Capituló 17

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—Espero que esta visita sea cordial y que tú y yo podamos hablar. —mencionó César acercándose un poco más a él a una distancia considerable, desvió su mirada y se encontró con ese hombre, el de la grabación el llamado Miguel y del otro lado un hombre—

—Pues la verdad para ser sincero no sé que vienes a buscar a mi casa y tampoco creo que tú y yo tengamos algo de que platicar. —respondió Tom con una sonrisa de burla dándole una jalada más a su cigarro—

—Te equivocas Tom, tú sabes perfectamente porque estoy aquí y no me pienso ir hasta que me devuelvas lo que es mío. —mencionó mirándolo de frente sin miedo alguno—

—Yo no tengo nada tuyo. —respondió enfadado

—No seas cobarde y acepta lo que hiciste. —lo retó—

—No tengo nada que aceptar.

—Pensé que eras un chico con más huevos y que al menos aceptarías lo que hiciste pero ya veo que no, te escondes atrás de estos muros y de una bola de mediocres para no aceptar lo que hiciste.

—Tú no vas a venir a mi casa a insultarme. —mencionó llevando una de sus manos hasta su cintura buscando su arma—

—Solo estoy diciendo la verdad, aquí el único que se está escondiendo eres tú Montiel aquí está y quiero que me devuelvas a Sara.

—¿Sara? Discúlpame pero yo no conozco ninguna Sara.

—Qué infantil eres Tom, quieres adueñarte de alguien que no es tuyo y todavía te acobardas y lo niegas. No entiendo cómo un payaso como tú eres uno de los capos más importantes de este país. —pronunció César con una sonrisa de burla en su rostro haciendo reír a John y ha los otros tres hombres que estaban tras de él—

|En eso Tom sacó su arma enojado y le apuntó a César sin que le temblara el pulso.|

|Los hombres que estaban tras de él y John hicieron exactamente lo mismo y apuntaron hacia Tom.|

|César solamente sonrió, buscó en el interior del bolsillo de su gabardina la cajetilla de cigarros, sacó uno y lo encendió y le dio varias jaladas con una sonrisa en el rostro mientras que Bill y Miguel apuntaban también hacia el.|

—No creo que quieras hacer esto Tom. Baja tus pistolitas y devuélveme a Sara y me voy, esto no era para que llegara a tanto solo acepta lo que hiciste y pídeme una disculpa.—propuso— 

—Estás bien pendejo, no te la pienso entregar y mucho menos voy a disculparme contigo por muy emperador que seas. —respondió sin dejar de apuntarlo—

—Al menos ya aceptaste que si la tienes y en cuanto a la disculpa está bien puedo sobrevivir sin eso, pero devuélveme a Sara y me iré sin disparar ni una sola arma. 

—Tú no me vas a venir a decir que es lo que yo tengo que hacer. —lo retó—

—Creo que no estás entendiendo mi idioma, a  ver chicos... ¿Estoy hablando en español en inglés o estoy hablando en Alemán?. Porque este tipo es un alfabeto que no sabe lo que estoy hablando. —mencionó haciendo reír de nuevo a sus hombres— 

|Tom enfurecido al sentir que se estaban burlando de él, avanzó un poco sin dejar de apuntarlo.| 

|Pero César solo seguía sonriendo mientras que le daba unas jaladas a su cigarro sin ningún tipo de temor y eso era algo que realmente a Tom le molestaba.|

—Quiero que te largues de aquí si no te quieres morir. —mencionó levantando una de sus manos, haciendo que varios hombres que se encontraban alrededor de la propiedad lo apuntaran—

The Káiser (Reyes de la oscuridad pt2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora