16

1K 234 210
                                    

Yoongi se encontraba sentado en la cama, sus caderas dolían y también su interior estaba un poco hinchado, por lo que le dificultaba hacer algunos movimientos y no podía salir a dar un paseo a los jardines. Dio un respiro profundo mientras en sus manos sostenía un fresco de sandía que Hani le llevó para soportar un poco el calor, dio otro sorbo, pensativo. Como deshacerse de esa mujer antes de que cometiera sus intentos de asesinato. Primero, debería empezar a ser cuidadosos con las bebidas de té, ordenaría que las bebidas sean hechas frente a él.

Se bajó de la cama con cuidado, caminando a pasos lentos, tal vez sería mejor descansar en el jardín, bajo un árbol que le diera sombra. Se dirigió con cuidado con el vaso en manos, Hani al ver a su señor salir por la puerta, apresuró sus pasos, tomando a su señor del antebrazo para ayudarlo a bajar, mientras la otra ayudante, tomaba el vaso de jugo para llevarlo. El omega logró llegar a la banca bajo el gran árbol de cerezo que se encontraba en su momento de floración, el rubio no pudo evitar mirar maravillado como las flores rosadas adornaban y algunas caían con delicadeza.

—¿No es bonito? le pregunté a MinHo hace cuanto tiempo estaba este árbol aquí, dijo que el árbol aún es joven, tiene 22 años—comentó con suma emoción aquella doncella—, usted habrá tenido unos ocho años cuando este árbol nació, estuvo incluso antes de que este palacio fuera construido.

—¿El palacio es nuevo?

—No tiene más de diez años, las doncellas dijeron que cuando su alteza se convirtió en General, ordenó que hicieran este palacio.

—Pensé que alguien vivia en este lugar años atrás... es bastante bonito.

—Incluso la señora Kim pidió este palacio a su hijo; pero él dijo que solo se lo daría a quien se convirtiera en su esposa. Tiene mucha suerte, mi señor.

—Entonces este sería el palacio de mi hermana...sabes muy bien que ella era quien se casaría con el General.

Ambos se contemplaron en silencio, Yoongi le dio un sorbo a su fresco, mientras una ayudante se acercó a darle aire con un abanico hecho de plumas. El omega sintió mucha tranquilidad,cerrando sus ojos para poder dormir un rato, tener sexo con el alfa, fue bastante desgastante para su débil cuerpo, necesitaba energía. Empezó a sentir sueño, casi dejándose caer sobre la almohada tras su nuca que Hani le acomodó con cuidado, ya empezaba entrar en sueño hasta que escuchó unos gritos afuera de su palacio y abrió sus ojos con rápidez.

—¡Déjenme entrar! ¿Cómo se atreven a detenerme?—se logró escuchar una voz que Yoongi le resultó familiar.

El omega suspiró con pesadez, vio como en la puerta apareció la señorita Seo Yeji, la ahora nueva concubina de su esposo, el rubió tomó su fresco y le dio un sorbo, tratando de mantenerse calmado, aunque solo sentir el aroma, le daba náuseas.

—¿Qué sucede?—interrogó Yoongi a su doncella.

—Iré a ver.

Hani se movió del lado de su señor, apresuró su caminar hasta llegar por la puerta, viendo a la nueva concubina que ingresó la noche anterior, Choi MInHo estaba tratando de detener que la mujer pasara.

—Saludo a la cuarta Concubina, señorita Seo...¿Puedo preguntar, qué se le ofrece?—comentó Hani manteniendo una voz serena—, debe tener una cita previa para visitar al Esposo Consorte en su palacio

—¿Por qué debería? muévete—ella logró liberarse de los guardias y quiso ingresar pero Hani se puso enfrente—¿Te atreves a detenerme? soy la hija del séptimo ministro y una noble, sirvienta inútil.

Yoongi se sobresaltó cuando escuchó el sonido de una cachetada, contempló a la otra ayudante, la cual se dirigió en dirección de la puerta, pero vio como aquella concubina ingresó y luego Hani que mantenía su rostro agachado y temblorosa se acomodó al lado de su amo. Min Yoongi frunció el ceño, tomando el rostro de ella, al girarlo, notó la mejilla resaltada, suspiró con pesadez.Se mantuvo en su puesto, tratando de mantenerse sereno y no caer a la provocación de aquella mujer: ¿Cómo pudo pensar que un ser tan cínico como ese, fue considerado en la primer y segunda vida su mejor amiga? fue hasta en la tercera vida que se dio cuenta, de quien era en realidad. Cuando fue consumido por el fuego y ella se encargó de cerrar las puertas de su cuarto, manteniendo una sonrisa diciendo al final: "No es algo personal, joven Min" y dicho eso, lo dejó morir entre las fuertes llamas, sin salvación alguna.

Sukha||Taegi.Where stories live. Discover now