7."Saint Laurent: una película de terror continua."

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Lucía me abraza mientras observamos cómo traen el cuerpo de Lexie Casanova en una bolsa de plástico negra, sobre una camilla. Mis piernas no han parado de temblar cual gelatina desde que salí de aquella cabaña con Lili. La directora Davis pasa junto a nosotras, dándole una mirada que no logro descifrar a mi hermana.

—¿Pasó algo con Lilith? —le pregunto a Lucía en voz baja.

Desde que encontramos a Lexie, Lilith no ha parado de llorar, está en su habitación, con la señora Parker, la doctora del internado. Es como una madre para ella y está apoyando a Lili después de haber encontrado a su amigo muerto.

—Lilith está bien. —me dice Lucía, susurrando. —Pero nosotras debemos hablar.

—¿Qué sucede? —le pregunto confundida.

Lucía observa a nuestro alrededor a los estudiantes que se encuentran presenciando la escena con tristeza. Tira de mi mano, alejándonos de ellos. Cuando nos detenemos, puedo ver el nerviosismo por toda su expresión.

—¿Qué sucede, Lu? —vuelvo a preguntar duramente.

—Olvida lo que viste en la cabaña. —suelta, seria. Abro mi boca sin saber qué decir. —Sólo olvídalo, es lo mejor, ya tienes suficiente con lo que pasó en Madrid, esto solo...

—No. —la detengo. —Esto no es por lo que pasó en Madrid. —mi hermana baja la mirada, mostrando su culpa. —¿La directora Davis tuvo algo que ver con esto? —pregunto, recordando la mirada que le dio hace minutos.

—¡No! —niega con rapidez. —Por Dios, no. —vuelve a negar bajando la voz y viendo hacia la pequeña multitud que está a lo lejos. —Katie no tuvo nada que ver con esto.

—Entonces no entiendo. ¿Por qué quieres que lo olvide? Lucía, explícame porque te juro que no te estoy entendiendo. —le chillo, al borde del colapso.

—Porque alguien asesinó a Lexie, Olivia. —contesta con la voz temblorosa. —Por eso debes olvidarlo.

—Lu, si lo que dices es cierto, hay un asesino suelto donde nosotras estamos. ¿Acaso perdiste la cabeza? ¿Cómo esperas que lo olvide? —le reclamo, gesticulando con las manos con desespero. ¿Qué clase de persona puede quedarse tranquila y callada después de presenciar el cadáver de esa chica? Es algo inhumano.

—La persona que asesinó a Lexie tenía un motivo. —me cuenta con lentitud. —Lexie tenía un secreto.

—¿Qué secreto? ¡Habla de una vez!

—¡No lo sabemos!, Olivia. No tenemos ni idea porque está muerta. Lexie quería hablar con Katie y conmigo mañana a primera hora. Quería contarnos lo que ocultaba, dijo que no podía más con eso y que debía decirnos.

—Pero la asesinaron antes de que pudiera decirlo. —susurro, comprendiendo.

—Por eso no dirás nada. Olivia, entiéndelo. —me ruega.

—Lu, nosotras podemos...

—Nosotras no podemos hacer nada. —me interrumpe.—Me desobedeciste una vez y casi moriste.—dice entre dientes, molesta.—Ten cuidado, Olivia, esta vez podrías no tener tanta suerte. Creo que Lexie es ejemplo suficiente para entender que no debemos meternos en el camino de quien sea que haya hecho esto.—finaliza, dándome la espalda.

Veo a mi hermana alejarse mientras mis ojos se cristalizan. No puedo creer que haya tocado ese tema una vez más. ¿Cómo puede que hable con ella sobre eso si después me lo recuerda de esa forma tan horrible? Y peor, utilizando la muerte de Lexie para llenarme de miedo, como si el cuerpo de la chica no estuviese aún caliente.

Seco una de mis lágrimas y vuelvo a ver en dirección a los alumnos que se encuentran a lo lejos; notando que uno en particular está viéndome e incluso después de que nuestras miradas se encontrasen, la mantiene y sus ojos me miran con una intensidad que soy incapaz de descifrar. El ceño se Ascian se encuentra fruncido, serio y segundos después de que nuestras miradas conectaran, se da la vuelta y comienza a caminar hasta perderse de mi vista.

JUEGOS DE PODERWhere stories live. Discover now