Capítulo 30

6.2K 397 68
                                    

El día después

El día después —

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Charles

-Que extraño que me citaste- dijo Alex llegando hasta mí subiéndose al auto- habías dicho que estarías todo el día por tu madre.

Suspiré lentamente al verla, que sentía por Alex, se puede decir que fue un amor pasajero, hacíamos tantas cosa antes, pero era un amor real? Sentía esas inmensas ganas de estar con ella tal como las sentía con Ayla?

Es preciosa, inteligente, famosa, pero aunque fuera la mujer de ensueño de cualquier hombre, no es la mía, o al menos ya no, quizá suene como un miserable, pero así me sentía.

-Tenemos que hablar- le hablé rodeando mi cara cuando se acercó a besarme, cambió su mirada completamente, sabía que estaba por herir a una buena chica.

-De que o que?- preguntó arrugando la frente.

-Yo creo que en el fondo si sabes de que tenemos que hablar Alex- suspiré girando mi cuerpo hacía ella.

-No Charles- rió con cierta molestia- no se de que quieres hablarme.

-Bueno- tomé aire levemente mirándola- no podemos seguir juntos Alex.

-Que?- arrugó el ceño abriendo ligeramente la boca.

-No puedo seguir con esto- miré hacía el frente buscando las palabras adecuadas- lo de nosotros no tenía futuro Alex.

-No tenía futuro?- preguntó irónica- hace un año y medio estábamos planeando donde vivir- se quejó.

-Lo estabas planeando tu- respondí- Alex eres una chica increíble, eso lo sé, pero no eres la indicada para mí.

-Claro que lo soy Charles- ya varias lagrimas salían de sus ojos- no entiendo por que haces esto.

-Porque me estoy haciendo daño a mí, a ti y a- antes de terminar me interrumpió limpiando sus lagrimas con fuerza.

-Es por ella no?- dijo molesta- es por esa mosca muerta que solo vino a dañarnos la vida.

-Ella no me daño la vida Alex- la corregí- todo lo contrario.

-Si es por ella- afirmó decepcionada- te enamoraste de esa pobretona que nadie conoce.

-Nunca me interesó tu dinero o tu fama Alex- confesé mirándola, estaba mal ella- me gustabas y ya, pero ese fue el problema, que siempre sólo me gustaste, no logré enamorarme.

Fingiendo no amarte • Charles Leclerc Donde viven las historias. Descúbrelo ahora