Ayla Walker pasó de ser una simple fan de la formula 1, que sólo fue a una carrera gracias a un concurso, a ser la nueva novia de Charles Leclerc, piloto estrella de la escudería Ferrari
Como ocurrió eso? Ni ella lo sabe
-Debes fingir ser su novia...
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Hoy era el día, el día de la firma del contrato, habían pasado 3 días desde la carrera de Miami y mi mente seguía igual de revuelta que aquel día, por el contrario mi hermana se encontraba feliz y radiante, se sentía en la cima del mundo con la noticia, quisiera poder estar igual de feliz pero es que aún no entendía que estaba pasando.
Nos encontrábamos ambas en un taxi hacía el hotel JW Marriot, uno de los más lujosos hoteles de Miami, como decía Layla daba brinquitos de emoción mientras yo me moría de nervios.
Claramente no le dije a mi hermana de mi fugaz encuentro con Charles en la fiesta, se hubiera armado mil historias con eso, y no quería añadir otra preocupación a mi lista.
-Crees que estoy bien vestida para la situación?- dije ojeando mi ropa, me había puesto un pantalón negro y un suéter de lana manga larga no sabía que se usaba para firmar un contrato que cambiaría mi vida.
-Estas preciosa hermana- dijo sonriente- quieres lucir bien para tu novio eh?- me golpeó suavemente con la mano hecha un puño
-No digas eso, nada será real- negué mirando hacía el frente
-Que sabes si se enamora de ti?- me miró ilusionada y negué de nuevo
-Deja de decir esas cosas, estás haciendo que me arrepienta de hacer esto- ella negó rápidamente y tomó mi mano
-No hermana, tranquila yo te apoyo en esto- asentí agradeciéndole y continuamos en silencio el resto del camino y lo agradecí, la voz de mi hermana me ponía más nerviosa de lo que ya estaba.
Al llegar al hotel en el lobby nos enviaron al piso 15 a una sala de conferencias del hotel, subimos en el lujoso ascensor con la clásica musica "relajante" perforando mis oídos, maldije internamente el haber aceptado hacer esto, cada paso que daba hacía la puerta de la oficina, me hacía temblar, si no fuera por tener a Layla a mi lado ya me hubiera desmayado. Ya en frente de la puerta dude en tocar así que Layla como siempre se me adelantó y la abrió con rapidez .
-Hemos llegado- dijo Layla en un tono alegre- hola cuñadito- le habló a Charles quien volteó a verla confundido y sólo sonrió
-Hola- solté sin más entrando detrás de Layla, de nuevo los nervios no me dejaban hablar.
-Hola chicas- saludó Mary tomando asiento e invitándonos a hacerlo- ya que estamos todos, podemos comenzar con la reunión.
-Antes que todo quiero que sepas que todo esto es ficticio, no estoy ni estaré enamorado de ti, es simple trabajo así que espero que seas profesional- soltó de repente Charles en dirección a mí que asentí mirándolo extrañada, y a este idiota que? Quedamos en que lo ayudaría y él a mi, un mutuo acuerdo.
-No porque sea fan significa que me creeré esta estupidez y me obsesionaré contigo- le dije con un tono agrio, quien se creía este? Ni que fuera Tom Cruise a sus 25- así que puedes estar tranquilo, no me gustas para nada.
