cuatro ; turbulencias

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Victoria caminaba nerviosa por la pista del aeropuerto, su corazón se aceleraba mientras se acercaba al avión

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Victoria caminaba nerviosa por la pista del aeropuerto, su corazón se aceleraba mientras se acercaba al avión. Con una mezcla de emoción y aprensión, dejó que sus guardaespaldas se encargaran de sus maletas y la escoltaran hacia la entrada del avión.

Al encontrar su asiento, suspiró aliviada y se dejó caer en él, sin mirar a su espacio. Cerró los ojos dejando escapar un suspiro pesado.

-¿Primera vez en avión? -Una voz familiar la espetó. Volteó hacia su lado, viendo como con una sonrisa nerviosa, Enzo le ofrecía una mirada cómplice.

-Ay, dios, Enzo -Exclamó poniendo una mano en su pecho -No te había visto

-Si, me di cuenta -Sonrió -Entonces, ¿Que pasa?

-Primera vez en avión, vos lo dijiste -Suspiró -Enzo..-Murmuró, viendo como se ganaba la mirada atenta de él -Gracias por lo del otro día. Si no me acompañabas capaz que Bayona ni me conocía -Murmuró divertida. Enzo solto una risita

-No, tranquila. No fue nada -Victoria apretó los labios con ternura, pero su sonrisa se desvaneció rápidamente cuando cuando avión comenzó a andar.

Asustada, Victoria apretó el apoyabrazos, sintiendo cómo el avión comenzaba a moverse por la pista. Ni siquiera oía al capitán anunciando la salida, estaba demasiado tensa para hacerlo. Enzo a su lado, notó su ansiedad, y lentamente su mano contacto la de ella. Victoria se estremeció ante aquel toque, pero Enzo le brindó una sonrisa tranquilizadora

-No te preocupes, todo está bien. Solo están despegando -Volvió su mirada al frente, tranquilo

-¿Que pasó, estas asustada? -Una voz divertida a su derecha llamó su atención, era Matias, uno de los chicos del cast que conoció en la cena. Se lo notaba tranquilo y divertido ante la situación

-Callate, matias -Lo retó Enzo. Matias hizo una mueca y volvió a su asiento -Es medio pavo cuando quiere -Victoria rió.

El avión estaba por despegar, y Victoria apretó aún más la mano de Enzo inconscientemente. El no dijo nada y miró por la ventana. El avión despegaba, y Enzo sentía el agarre de su mano ser cada vez más fuerte.

Después de unos minutos, cuando el avión estabilizó su rumbo, Victoria abrió los ojos lentamente y miró por la ventana a través de Enzo. La vista de las nubes bajo ellos la dejó sin aliento, y poco a poco comenzó a relajarse, sintiéndose más segura con cada minuto que pasaba.

-¿Viste? No era la gran cosa..-Ella asintió, sintiendo el peso de los nervios en sus hombros disiparse.

La mirada de Victoria se desvió hacia un lado cuando oyó la voz de su amigo Francisco a su lado. Se encontraba hablando con un chico, que, francamente tampoco había llegado a conocer muy bien

-Que lindos ojos -Soltó el chico, y literalmente los ojos de Fran se iluminaron

-Gracias -Se dio vuelta en el asiento, y muy cerca de él, preguntó: -¿Querés que nos demos un beso? -Todos en la cabina rieron, Fran era un aparato

REPUTATION   ✶   enzo vogrincic Donde viven las historias. Descúbrelo ahora