Palacio

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El sol comenzaba a asomarse por el Adarve, pequeños rayos de luz se asomaban por la terraza.

Izuku quien estaba ya bien envuelto por las sabanas comenzó a despertar :- Mamm.. - asomó su cabecita son sus rizos nublando un poco su visión, inclino un poco su cabeza y volvió a recostarse sobre el brazo derecho de Katsuki.

El sol ya se encontraba en su punto, iluminando directamente la cama, pero Izuku estaba bien cubierto por las sabanas, pero el sol ya obligaba a Katsuki a despertar.

Comenzó a abrir sus ojos, sintió su brazo entumecido, lo saco despacio y se sentó al borde de la cama : - Si que tienes el sueño pesado. -Paso sus manos por su rostro, tratando de dejar el sueño, miro el techo pensando en posibles locaciones dónde estaría el hermano de Izuku

- Y tu el cerebro de un salvaje - el joven le dió la espalda y cubrió sus rizos con las sábanas y frazadas.

El sultán levantó una ceja : -Haci que ya estás despierto -rodo los ojos al ver la respuesta cortante-- si tienes hambre puedes ir al harem.

El Omega se sentó rápido : - ¡Ni pienses que estaré en tu Harem! - sus rizos se balancearon.

Katsuki apoyo sus manos en la cama y se puso de pie : - No te haré parte del harem - ajusto su cinturon, y recien Izuku se percato de el torso aún desnudo del alfa.

Izuku frunció el ceño : - Bueno.

Claro, era extraño, la misma persona que atacó su reino ahora lo estaba tratando de manera ¿Amable?

Katsuki se retiró del cuarto, Izuku volvió a recostarse en la cama, minutos después varios sirvientes llegaron en fila encabezado por una mujer de cabello rosado, lo guiaron a los baños para poder asearse y cambiar sus casis inexistentes vendas, baños de mármol con encaje dorado.

Katsuki se retiró del cuarto, Izuku volvió a recostarse en la cama, minutos después varios sirvientes llegaron en fila encabezado por una mujer de cabello rosado, lo guiaron a los baños para poder asearse y cambiar sus casis inexistentes vendas, b...

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Izuku fue bañado con agua tibia, peinado con delicadeza sus rizos, aún desnudo cubierto por unas toallas tomo asiento en un asiento de mármol frío, las criadas peinaron y arreglaron la ropa que usaría el principe.

Uno de los criados se acercó a Izuku : - El sultán mando este presente para usted - bajo la cabeza y entrego una tiara de plata con esmeralda y pequeños trozos de diamante.

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Mi Gardenia [Bakudeku] [katsudeku] (Reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora