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Luego de desayunar y preparar un bolso con las cosas necesarias, Remus, Sirius y Casiopea se dirigieron al parque.

-Puedo ir a los toboganes?-Pregunto Casiopea

-Espera, primero ponte bloqueador solar.-Dijo Remus deteniendo a Casiopea, mientras le pasaba una mano llena de bloqueador por la cara.-Es importante cuidar la piel, en tu adolescencia me lo agradecerás.

-No entiendo, pero bueno.

-Lobito no crees que ya es suficiente?

-No claro que no.-Remus se ponía histérico cuando se trataba de proteger a Casiopea, en poco tiempo ya le había tomado DEMACIADO cariño y la sobreprotegia aún que a veces se excedía.

-Bien, ya me voy, adiós! Los quiero.-dijo rápidamente Casiopea mientras se dirigía a los toboganes.

-Adoro a esa niña.

-Crees que estará bien?

-Amor solo es un juego.

-Pero y si se lástima, o si la lastiman.

-Ya tranquilizate, estará bien.-Dijo Sirius mientras se sentaban en una banca a ver más cómodamente a Casiopea.

No estuvo bien, resulta que una niña de poco peso y llena de bloqueador en crema, deslizándose por un tobogán no es una buena combinación.

Sirius no sabría decir en qué momento Casiopea salió disparada por el tobogán hacia un arbusto o el momento en el que Remus lo empujo hacia el suelo cuando prácticamente salto de su asiento.

-Estas bien?, te quebraste algo?, Te duele algo?, Vamos a San Mungo!-Eso último fue una afirmación por parte de Remus.

-Estoy bien, quiero hacerlo devuelta!.-Casiopea estaba más emocionada que Remus sin duda.

-Yo también puedo intentarlo?-Pregunto Sirius llegando.

Esa pregunta solo le causó gracia a Casiopea, considerando que Remus le envío una mirada asesina a su esposo.

-Solo era broma.-Dijo Sirius nerviosamente ante la mirado de Remus.

-Mejor vallamos a casa...-Dijo Remus levantando a Casiopea del suelo.

-No!/No!-Gritaron al mismo tiempo Casiopea y Sirius.

-Pero...

-Pero nada ya escuchaste a papá.-Dijo Casiopea cruzando los brazos y dado vuelta la cara.

Sirius estaba atónito, lo había llamado papá.

-Me llamo papá..Me llamo papá!, Remus oíste eso? Me llamo papá.-Celebraba Sirius mientras lanzaba y atrapaba a Casiopea en el aire y ella reía.

-Oye pero yo también soy tu padre, no?-Pregunto Remus temeroso de la respuesta de la pequeña.

-No, to no eres mí padre.-Remus bajó la cabeza tratando de no soltar lágrimas, Sirius estába en shock y bajo suavemente a la pequeña.-Tu eres mamá Remus.-Exclamo feliz la pequeña.

Sirius no pudo evitar soltar una carcajada por la cara de incomprensión de su esposo.

-¿Mama Remus?-Pregunto Remus dudoso.

-Si, e visto a otras familias por aquí y tu eres la mamá de esta familia.-Explico alegremente Casiopea.

-Si, si eres.-Confirmo Sirius.

-Okey si soy, bueno ve a jugar.

-Gracias, adiós!-dijo Casiopea y se fue.

Una ves sentados en la banca Sirius hablo.

-Asi que... Mama Remus.-Dijo Sirius intentando no soltar una carcajada.

-Si esa pequeña es adorable.

En otro lado...

Casiopea se encontraba caminando hasta que se encontro con un pequeño niño pelirrojo, y como toda niña sociable que es decidió saludarlo.

-Hola!

-Hola-Contesto algo tímido el niño.-Me llamo Ron, Ron Weasley.

-Yo soy Casiopea, Casiopea Black-Lupin.-Se había acostado rápidamente a sus nuevos apellidos.

-Te importa si te llamo Cissa, es que me da pereza decir el nombre completo.

-No, no me importa, me gusta el apodo es el primero que dan.

-Genial, quieres conocer a mis hermanos?

-Claro!-Casiopea estaba emocionada por conocer más gente y posibles amigos.

-Ven sigueme.

Al llegar Casiopea se sorprendió de la cantidad de pelirrojos que había en el lugar, en total habían ocho sin contar a ron claro.

-Vaya tienes una gran familia.

-Ronald! Aquí estás, pensamos que te habías perdido.

A ron se le pusieron las orejas coloradas y hablo.

-Mama no me digas Ronald.

La señora iba a reclamar cuando vio a Casiopea y su cara de enojo a una más relajada y sonriente.

-Oh... Hola, Ronal.. Ron quien es esta linda señorita.

-Mama ella es mí nueva amiga Cissa y Cissa ella es mí mamá.

-Un gusto pequeña, mí nombre es Moly Weasley.

-Un gusto, mí nombre es Casiopea Black-Lupin.

-Oh acaso eres pariente de Remus lupin.

-Si el es mí mamá.

-Moly y ron la miraron con los ceños fruncidos.

En otro lugar

-Ya se está haciendo tarde, mejor busquemos a Casiopea y vallamos a casa.-Sugirio Remus.

-Si mejor vamos.

Luego de un rato de búsqueda encontraron Casiopea con los Weasley, unos viejos amigos.

-Mama Remus!-Exclamo feliz Casiopea, mientras saltaba a sus brazos.

-Peque!

-Ahora entiendo lo de mama Remus.-dijo Moly.

-Lo siento Moly, espero que no allá sido una molestia.

-Molestia?, Pero si soy un amor, que no me viste?

-Definitivamente tengo que alejarte de Sirius.

-Por qué, si juntos somos increíbles.

-Bueno Moly lamentamos molestar, pero mejor nos vamos antes de que se les Suba aún más el ego.

-Oye!/Oye!-Exclamaron al mismo tiempo Casiopea y Sirius, fingiendo indignación.

-Claro, nos vemos y espero que Casiopea pueda venir a casa algún día.

-Claro luego te envío un patronus para arreglarnos mejor.

-Adios Cissa!-Saludo el pequeño pelirrojo al lado de su madre, mientras sacudía la mano.

-Adios Ronnie -Casiopea era la única que podía decirle así sin que se enojara.

Sin dudas ese era el comienzo de una gran amistad.



















































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Perdón por andar desaparecida pero entre tiktok, Wattpad y una maqueta para la escuela no pude hacer mucho, igual intentaré estar más activa.

Los quiero♡

Always WolfstarWhere stories live. Discover now