Always Wolfstar

032

Cerca de las siete, Casiopea salió del castillo y se encaminó hacia el campo de quidditch. Nunca había estado en aquel estadio deportivo, aunque Sirius y remus le hubieran hablado de el. Había cientos de asientos elevados en tribunas alrededor del terreno de juego, para que los espectadores estuvieran a suficiente altura para ver lo que ocurría. En cada extremo del campo había tres postes dorados con aros en la punta. Le recordaron los palitos de plástico con los que los niños muggles hacían burbujas, sólo que éstos eran de quince metros de alto.

Demasiado deseosa de volver a volar antes de que llegara Diggory, Casiopea montó en su escoba y dio una patada en el suelo.

Qué sensación.

Subió hasta los postes dorados y luego bajó con rapidez al terreno de juego. La Nimbus 2.000 iba donde ella quería con sólo tocarla.

De un momento a otro ella miro hacia abajo y vío que había llegado Cedric Diggory. Llevaba una caja grande de madera debajo del brazo.

Casiopea aterrizó cerca de él.

-Muy bonito.-Dijo Diggory, con los ojos brillantes—. Ya veo lo que quería decir Sprout, realmente tienes un talento natural. Voy a enseñarte las reglas esta noche y luego te unirás al equipo, para el entrenamiento, tres veces por semana.-Abrió la caja.

Dentro había cuatro pelotas de distinto tamaño.

-Bueno.-Dijo Diggory.-El quidditch es fácil de entender; aunque no tan fácil de jugar. Hay siete jugadores en cada equipo. Tres se llaman cazadores.

-Tres cazadores.-Repitió Casiopea mientras Cedric sacaba una pelota rojo brillante, del tamaño de un balón de fútbol.

Ella ya sabía cómo funcionaba el Quiddich pero no quería faltarle el respeto a Cedric.

-Esta pelota se llama quaffle.-Dijo Cedric.-Los cazadores se tiran la
quaffle y tratan de pasarla por uno de los aros de gol. Obtienen diez puntos cada vez que la quaffle pasa por un aro. ¿Me sigues?.-Pregunto amablemente.

-Los cazadores tiran la quaffle y la pasan por los aros de gol.-Recitó Casiopea.

-Hay otro jugador en cada lado, que se llama guardián. Herbert Fleet es el  guardián de Hufflepuff. Tiene que volar alrededor de nuestros aros y detener los
lanzamientos del otro equipo.

-Tres cazadores y un guardián.-Dijo Casiopea, decidida a recordar a cada miembro del equipo.-Y juegan con la quaffle. Perfecto, ya lo tengo. ¿Y para qué son ésas?.-Señaló las tres pelotas restantes.

Casiopea vio como le emocionaba a Cedric hablar del Quiddich, asi que decidio hacer como que no sabía nada.

-Ahora te lo enseñaré.-Dijo Diggory.-Toma esto.-Dio a Casiopea un pequeño palo, parecido a un bate de béisbol.-Voy a enseñarte para qué son.-Dijo Cedric.-Esas dos son las
bludgers.

Enseñó a Casiopea dos pelotas idénticas, pero negras y un poco más pequeñas que la roja quaffle.

Casiopea notó que parecían querer escapar de las tiras que las sujetaban dentro de la caja.

-Quédate atrás.-Previno Cedric a Casiopea. Se inclinó y soltó una de las bludgers.

De inmediato, la pelota negra se elevó en el aire y se lanzó contra la cara de Casiopea.

Casiopea la rechazó con el bate, para impedir que le rompiera la nariz, y la mandó volando por el aire. Pasó zumbando alrededor de ellos y luego se tiró contra Cedric, que se las arregló para sujetarla contra el suelo.

-Te encuentras bien!?.-Pregunto Casiopea.

-Si, estoy bien, eres muy linda por preguntar, ¿Ves?.-Dijo Cedric jadeando, metiendo la pelota en la caja a la fuerza y asegurándola con las tiras—. Las bludgers andan por ahí, tratando de derribar a los jugadores de las escobas. Por eso hay dos golpeadores en cada equipo (Maxine O'Flaherty y Anthony Rickett son los nuestros). Su trabajo es proteger a su equipo de las bludgers y desviarlas hacia el equipo contrario. ¿Lo has entendido?.-Pregunto amablemente.

-Tres cazadores tratan de hacer puntos con la quaffle, el guardián vigila los aros y los golpeadores mantienen alejadas las bludgers de su equipo.-Resumió Casiopea.

-Muy bien.-Dijo Cedric sonriendole.

-Hum... ¿han matado las bludgers alguna vez a alguien?.-A Casiopea le causaba curiosidad saber eso.

-Nunca en Hogwarts. Hemos tenido algunas mandíbulas rotas, pero nada peor hasta ahora. Bueno, el último miembro del equipo es el buscador. Ese soy yo. Y no tengo que preocuparme por la quaffle o las bludgers...

-Amenos que te rompan la cabeza.-Dijo Casiopea sin poder evitar bromear.

-Tranquila, estaré bien, bueno siempre y cuando no me pelee con los gemelos Weasley.-Dijo bromeando.

Cedric buscó en la caja y sacó la última pelota. Comparada con las otras era pequeña, del tamaño de una nuez grande. Era de un dorado brillante y con pequeñas alas plateadas.

-Esta dorada.-continuó Cedric.-Es la snitch. Es la pelota más
importante de todas. Cuesta mucho de atrapar por lo rápida y difícil de ver que es. El trabajo del buscador es atraparla. Tendre que ir y venir entre cazadores,
golpeadores, la quaffle y las bludgers, antes de que la coja el otro buscador, porque cada vez que un buscador la atrapa, su equipo gana ciento cincuenta
puntos extra, así que prácticamente acaba siendo el ganador. Por eso molestan tanto a los buscadores. Un partido de quidditch sólo termina cuando
se atrapa la snitch, así que puede durar muchísimo. Creo que el record fue tres meses. Tenían que traer sustitutos para que los jugadores pudieran dormir...
Bueno, eso es todo. ¿Alguna pregunta?.-Casiopea negó con la cabeza. Entendía muy bien lo que tenía que hacer; el problema era conseguirlo.

-Todavía no te mostraré lo que puedo hacer con la Snitch.-Dijo Diggory guardándola con cuidado en la caja.-Está demasiado oscuro y podríamos perderla.-Dijo Cedric.

-Es eso o tienes miedo de fallar frente a mí.-Casiopea a veces sentía la necesidad de molestar a las personas solo por qué si.

Cedric solo entre cerro sus ojos con diversion y saco la snitch devuelta y comenzaron a jugar.

Después de media hora se hizo de noche y no pudieron continuar.

-La copa de quidditch llevará nuestro nombre este año.-Dijo Cedric lleno de alegría mientras regresaban al castillo.-No me sorprendería que resultaras
ser la mejor jugadora de tu edad.-Dijo revolviendole el cabello a Casiopea con diversion.

En el poco tiempo que se habían conocido ya habían ganado mucha confianza en su relación.

Tanta que Cedric la llevo sobré su espalda cunado volvían al castillo.

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Ayudaaa escribír con Deadric no es lo mismo que escribir con Edmund😫

Cuando escribo con Edmund las cosas se sienten tan naturales y bien

Pero con Deadric es como aaaahhh, no se explicarlo, es como muy obligado

Pero es necesario para la trama!!!!

Probablemente no los junte completamente o si nosé 😫