Lisa abrió los ojos con algo de dificultad por el polvo en ellos y rodó apenas sobre su costado, un dolor le recorrió la espalda y el zumbido en su cabeza era ensordecedor y solo gimió de dolor y desesperación. Lo último que recordaba era a Rose gritando que tuvieran cuidado y siendo empujada hacia un lugar por Jackson.
Estaba tirada en el suelo, eso era seguro pensó en ese momento. Comenzó a trazar mentalmente su cuerpo, tratando de señalar las ubicaciones de cada dolor y presión que estaba sintiendo, pero nada comparado por el dolor de cabeza que sentía.
Comenzando por sus pies, se abrió camino hacia arriba por su abdomen, ella podía sentir sus piernas, y con cautela trató de moverlas a ambas.
Una punzada de dolor brotó de su tobillo derecho. Lisa intentó moverlo de nuevo más despacio, pero el esfuerzo solo produjo otra oleada de dolor, Roto, supuso, y pasó a evaluar el resto de su cuerpo.
Todo lo demás se encontraba al parecer en buen estado, intentó moverse y un dolor se disparó abruptamente a través de su abdomen y ahogó un grito mientras bajaba la espalda al suelo.
Tendría que lidiar con esto si quería salir de ahí, sobre todo con el dolor en su cráneo.
Al comienzo tensó sus brazos que palpitaban y dolían por los golpes de los pedazos de concreto, pero Lisa los movía con relativa facilidad. Los movió con cautela hacia su torso, sus manos raspando lo que imaginó que eran escombros en el suelo.
Su ropa, sobre todo su camisa, se sentía hecha jirones rasgados en algunos lugares, pero había poco o ningún dolor mientras se pinchaba una y otra vez el pecho, buscando algo fuera de lugar.
¡Gracias a Dios! todo en perfecto estado en ese lugar, pero el zumbido en su cabeza era algo molesto.
Se preguntó ¿Cuántos golpes en su cabeza ha recivido en el día de hoy?.
Trato de Ignorar el temblor en sus manos mientras continuaba con su autoexamen, moviendo sus manos hábilmente por el frente y los costados de su cuerpo.
Pero, tuvo que tomar una bocanada de aire cuando golpeó un punto sensible en su lado derecho. Más cuidadosamente, palpó alrededor de su caja torácica para determinar si tenía una o dos costillas rotas. El dolor era agudo e intenso y se dio cuenta de que tendría que examinarlo visualmente para comprender mejor su estado.
Trato de limpiar sus manos para despejar el polvo de sus ojos dentro de lo que pudo, aunque era imposible, su ropa también estaba cubierta de aquella arenilla de cemento y ollin, cómo pudo trataba de recobrar la visión sin que entrar más en sus ardientes ojos que resentidos por la sequedad hacían que su vista fuese incómoda y escasa.
Mirando a su alrededor apenas, no pudo ver a nadie cerca de ella, entre la oscuridad divisó que solo trozos de piedra y escombros la acompañaban en ese momento. A su lado, el fuego saltaba por las paredes consumiendo algo que podría ser algún tipo de metal y algo de madera.
Se giró sobre su espalda y cerró los ojos con fuerza para tratar de calmar el zumbido que amenazaba con desmayarla en ese instante, solo respiraba deseando que el dolor desapareciera. Lisa sabía que tenía que levantarse, tenía que buscar a sus amigas y salir de ese lugar y llegar como fuese a jennie.
jennie, su corazón temblaba de preocupación por ella, no estaba segura si jennie ya sabía lo de su situación de secuestro junto Rose y Sunmi, temía que su amada sufriera alguna descompensación u alguna otra cosa que pudiera poner en riesgo su salud y del bebé de ambas.
Sintió ruido que la sacaron de su preocupación mental, alguien estaba gritando su nombre pero sonaba demasiado lejos o al menos es lo que ella creé.
Volviendo a abrir los ojos con algo de dificultad, Lisa miró hacia su alrededor nuevamente, y noto que unos escombros en el pasillo que antes no estaban allí y que ahora podía ver, en él había una mediana abertura y el polvo se derramaba hacia a ratos.
