Verse atrapada en un triángulo amoroso no estaba en los planes de Violette; su intención nunca fue herir los sentimientos de otras personas, pero ¿cómo podía evitar enamorarse de Harry, el único chico que realmente la veía?
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El concurso de bandas finalmente había llegado y no sabía quiénes se encontraban más nerviosos, si los chicos o nosotras que no teníamos idea de qué es lo que pasaría.
Todos en el colegio se encontraban demasiado emocionados por este día, ya que tenía entendido que esta era la primera vez en la que algo como esto sucedería.
Tanto los salones de clases, como los pasillos del colegio se encontraban adornados con decoraciones navideñas como recordatorio de las fechas próximas, el clima en Holmes Chapel había bajado y por fin le estábamos dando la bienvenida al invierno, una estación del año que anteriormente me gustaba demasiado pero que ahora, por obvias razones, no es mucho de mi agrado.
Era extraño ver a los estudiantes deambulando por los pasillos usando ropa casual y no el uniforme escolar.
En esta ocasión por indicaciones del director, únicamente habíamos tenido las primeras dos clases para poder aprovechar en su totalidad el evento de este día. Durante toda la semana, nos dedicamos principalmente a presentar los últimos exámenes y proyectos de este parcial, así que ahora, al estar libres, podríamos concluir con éxito este fin de clases.
Podía escuchar por todas partes a la mayoría hablando sobre qué harían en sus vacaciones: algunos viajarían, otros se quedarían en el pueblo y unos más tendrían que seguir asistiendo a clases de regularización debido a sus bajas calificaciones; por mi parte, era evidente que la segunda opción sería la que tomaría, no porque quisiera, sino porque las necesidades me orillaban a ello.
Sería jodidamente extraño pasar la navidad lejos de mi hogar.
- ¡Ahí están! - escucho que Emily anuncia y sin esperar más, nos toma de la mano para que caminemos con ella
El comedor del colegio está repleto de estudiantes que hablan a su vez y ríen fuertemente ocasionando que de alguna manera, estar aquí sea abrumador, sin embargo, sin saber cómo, logro mantenerme tranquila.
Al ser un colegio pequeño no se contaba con un auditorio, aun así, los encargados del instituto lograron adaptar los espacios de manera en que todos pudiéramos concentrarnos en el comedor del colegio para presenciar el concurso de bandas. Al frente, un pequeño escenario estaba instalado al igual que algunos instrumentos musicales como guitarras, teclados y una batería, a un costado, una mesa con cinco sillas estaban montadas para que algunos maestros fueran los jueces en el concurso. Se lo habían tomado muy enserio.
Atravesando el océano de gente que nos rodea, logramos llegar al frente, donde los chicos están reunidos en un círculo al que nos integran en cuanto nos ven.
- ¡Hay demasiada gente aquí! - digo contenta
- Ni lo menciones, que de solo pensarlo quiero vomitar - responde Louis inflando sus mejillas de manera exagerada
