Capítulo 21

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Clases. Clases. Clases. Clases.

Anh intenta consolarse a sí misma pensando en que las vacaciones están a la vuelta de la esquina. No lo logra. No con el cansancio calándole hasta los huesos. Entumeciendo su mente. Necesita de toda su concentración y enfoque para estas últimas semana.

Su enfoque en este momento se encuentra en algo más importante.

Acaba de terminar de leer la biblia. Una parte de ella sigue con cada palabra en mente. Masticándola, reflexionando al respecto. Afirmando su propio pensar sobre lo efímero de la existencia humana.

Le gusta pensar en ello como un cometa. En un segundo se encuentra brillando en el cielo, y al otro ya no. Una existencia tan breve como el paso de una estrella fugaz en el cielo nocturno.

Demasiado corta para arrepentirte o para desperdiciarla en todo lo que está vacío.

Demasiado corta para invertirlo en lo que no vale la pena.

Siempre piensa en ello. En lo que vale la pena y lo que no. ¿Cómo diferenciarlo?

Ha escuchado todo tipo de consejos.

Y todos la llevan a la misma conclusión.

Sobre toda cosa que guardes, guarda tu corazón, porque de él mana la vida.
Proverbios 4:23

Quizá nadie piense igual a ella. Quizá nadie se encuentre de acuerdo.

Le da igual. Ella tiene certeza sobre su respuesta.

Orar cada día. Agradecer por todo. Disfrutar cada atardecer. Admirar el cielo y recordar a dónde pertenece. Sonreír, sin razones o con ellas siempre existen razones para reír al menos una vez. Y si no las tienes puedes causar esa risa en alguien más. Ser amable. Mantener un corazón lleno de calidez. De ganas de amar ¿Por qué debería avergonzarle sentir y permitirse ser vulnerable? Lo vergonzoso sería entregarle su corazón a cualquiera. Hablar con palabras de aliento. Motivar. Inspirar. Reparar. Unir. Guíar. Y antes de todo: Escuchar. Entender. Comprender.

Recordarles a las personas que ama, que las ama, en los peores momentos es común olvidarlo, repetirselos a diario. Más que recordárselos, mostrarlo.

Perdonar. Se dio cuenta muy tarde todo lo que perdió por guardar rencor. Pedir perdón cuando comete un error. Y cambiar. Cambiar y progresar. Todo el tiempo. Sumarle a las personas que la rodean y alejarse de las que no hacen lo mismo por ella: De todos puedes aprender algo, pero eso no significa que todos te hagan bien. Dejar ir lo que te lastima y luchar por lo que sabes vale la pena.

Permitir que la literatura y el arte le arrebate emoción. Coleccionar conversaciones profundas. Salir a comer a su lugar favorito, aprender todos los temas que ama, almacenar todos los recuerdos y memorias que pueda. Centrarse en sus metas, cuidar su corazón. No lastimar a otros con su indecisión, o porque desea tener a alguien a su lado, gritar su amor solo cuando esta segura que esa persona es con la que quiere pasar el resto de su vida. No pensar solo en la emoción. Ser observadora y cautelosa. Y no temer al miedo, temer cuando éste la paralice de avanzar.

Luchar por personas, por los que ama, por sus sueños.

Luchar hasta el cansacio. Si anhela algo, no esperar a que la oportunidad llegue a su puerta, debe salir a buscarla. En el camino, si es para ella todo caerá en su lugar.

No guardar nada. Decirle a las personas lo importantes que son. Decirles cuando sus comportamientos le duelen. Alejarse cuando siguen sin darle importancia. No contar sus planes. Trabajar por ellos.

Acariciar el cachorro que vió pasar por la calle, observar todo como el privilegio que es vivir.

Está aquí. Ahora. Tiene la posibilidad de cambiar en cualquier momento. Está viva. VIVA. Con su corazón latiendo y sus pulmones llenándose de oxígeno.

Colisión Where stories live. Discover now