La Princesa otaku trabaja duro hoy

🪷 Capítulo 35 🪷

La presencia de un Príncipe Heredero y una Princesa sin casarse ​​en el Palacio Imperial era una oportunidad única en la vida para los nobles con hijos de edades similares.

Algunos nobles extremos utilizaron todo tipo de métodos para hacer que sus hijos fueran atractivos para la Familia Imperial. Esto fue especialmente cierto para las madres nobles con hijas.

La Princesa Agnes tenía un hombre al que cortejaba claramente, pero no era lo mismo para el Príncipe Heredero Demian.

El lugar junto a Demian estaba vacío, habiendo roto su compromiso debido a la muerte de su prometida hace unos años. Además, era muy guapo, no tenía antecedentes con mujeres y era muy calmado.

Por lo tanto, todos los nobles que tenían hijas en edad de casarse estaban ansiosos por tener al Príncipe Heredero como yerno. Por otra parte, la Princesa Agnes no sólo tenía un claro hombre al que cortejaba, sino que incluso había rumores de que era violenta.

Quizás por eso estuvo relativamente excluida de la atención de los nobles que tenían hijos. Sin embargo, recientemente hubo rumores de que la relación entre Raymond Spencer y la Princesa se había agriado.

—Debe ser el capricho de la Princesa. ¿Cómo podría renunciar a Raymond Spencer si siempre hace todo por conseguir lo que quiere?

—Sí, pero... ¿No escuchaste que no se han encontrado últimamente? Por supuesto, Sir Spencer partió hacia una larga misión.

—¿Es eso así? Entonces...

—¿Es realmente posible que ambos se hayan peleado? ¿No significa eso que desaparece la posibilidad de su matrimonio?

La noticia fue un rumor que satisfizo tanto a los nobles con hijas como a los nobles con hijos.

Los nobles con hijas comenzaron a nombrar a Raymond Spencer como futuro yerno, seguido del Príncipe Heredero. Además, los nobles que tenían hijos en edad de casarse imaginaban que sus hijos se casarían con la Princesa y se convertirían en yernos del Emperador.

El Emperador con el poder imperial más poderoso de la historia... Consideraba a su hija tan preciosa como una joya... Una hija algo violenta, pero muy hermosa.

Claramente el Emperador regalaría todo tipo de joyas preciosas y riquezas al hombre que se casara con su hija. Incluso, gracias a su fuerte autoridad imperial, podría darle a su yerno un título inimaginablemente alto y poderoso.

Durante generaciones, fue una tradición en el Palacio Imperial otorgar grandes títulos a los yernos del emperador.

Además, con el rumor de que la Princesa curó a los aldeanos durante su última misión, su imagen violenta se suavizó un poco.

Los nobles de todo el Imperio estaban muy ocupados.

Las damas nobles hicieron todo lo posible para hacerse amigas de la Princesa, tratando de averiguar sobre las fiestas y bailes a los que asistiría.

Incluso cuando los maridos se ocupaban de los asuntos gubernamentales en el Palacio Imperial, cada vez que se encontraban con el Emperador, se jactaban de sus hijos de alguna manera.

Y... Toda esta situación hizo que alguien se sintiera incómodo. Exactamente se trataba del padre de Raymond Spencer, el Duque de Spencer.

El Duque de Spencer, famoso por su gentileza, también era uno de esos padres que querían que sus hijos se convirtieran en miembros de la Familia Imperial.

—¿Qué? ¿Hay rumores como ese circulando?

El Duque de Spencer estaba de camino a la capital después de ocuparse de los negocios en su territorio durante los últimos meses.