Pequeña Casualidad | Pedri Part. I y II

Parte 79- ¿Voy.. o no?

NARRA ALEX

-Ya te dije que era por eso- me respondió Sira orgullosa. Justo acababa de contarle lo que había pasado con Pedri- El pobre daba por hecho que ibas a ir con el  y ni si quiera lo pensó.

Andaba de un lado a otro del cuarto preparando la maleta para viajar. Tenía otro concurso de salto a caballo el sábado y el domingo en Madrid, y estaba muy nerviosa. Si pasaba esta eliminatoria, quedaría clasificada para la siguiente tanda de concursos que serían en París, y ojalá fuera así porque con todo lo que estaba trabajando se lo merecía.

-Sí, el pobre ha llevado unas semanas super agobiado -recordé lo inquieto que estaba por las noches. Ni si quiera era capaz de conciliar el sueño a no ser que lo apoyara contra mi pecho y acariciara su cabello.

-Ya tía, Ferran igual , les están metiendo mucha presión con este último partido- me enseñó dos vestidos negros prácticamente iguales, uno era un poco más largo que el otro- ¿Cual?

Señalé el de la derecha, sabía que le favorecería más para la cena que tenía con los participantes del concurso el sábado por la noche. Además el escote en pico le sentaría super bien para el tipo de cuerpo que tenía ella.

-Pues si fuera tu, yo no iría- empezó Ana- se merece que no vayas por habértelo dicho tan tarde, así a la próxima que aprenda y espabile.

La sevillana había estado pasando más tiempo con Sira y conmigo los últimos días. La verdad es que Gavi me lo suplicó, porque no se estaba aclimatando muy bien a las prácticas y casi todo el mundo era muy mayor, por lo que Sira y yo intentamos incluirla un poco más en nuestros planes. No era mala niña, todo lo contrario, cuando la conocías bien era divertida y alegre, pero a veces muy intensa, lo que hacía que necesitaríamos un descansito de ella de vez en cuando. Y justo eso mismo era lo que estaba pasando ahora. Después de pasar toda la tarde juntas y oír sus quejas constantes y críticas a Gavi, que empezará a criticar y opinar sobre mi novio, no era fácil de escuchar. Además que no sabía nada de la relación que ambos teníamos.

-Venga Ana, Alex y Pedri están prácticamente casados, no van a entrar en crisis por algo tan tonto como esto- se burló mi amiga. Y me dieron ganas de matarla. Era cierto que Pedri y yo estábamos genial, pero no quería airearlo tanto con Ana delante, porque aun no teníamos tanta confianza, y yo era muy mía para el tema de mi relación. Además, Pedri y yo quedamos que no dejaríamos que el resto de gente se metiera en lo nuestro, por lo tanto, cuanto menos aireara cosas nuestras mejor.

-Bueno, aun así sigo diciendo que viene bien hacerse la dura de vez en cuando - insistió la sevillana. Cogió su móvil para ver la hora- Ay que tarde, que he quedado con Gavi, nos vemos en la cena Sira- se despidió de ella primero con un abrazo y cuando le tocó venir hasta mi se paró en seco - y bueno Alex.. nos vemos, pues no se cuando- rió dándome otro abrazo rápido y salió por la puerta corriendo.

Sira y yo nos quedamos un ratito en silencio observando la escena sin saber que más añadir.

-Esta chica es más rara - suspiró Sira sentándose a mi lado.

-Creo que me odia-admití yo no solo por la despedida tan rara que acababa de tener conmigo comparada con la de mi amiga, sino porque sentía que nunca íbamos a cuajar del todo. Teníamos personalidades y prioridades muy diferentes, siempre que había un acercamiento por su parte sentía que lo hacia un poco por interés.

-Es normal, su novio esta más coladito por ti que por ella.

-¡¡Sira!!- me quejé. Sabía que bromeaba, pero era un tema sensible- Gavi y yo solo somos amigos.