𝐎𝐮𝐫 𝐂𝐢𝐧𝐧𝐚𝐦𝐨𝐧 𝐆𝐢𝐫𝐥 ; Enzo Vogrincic y Matías Recalt

12. Steal My Girl

...

(Isabella's Version)

—Si no como algo pronto, voy a cometer un crimen de odio —Exclamó Juani, cruzando los brazos y dejándose caer en el sofá.

Isabella se río mientras acomodaba las cosas que llevaría en el bolso, pues aquel día decidieron que los cuatro (junto con Mely, quien se coló al plan) saldrían a conocer Madrid, ya que hasta ahora no habían tenido la oportunidad de explorar mucho.

—Lo que más me sorprende es que tú hayas estado listo a tiempo. —Murmuró ella, colocándose algo de labial para así terminar de guardar el resto de sus cosas.

—Es que planeé mi outfit desde ayer —El chico la observó con una sonrisa, mostrándole todos los dientes como un niño pequeño, lo cual hizo que Isabella lo mirara con un puchero.

—Cuando eres así de tierno hasta me caes bien. —Ella igualmente le sonrió, a lo que Juani respondió arrugando la nariz en señal de desagrado.

—Vos ya no me caes bien —La observó con los ojos entrecerrados antes de mostrarle la lengua y taparse el rostro con una de las almohadas que decoraban el sofá para no tener que seguir hablándole.

—¿Qué le haces al niño, Val? —La voz de Matías a su lado hizo que su sonrisa se ampliara aún más—. Buenos días, por cierto.

La mano del castaño se deslizó por su cintura para atraerla hacía su cuerpo, a lo cual ella negó de inmediato mientras señalaba con la cabeza a dónde se encontraba Juani, pues aún no quería que se enterara de lo que sea que estuviera pasando entre ellos.

Él se limitó a encogerse de hombros, inclinándose un poco para alcanzar a susurrar en su oído.

—Te queda muy lindo el color, ojalá poder quitártelo a besos —dejó un pequeño pico sobre sus labios antes de finalmente separarse justo a tiempo, ya que, segundos después, Juani les lanzó el cojín.

—¿Qué tanto se secretean, par de giles?

Isabella soltó una risita nerviosa, la cual se convirtió en un grito ahogado cuando se percató de que Matías tenía los labios pintados de rojo gracias a su labial.

En un rápido movimiento, tiró de su mano lo más disimuladamente posible para evitar que quedara de frente a Juani y así poder comenzar a restregar la palma contra su boca en un intento por deshacerse la evidencia.

—Nada, le estaba diciendo que eres un dramático y que tenía pasta de dientes —aseguró ella, echando un último vistazo al rostro del chico para confirmar que ya no hubiera rastro alguno de sus pecados—. Ya quedó, parece que tengo puros niños chiquitos a mi alrededor —articuló un "lo siento" hacía él, quien se estaba sobando la cara ya que la castaña casi le había arrancado los labios.

—Te recuerdo que la pequeña acá sos vos —Matías pasó por detrás de ella—. A veces no sé si te gusto o si me odias —susurró, encaminándose hacía Juani para tomar asiento junto a él.

Isabella suspiró, pues no podía evitar sentirse algo culpable de querer esconder la situación a toda costa, pero la realidad era que aún ni siquiera sabían si aquello iba a llegar a algo como para querer gritarselo al mundo entero. Principalmente, se quería evitar cualquier tipo de inconveniente con su primo, ya que, a final de cuentas, él la había traído para trabajar, no para que se besara con sus amigos y compañeros de trabajo.

—Perdónenme la vida, tardé más de lo que esperaba. —La voz de Enzo irrumpió en la sala, para luego ser seguida por la presencia del chico.

—¿En verdad tardaste tanto tiempo para acabar vestido como Isabella? —Juani negó, sin poder esconder sus ganas de reírse.

La chica levantó la mirada al escuchar aquello, abriendo la boca con sorpresa al notar que Enzo se encontraba vestido casi con las mismas prendas y colores que ella, pues los dos iban con camisas de cuello largo color negro y abrigos beige; la única diferencia evidente era que Isabella estaba usando falda y Enzo pantalón, pero igualmente, ambos eran negros.

—Bueno, al parecer nuestro feed de Pinterest es el mismo. —Bromeó, aún sin poder creer que incluso estaban usando botas parecidas.

—Tal parece que nos complementamos a la perfección —Enzo le regaló una sonrisa, la cual ella no pudo más que corresponder—. Te voy a tener que robar para alguna foto, no podemos desaprovechar la oportunidad.

—Y también le podés robar el bolso, te va a combinar incluso mejor que a ella —secundó Juani uniéndose a la broma mientras se levantaba del sofá—. Bueno, vámonos que necesito desayunar.

Y por supuesto, Enzo no dudó ni un segundo en aprovechar el comentario de Juani para poder tomar el bolso de la chica, guiñándole un ojo mientras se lo colgaba con la intención de llevárselo.

—No es necesario que le hagas caso, lo sabes, ¿verdad? —Ella le dijo, acercándose a él para tratar de recuperarlo, a lo cual recibió una rotunda negativa por parte del mayor.

—Lo sé, pero quiero hacerlo. —Le aseguró, para luego apresurarse a salir detrás de su primo.

—Esto debe ser un pésimo chiste. —Murmuró Matías, quien claramente escondía su fastidio detrás de una sonrisa falsa mientras salía por la puerta.

Isabella tardó algunos segundos en moverse, pues se encontraba procesando toda la situación. En ese momento, lo único que sabía con certeza era que aquel sería un día sumamente largo.

...

—¡Hola, chicos! —Saludó Mely mientras caminaba hacía ellos, ya que habían quedado de verse en la entrada del complejo, pues ella vivía en los apartamentos de enfrente.

En cuanto llegó hasta donde estaban, fue evidente cómo recorrió de arriba para abajo a Enzo y a Isabella con una mirada confundía, para después rematar su obviedad posando la vista sobre Matías; aunque, gracias al cielo, no hizo comentario alguno, al menos no hasta que estuvo cerca de su amiga.

—¿Me vas a dar contexto o saco conclusiones? —Susurró, fingiendo saludarla con un abrazo.

—Ni siquiera yo sé el contexto —Admitió ella, frunciendo los labios en una mueca una vez que se separaron.

—Bueno, chicos, ¿preparados para que les dé el mejor tour de su vida? —Juani sonrió ampliamente, levantando las llaves del auto para que todos pudieran verlas.

—¡Yo pido ir enfrente! —exclamó Mely, saliendo disparada hasta la puerta del auto incluso aunque Juani aún no lo abría.

Isabella no pudo más que suspirar, ya que eso significaba que tendría que ir en el asiento de atrás junto a Enzo y Matías durante todo el trayecto. Una horrible y humorística metáfora de la situación en la que se encontraban en ese momento.

...

"Everybody wanna steal my girl
Everybody wanna take her heart away
Couple billion in the whole wide world
Find another one 'cause she belongs to me"

...

Tarde pero seguro. Prometo que se los voy a rematar bien en la parte dos. 🙏