Narra Dylan:Estaba sentado en la cama de Sak, al lado de ella, entonces tragando saliva hablé.
— Lo siento... - Dije entrelazando los dedos.
— No tienes porque...
— Sí, si tengo porque, yo... en serio lo siento, no debí comportarme así, no es justo...
— Deja de atormentarte. - Pasó uno de sus dedos por mí, y sentí un pequeño escalofrío.
— Te quiero, y no quiero que te lleves una mala impresión de mí, y ese día en el concierto, sabía que la había jodido. - Dije nervioso.
— Ven aquí. - Me envolvió en sus brazos y sentí la calidez de todo su ser reconfortando el mío, se sentía tan bien, hice lo mismo correspondiendo a su abrazo, acariciando su cabello, su cara.
Joder.
Te deseo con todas mis fuerzas Sak.
— por cierto... - Se aclaró la garganta, pero aún continuaba abrazándome. - Cuándo aprendiste a hablar Italiano? - Preguntó con interés.
— Cuando supe que te gustaba Maneskin, cuando desde niña cantabas a todo pulmón, y tu sonrisa no tenía precio, cuando supe que había comenzado a tener sentimientos hacia tí.
— Yo pensaba que no sentías lo mismo, supuse que habían chicas mejores. - Fruncí el ceño.
— Pero ninguna de ellas eran la mujer qué aún sigo amando, tú... y eso era lo que me mataba por dentro cuando me fuí, cuando no podía tocar tu bello rostro más.
— Estás aquí...¿ y ya no te irás no?
— No, al menos que tú lo quieras.
— Quédate entonces por mí siempre. - Se aferró a mí con fuerza.
— Tú también... quédate aunque sea solo una noche.
fué donde me dí cuenta que ella era ese alguien a quien no quisiera perder.
A quién pasaría viendo horas, y horas, y no me cansaría.
A la que me robaba el aliento, y me dejaba sin palabras.
A ella... la dueña de mi corazón.
Sak...
*******
ContiNuará....
YOU ARE READING
Mitad Experimento
RomanceSakura es una joven de unos 17 años lo que más le atormentan son sus pesadillas, aquellas que parecen más reales y que nunca podrá sacarlas de su mente, (o eso es lo que ella cree). Un día al ir directo a su casa descubre un secreto, aquel secreto...