Capítulo 37

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El fin de un nosotros

-Enserio vayan sin mi- insistió Charles mirándonos desde el sofá- no tengo antojo de salir hoy

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-Enserio vayan sin mi- insistió Charles mirándonos desde el sofá- no tengo antojo de salir hoy.

-Eres todo un aburrido- dijo Layla tomando su bolso.

-Si porque estar con este yeso en las calles es muy cómodo- le respondió sarcástico.

-Bueno, volveremos antes entonces para que no te quedes solo tanto tiempo- habló esta vez Carlos.

-No se preocupen por mi, puedo estar solo.

Me imaginé muchos escenarios donde el idiota pudiera caerse y lastimarse, y aunque me emocionaba visitar ese restaurante me sacrifique por el castaño, a veces me pregunto si en realidad soy buena persona o simplemente soy muy boba.

-Chicos- llamé la atención- yo me quedaré, después de todo debo cuidar a Charles.

-No Ayla, ve con los chicos- habló de nuevo- seguro te la pasarás mejor allá.

Sé porque Charles no quiere ir y también sé porque quiere que yo vaya, la respuesta tiene tres letras "Max".

Nos reuniríamos con Max y Daniel en el restaurant, se supone sería una linda cena aprovechando las vacaciones de verano.

-Te dije que me quedaré- volví a hablar- si te pasa algo no quiero que tu madre me odie de por vida.

-No necesito que te quedes- su mirada denotaba molestia.

Charles es el tipo de chico que con una mirada entiendes todo lo que piensa, cuando está incómodo, feliz, tranquilo o molesto, como lo está ahora.

Si quería ir a esa cena y pasar un buen rato con mis amigos, pero tengo la ilusión de que Charles me necesita.

-No me interesa, me quedaré igual- dejé el pequeño bolso de mano en la mesa.

-Segura Ayla?- preguntó mi hermana y asentí con tranquilidad.

-Buenos chicos, pórtense bien nos vemos en unas horas- Carlos se despidió mientras mi hermana "disimuladamente" me guiñó el ojo y miró a Charles.

Nos quedamos solos en el departamento de nuevo, pero el ambiente estaba tenso, miré a Charles que simplemente jugaba videojuegos ignorando mi presencia.

Suspiré mirándolo unos segundos, aún enyesado lucía atractivo, mordía levemente su labio inferior concentrado en la pantalla frente a él.

-Iré a cambiarme- subí las escaleras sin obtener una respuesta de su parte.

Pov Charles

Me enfurecía saber que iría a verlo, peor aún que yo tenía que presenciar como se echaban miradas en toda la noche.

Así que preferí quedarme, evitar tener el impulso de golpearlo en frente de todos por besarla, a ella, mi chica.

Las cosas después del accidente quedaron inconclusas, después de aquella carrera planeaba ir a buscarlo y golpearlo, aunque no suelo ser una persona violenta eso quería, se supone que era mi amigo, él sabía sobre mis sentimientos hacía Ayla.

Fingiendo no amarte • Charles Leclerc Donde viven las historias. Descúbrelo ahora