DxD:Regreso al pasado.

Arco 0: ¿Crees en...?

Creerle a una persona nunca está mal. Entonces…¿Por qué la gente empieza a dudar cuando revelan algo demasiado exuberante?

Generalmente le confiamos o creemos a la gente con la cual nos sentimos más cómodos y pasamos más tiempo de nuestra vida. Sin embargo, aquellas personas te pueden estar mintiendo.

Entonces…¿No creemos algo porque no queremos o…? Hay diferentes motivos.

Pero recuerda…hasta la persona en la que más confías te puede estar mintiendo y tú le crees.

-...-. Una chica se encontraba en silencio en una sala bastante cómoda, se veía el ambiente tan caliente que abrazaba con fuerza apenas se adentraba a este mismo.- Solo un poco más-. Susurro un poco dichosa mientras arreglaba un poco más su cabello, se encontraba sentada en una silla bastante cómoda que era acompañada de un escritorio donde se veían muchos papeles.- ¿Debería guardar esto? Sería de mala impresión mostrar todo esto-. Se pregunto a ella misma, parecía que todo fuera perfecto por más de que fuera una simple charla.

Su cuerpo tembló un poco debido al nerviosismo que estaba presentando actualmente, su mirada vaciló un poco y empezó a bajar por todo su cuerpo, explorando si no había tan solo una mancha de suciedad o imperfección.

Parecía…o era una princesa.

-¿Huh? ¿Ya llegó?-. Se pregunto un poco sugerente mientras veia a la puerta que había sido tocada levemente, dando incapié a que su invitado había llegado al horario propuesto por ellos en la mañana de ese día.

Empezó a dirigirse a la puerta mientras suspiraba un poco, no quería mostrarse nerviosa frente al chico con el cual tenía ganas de hablar, pero su inexperiencia con el género masculino empezó a mostrarse poco a poco.

Se tomó un largo respiro antes de abrir la puerta y ver al chico que ella había estado esperando desde que terminaron las clases.

-¡Bienvenido, Ise!-. Ella dió una cálida bienvenida al chico que sonrió un poco mientras empezaba a acercarse un poco.

-Rias-senpai-. Dijo que chico consciente de la belleza de la Gremory, por lo que empezó a dar una reverencia en señal de respeto y saludo.

-No hace falta tanta formalidad, Ise-. Ella pidió un poco sorprendida y levemente incómoda por todo ese respeto.

Issei entendió que quería ser tratada como una chica sin muchas formalidades, levanto su cabeza poco a poco antes de verla con una sonrisa de lado y empezar a mostrar un pequeño paquete que traía.

Ella levanto una ceja en señal de estar confundida por las palabras del chico que extendió el paquete a la hermosa pelirroja.

-¿Es para mí?-. Se encontraba confundida, no había recordado pedirle algo al chico que estaba mostrando tan lindo gesto, un pequeño sonrojo empezó a mostrarse en el rostro de la chica por la ocurrencia de no haberle comprado nada a su kohai-. G-gracias…

Simplemente pudo agradecerle mientras tomaba el regalo con vergüenza antes de abrirlo, sorprendiendose por los chocolates que traía. ¿Como el chico sabía que le gustaban esos chocolates?

-Nadie rechazaría unos chocolates tan ricos…supuse que a ti también te gustaría-. Sonrió Issei, pero dentro de él se estaba regañando mentalmente por casi meter la pata. Entonces pudo ver a la hermosa chica empezar a sonreír mientras unas estrellitas se dibujaba en su rostro.