Capítulo 6: No tenemos tiempo

228 26 1
                                    

#Modificado

Esto es relajante, siento el agradable canto de los pájaros a medida que unos gentiles dedos se deslizan por mi cuerpo desnudo, aquellos dedos suben y bajan sin malicia por mi espalda hasta llegar a mi trasero, yo me encuentro con los ojos cerrados mientras estoy boca abajo en la cama, no estoy seguro de cuando tomé esta postura, pero cuando abrí mis ojos no me sorprendió despertar en la cama de Logan.

Esto comienza a volverse una costumbre, aunque no me desagrada, su cama es mucho más reconfortante que la mía, sobre todo para las noches frías, sin embargo, me relajo demasiado y termino olvidando mis obligaciones como sirviente, por ello tras recordar que debía trabajar, me giré de inmediato para sentarme en la cama viendo como él sonreía a medida que apoyaba su cabeza en su mano izquierda a la vez que su codo sostenía el peso.

—Lo siento, me quedé dormido— me disculpé.

Normalmente él se despierta de los últimos en todo el castillo, es por ello que tras verlo despierto sabía que me había quedado dormido, aunque, ¿Cómo no hacerlo? Anoche lo hicimos muchas veces, mi cuerpo casi no podía moverse de lo cansado que me encontraba, ni siquiera me acuerdo cuando me dormí y eso me hace sentir aún más avergonzado.

—No importa— me sonrió— es la primera vez que te veo dormir, normalmente te vas antes que despierte.

Lo miré, no sabía que algo como eso sería tan importante para él, quizás por ello me sonrojé tratando de marcharme cuanto antes para preparar su baño, así mientras él se baña yo puedo correr a la cocina a pedir su desayuno y mientras lo hacen, corro hasta la mía para ducharme.

Estoy retrasado con mis deberes, a Morgan ya no le sorprende que pase la noche fuera de mi habitación, aunque últimamente se mantiene curioso por saber con quién estoy saliendo, sin embargo, no sé cómo responderle a eso, Logan y yo no somos novios, no es como si saliéramos románticamente, nosotros únicamente nos relacionamos en la intimidad.

No quiero decirle que solamente es deseo carnal, Morgan parece ilusionado en que encuentre a mi primera pareja por ello con nerviosismo trato de evitar sus preguntas, unas que detiene cuando lo abrazo antes de marcharme corriendo a trabajar.

Ya se me ha vuelto una costumbre abrazarlo, es reconfortante, después de todo con él me siento amado e incluso siento que soy feliz justamente porque él se encuentra pendiente de que lo sea.

Claro que la felicidad únicamente me dura un poco, cuando recogí el desayuno de Logan en una bandeja de plata y entré a su habitación, mantuve la respiración tras recordar lo descuidado que fuimos, sobre todo porque hay muchas cosas tiradas e incluso cosas rotas que debo recoger, supongo que nos dejamos llevar demasiado por el deseo, aunque no sabía que llegaríamos al punto de destrozar una habitación.

En mi defensa, Logan parecía insaciable, primero lo hicimos contra uno de los estantes que guardaba sus armaduras, luego sobre un mueble con joyas que le han sido regaladas en sus cumpleaños, luego sobre la mesa, ¡las frutas están esparcidas por el suelo!

Ya llevamos dos meses teniendo este tipo de relación, si continuamos así nos volveremos adictos al cuerpo del otro, algo que para variar creo que ya está ocurriendo, pero quiero pensar que aún me queda un poco de sensatez.

—Cielos, no sé por dónde comenzar— comenté acercándome a su cama.

—Que genial es ser príncipe en situaciones como estas— se burlaba— puedo hacer un desastre y no soy yo quien limpiará.

—Te detesto— mentí.

Me decidí por comenzar por la cama, saqué las sábanas para lavarla junto al resto de ropa que había acumulado, luego recogí las cosas del suelo para barrer, de ese modo fui progresando hasta conseguir ordenar la habitación por completo mientras Logan desayunaba pacientemente, el desorden no era tanto como aparentaba ser, de hecho, cuando ordenaba las cosas que tiramos al suelo comenzó a verse mejor, eso lo hacía más fácil y rápido.

Aragón (Bl)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora