvil frente a él esperando la señal para empezar a ser grabado.—Culers, ya es oficial, nos... no, espera ¿qué?—Se detuvo a sí mismo sin recordar su línea buscando ayuda en la chica que le entregó la camiseta.

—...nos seguiremos viendo hasta el 2026. Visca el Barça, visca cata-

—Mierda, un minuto.—La encargada de redes sociales principal interrumpía llevándose el móvil al oído.—¿Cuantas veces te he dicho que no me llames en horario laboral?—Su enojo era evidente.—No, no, hoy no tengo tiempo para tus gilipolleces hijo de puta.—Los dos más jóvenes lucían muy entretenidos escuchando asuntos ajenos antes de que la rubia solo levantara una mano en señal de que la esperaran mientras se retiraba de la sala.

—Hoy el tiempo no le sobra a nadie.—Pedri parecía decirlo más para sí mismo mientras observaba su reloj. La gente ya se retiraba y su familia lo esperaba pero él sigue perdiendo el tiempo como de costumbre.

—Una disculpa, Amanda...—La chica y Pedro cruzaron miradas mientras ella parecía buscar las palabras.—digamos que no está teniendo su mejor día.—A él realmente no le importaban las justificación por lo que solo asintió a punto de sacar de nuevo su móvil.—Está en medio de un divorcio después de enterarse que el esposo la engañó con una de sus damas de honor el mismo día de la boda que fue hace unas semanas.—La castaña no parecía darse cuenta de todo lo que acaba de decir y a quien se lo dijo hasta que hizo una expresión de sorpresa encontrándose con los ojos del canario.—La volviste a liar, Mir.—Se llevo una mano a la frente.—Tú no escuchaste eso, eh.