Capítulo XXIII Suerte

74 8 10
                                    

11:35 PM...

+Todo este tiempo fuiste tú el culpable de su condición

+No, no, no siempre fui yo –Negó dándose la vuelta por completo para encararme– fue algo que se buscaron

+No lo entiendo, ¿Por qué lo hiciste? Fue un accidente de hace más de cinco años, mis amigos y yo ni siquiera pensábamos en la existencia de este juego, esto no tiene nada que ver con nosotros, ¿Por qué le negaste la vista a alguien que no te estaba haciendo nada?

+Cuando atacas el pilar más fuerte del árbol, este va a caer sin importar que tenga otros que lo sostengan

+¿A qué te refieres? –pregunté sin entender del todo su respuesta, si esto no era algo que iba en contra de ella, ¿En contra de quién iba este ataque y por qué usarla a ella como carnada?–

+Que no importa si no vas contra tu objetivo, si golpeas algo que lo haga caer este no va a sobrevivir. Alysa era una niña cuando lastimosamente perdió la vista... O tal vez no la perdió por completo

  Lo miré durante unos segundos analizando sus últimas palabras, ¿Podría ser posible el hecho de que ella aún puede ver? Pero para eso la única persona que puede hacerlo desgraciadamente es él.

+Acepta el trato, si ganamos le devuelves la vista que le quitaste

+¿Y si no ganan? ¿Qué obtengo yo a cambio? Debes darme una oferta interesante, sabrás que devolverle la vista me costará un poco y-...

+Podrás quitarme la vida por la de todos los jugadores –Lo interrumpí– si no ganamos no vas a cobrar la vida de mis amigos, cobra la mía por la vida de los ocho, sé que para ti soy más interesante que el resto

  Este se veía interesado en mi propuesta, ladeó levemente la cabeza y soltó una pequeña risa mientras negaba.

+Nunca pensé escuchar algo así salir de la boca de un Lee

  Fruncí levemente el ceño, idiota

+Eres un gran jugador Lee Minho, sabes liderar perfectamente a tus amigos en el juego, entiendes las reglas de este como las pruebas de manera inmediata, hablas el idioma del juego de principio a fin y tienes mucha valentía corriendo por tus venas; eres un jugador valioso, lastimosamente el ser valioso también te trae problemas. Una persona como tú es un obstáculo para mi juego, mi única opción es aceptar tu trato.

  Caminó unos pasos hasta estar a unos centímetros de mí, traté de ver mejor su cara pero era un intento fallido debido a su máscara, lo único que podía distinguir era un pequeño reflejo azul en la parte oscura de sus ojos, de resto era un ojo completamente sumergido en la oscuridad. Sentí un pequeño escalofrío recorrer mi nuca al tener la vista fija contra la suya, podría estar viéndome pero a la vez no, es como ver a una persona que te está viendo el alma.

  Levantó sus manos hacia el cielo y el ambiente a nuestro alrededor pasó de de ser cálido a una atmósfera lúgubre, los árboles que veía con visa ahora estaban de un color grisáceo, los pequeños animales que habitan el bosque se han detenido con la vista fija hacia el cielo, parecían estar hipnotizados. El frío recorrió mi cuerpo provocando que hiciera una pequeña mueca de disgusto acomodando mejor mi chaqueta. Las nubes se tornaron de un color gris y la luna aumentó su brillo de un momento a otro, parecía la perfecta escena de una petición divina.

  Subió la vista hacia el cielo y soltó una gran suspiro para después hablar.

+Si para cuando el último hombre de nieve caiga y las doce campanadas de la media noche de la víspera de navidad cesen no han terminado con éxito el juego, la vida de Lee Minho será llevada por el juego mientras que la de los demás jugadores serán dejadas en paz

Winter Falls [Lee Know]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora